Transcripción automática
0:00:00 Esa acerca de los oradores griegos, roló, atención.
0:00:05 En la laboratoria nació de la sofística en Grecia,
0:00:13 y los griegos siempre fueron los mejores en la confección de discursos.
0:00:18 Las sofísticas, usted sabe, se solazaba incluso en defender posiciones opuestas con idéntica destreza.
0:00:25 Lo que importaba no era lo que uno defendía, sino la destreza con que lo hacía.
0:00:30 Y la laboratoria nació un poco de allí.
0:00:35 Los discursos fueron evolucionando. Había una fuerza que empujaba esta evolución.
0:00:40 Esa misma fuerza que estaba presente en todos los actos griegos.
0:00:44 Es la fuerza agonal, la fuerza de la competencia, de la competencia sin encono.
0:00:50 El gusto por medirse, por ver quién es mejor.
0:00:54 Justamente hablábamos recién del elemento del odio en el fútbol.
0:01:00 No existía esto. En el agón griego.
0:01:04 Tiene una cuestión central en el carácter elénico.
0:01:09 El gusto de competir, pero era la competencia sin encono.
0:01:14 Solamente por el gusto de hacerlo.
0:01:19 La laboratoria también admitía formas de competencia.
0:01:24 Incluso una competencia que era la competencia judicial.
0:01:29 Cuando hubo democracia en Atenas, cuando los destinos del pueblo lo decidían las asambleas,
0:01:35 la laboratoria se volvió una disciplina importantísima.
0:01:40 Ya que de la habilidad que tuviera uno para exponer sus argumentos,
0:01:45 dependía la aprobación de esos argumentos.
0:01:50 Y entonces, pronto esa disciplina tuvo sus profesores.
0:01:55 Su enseñanza metódica.
0:01:58 Existía un arte oratorio antes de la aparición de los métodos reglados.
0:02:04 Pero con la memoria de cada caso,
0:02:08 se extinguía también la memoria del discurso.
0:02:12 No se pensaba en fijarlos.
0:02:15 Y después, con el desarrollo de los tribunales populares,
0:02:19 pudo formarse un arte sistemático y teórico y pudo enseñarse el asunto.
0:02:25 Esto debe haber ocurrido primero en Sicilia,
0:02:29 después de la expulsión de los tiranos, allá por el 466 antes de Cristo.
0:02:34 Cuando los tiranos se plantaron, se hicieron valer una multitud de reclamos privados
0:02:40 que estaban pendientes y que habían permanecido callados.
0:02:43 Y entonces empezó a hablarse, empezó a litigarse.
0:02:48 Y aparecieron los que recomendaban para el reclamo,
0:02:54 para la verbalización de cada reclamo el uso de expresiones poéticas,
0:02:59 incluso aunque estuvieran en desproporción con la vulgaridad del tema tratado.
0:03:04 A lo mejor el asunto judicial era que un perro exoneraba sus intestinos en el patio del vecino.
0:03:11 Que trata de un tema más bien vulgar, no es cierto?
0:03:15 Pero algunos como Gorgias, por ejemplo,
0:03:18 recomendaban utilizar todos los elementos del arte poético en la defensa,
0:03:22 bien sea del perro o de la privacidad del patio,
0:03:26 que son los dos valores que han chocado en este caso que utilizamos como ejemplo.
0:03:31 Para dar entonces ornato al discurso, buscaban los maestros y luego los alumnos los tropos,
0:03:41 es decir las figuras de la retórica, la metonimia, la sinecdo, que la metáfora,
0:03:47 el séuguma, el oxímoron, el hiperbatón, muchísimas figuras de las cuales hemos hablado mucho en este programa
0:03:55 y algunas de las cuales son incluso mencionadas en la presentación.
0:04:00 Los griegos dividían también el discurso en partes que tenían que cumplirse en estructuras que estaban fijadas.
0:04:06 Háganme acordar que un día hablemos, aunque ya lo hemos hecho varias veces,
0:04:11 de los tropos y de estas organizaciones,
0:04:14 pero gracioso poner al servicio de un discurso macarónico estas pautas académicas.
0:04:24 Bueno, algunos, sin embargo, eