Transcripción automática
0:00:00 Continuamos en la venganza Será Terrible, estamos aquí en el auditorio de Radio del Plata,
0:00:08 Gorriti 5963. Entre Ravi y Niani, y también la otra.
0:00:11 La semana que viene estaremos el lunes, haremos programa en vivo, pero en la casa de la provincia de Buenos Aires,
0:00:18 en la avenida Callao 237, es Callao y Perón.
0:00:22 Si a las 8 y media de la noche, esto acercándonos al trigésimo aniversario.
0:00:27 Si, el año que viene se liberaremos nuestros 30 años con la radio, pero ¿qué podemos hacer?
0:00:34 Habría que buscar algo que correspondiera con eso, por ejemplo, no sé qué, hay de 30.
0:00:41 30?
0:00:42 Alí va a bailar los 30 ladrones.
0:00:44 No, señor, pero no son los 30 ladrones.
0:00:47 ¿Cómo era la contraseña?
0:00:49 Abre tecesamos.
0:00:51 No, no, no es una buena idea.
0:00:55 No, no, salga de los ladrones.
0:01:00 Es difícil, trabaja con radio.
0:01:04 Los 30 pecado capitales, creo.
0:01:06 No son 30, ¿dónde salen?
0:01:08 Los 30 trabajos de Hércules.
0:01:10 No hay 30 nada, tiene que pensar en otra cosa.
0:01:13 Los 30 granaderos.
0:01:15 Y si, digamos, ponemos las tres virtudes teologales.
0:01:20 Por los 10 mandamientos.
0:01:24 No, los 33 orientales menos las tres virtudes teologales.
0:01:29 Total 30.
0:01:33 Está buena porque es fácil de entender.
0:01:35 Y seguida la gente se prende y dice ¡uh!
0:01:38 Vamos a ver a la bacheza de la venganza.
0:01:41 ¿Predondito?
0:01:43 Bueno, yo creo que igual hay que pensar algo un poco más...
0:01:46 Algo qué?
0:01:47 Más breve, más...
0:01:48 Pero son 30, ¿qué más breve?
0:01:50 No, hay que pensar un slogan.
0:01:53 Por ejemplo, 30 años abajo del felpudo.
0:01:57 Eso está bueno para tantas cosas.
0:02:00 Por ejemplo, la venganza será terrible.
0:02:02 30 años abajo del felpudo.
0:02:04 Dicho con vos de los 30 años abajo del felpudo.
0:02:08 Pues lo hacemos grabar a Cozo.
0:02:10 A Liberty.
0:02:12 ¿Sabe cómo le dice felpudo a Liberty?
0:02:17 Bueno, podemos hacer incluso un concurso.
0:02:20 Ah, hay.
0:02:21 En que las personas participan.
0:02:23 No es slogan, hay ideas.
0:02:26 Por ejemplo, una invitación todo es un pelotero.
0:02:30 ¿Qué dices?
0:02:31 ¿Eso es dilo?
0:02:32 ¿Hacer el programa de un pelotero?
0:02:33 ¿Hacer el programa de ahí?
0:02:34 Todos entre las pelotas.
0:02:36 Y cosas...
0:02:38 Ideas para festejar nuestros 30 años en la radio.
0:02:43 Escriban entonces el último título.
0:02:49 Yo perdí la charla de hoy.
0:02:51 ¿En dónde la perdió?
0:02:52 No, no lo sé.
0:02:53 Si no lo hubiera ido a buscar.
0:02:55 Me parece una madre preguntando eso.
0:02:58 Está en el cajón de las charlas de esta noche.
0:03:01 Te la di a la mañana.
0:03:04 Eso me dió la madre.
0:03:06 Allá usted.
0:03:08 Te sigue contando sus aventuras.
0:03:12 Vamos a hablar de milagros.
0:03:15 Hemos hablado varias veces.
0:03:18 Es una linda conversación.
0:03:20 San Agustín decía, y lo decía sin temor a la paradoja,
0:03:24 que los milagros no estaban fuera de las leyes de la naturaleza.
0:03:28 En todo caso, Dios consentía algunos sucesos habituales
0:03:35 para impresionar cada tanto a las hombres insensibles,
0:03:41 a las maravillas de la creación.
0:03:42 Hombres de poca fe.
0:03:44 En los siglos siguientes fue creciendo la sensación
0:03:48 de que la divinidad había abandonado tales procedimientos,
0:03:52 o sea por descuido,
0:03:54 o por considerar que su presencia no necesitaba ser enfatizada.
0:03:59 Martín Lutero alegaba que los prodigios servían para convencer,
0:04:03 pero que resultaban innecesarios una vez que la fe había quedado establecida.
0:04:08 Volter afirmó categóricamente
0:04:11 que el tiempo de los milagros se había terminado,
0:04:14 que ya no cabía esperar resurrecciones,
0:04:18 ni retrocesos del sol,
0:04:20 ni panificaciones exponenciales.
0:04:25 Bien dicho.
0:04:26 El varón de Montaigne había dicho que los milagros eran el producto
0:04:29 de nuestra ignorancia acerca de la intimidad de la naturaleza.
0:04:33 Pero la ciencia, al avanzar sobre el territorio de la crasitud,
0:04:41 contribuyó sin duda a ubicar en sus escalafones infinidad de fenómenos
0:04:47 que tenían veleidades de prodigio.
0:04:50 De este modo los únicos milagros que siguieron produciéndose
0:04:53 en los tiempos modernos fueron milagros clandestinos,
0:04:57 nunca verificados, siempre sospechados de fraude
0:05:01 y peligrosamente vecinos a la astrología, a la hechicería
0:05:05 o la visita de seres de otros mundos.
0:05:08 Algunos espíritus trabajosamente ingenuos
0:05:11 insisten en resaltar el carácter milagroso
0:05:14 de los fenómenos más espectaculares de la naturaleza.
0:05:17 El amanecer, la lluvia, el vuelo de los pájaros,
0:05:19 una tele de araña, son para estos pensadores
0:05:22 un motivo de perpeto asombro.
0:05:26 ¡Amaneció!
0:05:29 Me atrevo a objetar que el punto central de un milagro
0:05:32 es su carácter inusual.
0:05:35 Es decir, lo milagroso sería que no amaneciera.
0:05:38 Sin embargo, el Islam perfecciona y ennoblece esa idea.
0:05:43 ¿Para?
0:05:44 La existencia de Dios se evidencia a través del orden
0:05:49 y la belleza del mundo.
0:05:51 El milagro es algo más bien pernicioso
0:05:56 que viene a desordenar las cosas.
0:06:01 Un hombre llamado Al-Hossein Ibn Mansur,
0:06:05 apodado al-Halaj, había conseguido alimentar a sus amigos
0:06:10 en pleno desierto con unos pasteles de miel
0:06:14 que hizo aparecer de la nada.
0:06:16 Por esa razón, en el año 922,
0:06:19 fue sometido un proceso y condenó a muerte
0:06:22 por hacer milagros y no mantener en secreto
0:06:25 los prodigios que Al-Halaya había permitido realizar.
0:06:27 Muy bien, claro.
0:06:30 Algunos cristianos también han adoptado
0:06:33 una cierta cautela ante los acontecimientos maravillosos.
0:06:37 Cuenta, Volter, que un joven fraile
0:06:41 hacía tantos milagros que el prior de la orden se lo prohibió.
0:06:45 El fraile obedeció, pero un día
0:06:49 vio que un obrero caía a la calle desde lo alto de un techo.
0:06:53 Por un instante, el muchacho vacilo deseaba
0:06:58 salvar la vida de aquel desdichado,
0:07:00 pero también quería cumplir las órdenes del prior.
0:07:03 Para resolver el dilema, el fraile realizó el milagro a medias.
0:07:08 Ordenó que el hombre que caía quedara suspendido en el aire
0:07:12 hasta nuevo aviso y corriéndole fue a contar al prior
0:07:16 lo que sucedía.
0:07:18 El prior lo absolvió del pecado que había cometido
0:07:21 al comenzar a hacer un milagro sin su permiso
0:07:24 y le permitió que lo terminara
0:07:27 con la condición de que no volviera a hacer ningún otro.
0:07:30 Está muy bien, pero sí, sí, sí, es duro también.
0:07:35 Uno que hacía milagros livianos
0:07:38 era el famoso aceita Macario el Viejo.
0:07:42 En una oportunidad resucitó a muerto
0:07:45 solo para refutar a un sabio que descreía de las resurrecciones.
0:07:49 Después ordenó al resucitado que volviera a morirse
0:07:53 y no se preocupó más por él.
0:07:56 Es un tipo serio.
0:08:00 En otra ocasión, durante un juicio por asesinato,
0:08:03 Macario interrogó al muerto.
0:08:06 El testigo, desde el fondo del serpucro,
0:08:10 declaró la inocencia del hombre al que habían acusado.
0:08:13 Cumplido el trámite judicial, Macario, una vez más,
0:08:17 impidió a la persona convocada a continuar con vida.
0:08:20 ¿Y hablado?
0:08:22 ¿Qué tipo, no?
0:08:27 Última historia, tiene su gracia.
0:08:31 Policarpo era.
0:08:34 El obispo de Esmirna fue sentenciado a morir en la hoguera.
0:08:39 Cuando las llamas ya estaban alcanzando su cuerpo,
0:08:45 se usó una voz que desde el cielo gritaba,
0:08:47 ¡Valor, Policarpo!
0:08:50 Poco después el fuego se extinguió milagrosamente.
0:08:55 Los guardias sacaron a Policarpo de la hoguera
0:08:59 y le cortaron la cabeza.
0:09:05 Está bueno, está muy bien esa.
0:09:07 En la China, en una feria cercana a Hanchéu,
0:09:10 un hombre había instalado un alto palo resbaloso
0:09:14 en cuya cúspide había colgado un valioso jarrón de jade
0:09:18 como premio a quien pudiera alcanzarlo.
0:09:21 Bueno, los mozos más ágiles del pueblo fracasaron,
0:09:26 pero un monje budista levantó vuelo y se llevó el jarrón.
0:09:30 El jefe de su congregación lo expulsó por gastar pólvora en Shimán.
0:09:39 No en las historias de milagros que teníamos para esta noche.
0:09:42 Pensando si alguna vez volviese a ser cristiano,
0:09:45 me gustaría ser como San Agustín,
0:09:47 porque la única forma de explicar esto racionalmente,
0:09:50 es decir, Dios consente cada tanto hacer esto
0:09:53 donde el mecanismo está explicado en la primera de las trampas,
0:09:56 en la primera de las locaciones, así cualquiera.
0:09:59 Después pensaba Alejandro que los milagros nos pasen en general como con los premios.
0:10:03 No creemos en ellos hasta que nos suceden, hasta que le tocan a uno
0:10:06 y ahí de ahí más empezamos a decir gracias a Aptra y todo eso.
0:10:09 Eso es injusto.
0:10:10 Del mismo modo que sucede con las injurias,
0:10:12 para los milagros hay que tener un testigo acético, ajeno a eso.
0:10:16 Y en tal caso se demuestra habitualmente que es una cuestión de percepciones.
0:10:20 Pero bueno, para los testigos a ayudar.
0:10:22 Pensaba en la confusión nuestro amigo, Thomas Eliot,
0:10:25 habla de un tiempo en que el hombre se convirtió en los hombres huecos,
0:10:29 está llegando a su decadencia y dice que está en terrible ese tiempo
0:10:32 que las señales se toman por milagro.
0:10:34 Eliot no descree de la existencia de un Dios,
0:10:37 sino que le dice, esos acontecimientos son señales tontos.
0:10:41 Fíjense que anuncian no que es lo que está sucediendo en ellos, está muy bien.
0:10:44 Estaba pensando que una cosa, esto de la frecuencia o de la singularidad,
0:10:49 el cometa Haley debería haber sido tomado como un milagro y nunca le dieron bola.
0:10:54 El cometa Haley, en Valle, en la batalla de Hastings, 166, apareció y cada tanto aparece.
0:11:00 Ese es un milagro, no?
0:11:01 Nuestro amigo, el llamado Haley también, fue, le dijo, creo que a Newton.
0:11:07 A Newton, sí que tú.
0:11:08 A Newton, él comía que también parece...
0:11:11 Tiene capacidad.
0:11:12 Y tenía razón.
0:11:14 Creo que él ya no vivía cuando apareció el cometa.
0:11:18 Claro, claro, como pasa, cada 75 años se te entiende la generación y llegan a la costa.
0:11:22 Todo dijeron, tenía razón el final Haley.
0:11:25 Pero con Newton hay una cosa que he descubierto hace muy poco tiempo
0:11:30 y es que lejos de haber, no digo, van a gloriarse, pero por lo menos sentirse satisfecho
0:11:37 con las muchísimas cosas que descubrió que cambiaron la historia de los hombres,
0:11:41 sobre el final, le subía y dijo, finalmente no sé qué es lo que tanto salaban,
0:11:45 porque no he descubierto, no he encontrado nada, decía.
0:11:48 Bueno, por la ley de gravedad, no, no he encontrado por qué la energía mueve cosas,
0:11:53 por qué las cosas que hay en la ley de gravedad, por qué la vida llega y por qué la vida se va.
0:11:57 Y luego lo he encontrado, en particular.
0:11:58 Y llegamos hasta el día de hoy y estamos más o menos igual.
0:12:01 Y pensaba después, en los amigos de este programa, uno y Schopenhauer,
0:12:05 el que tardábamos hoy por la tarde, que decía, cuando era niño,
0:12:08 las campanadas me ponían muy alegres porque yo decía, oye, ha pasado algo.
0:12:13 Y ya de gran, las campanadas me ponían muy mal porque decía, caramba, ha pasado algo.
0:12:17 Y con los miráneos puede ser así las cosas.
0:12:21 Creo que Schopenhauer también es que nos habla de Dante y dice, Dante supo cómo era el infierno.
0:12:26 Y lo contó fácilmente, habló de lo que tenía alrededor.
0:12:29 En cambio, para hablar del paraíso, sólo pudo pensar en la mina que amaba,
0:12:33 en Beatriz y en el gran poeta que era...
0:12:35 Y son los únicos paraísos que exigen.
0:12:37 Y son quizás los únicos milagros, son aquellos en que un amor perdido eventualmente regresa.
0:12:42 Y eso es un milagro porque, de acuerdo a las leyes naturales,
0:12:46 un amor perdido es un amor que no regresa.
0:12:49 Es una muerte, claro, pero de pronto, quizás uno pueda decir,
0:12:52 ojo, con esos milagros también volvió una noche.
0:12:56 Y volvió una noche, es también el título de un tango milagroso.
0:13:01 Milagroso, como sabe.
0:13:02 Y vamos a escuchar ahora por el no menos milagroso, Carlos Gardel.
0:13:22 Volvió una noche, no le esperaba, había en su rostro tanta ansiedad.
0:13:35 De tu bebena, da recordarle su fenonía y su cruelda.
0:13:43 Me dijo humilde, si me perdonas, el tiempo viejo otra vez vendará.
0:13:51 La primavera es nuestra vida, verás que todos nos sonreirán.
0:14:00 Mentira, mentira, yo quise decirle, las olas que pasan ya no vuelven más.
0:14:09 Y así mi cariño, al tuyo enlazado, es solo un pantalma del viejo pasado,
0:14:17 que ya no se puede resucitar.
0:14:21 Al de mi amargura y tu vapiedad, tus papas acuelen muy grandes y abrieron mi pena inaudida.
0:14:32 Pronto comprendieron y con una mueca de mujer vencida, me dijo es la vida y no la misma.
0:14:43 Volvió esa noche, nunca lo olvido con la mirada triste y dilucido.
0:14:51 Y tuve miedo de aquel espectro que fue locura en mi cubierto.
0:14:59 Se fue en silencio, sin un reproche, busqué un espejo y me quise mirar.
0:15:07 Había en mi frente, tantos invierno, que también ella tuvo piedad.
0:15:16 Mentira, mentira, yo quise decirle, las olas que pasan ya no vuelven más.
0:15:26 Y así mi cariño, al tuyo enlazado, es solo un pantalma del viejo pasado,
0:15:34 que ya no se puede resucitar.
0:15:38 Al de mi amargura y tu vapiedad, tus papas acuelen muy grandes y abrieron mi pena inaudida.
0:15:49 Pronto comprendieron y con una mueca de mujer vencida, me dijo es la vida y no la misma.
No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!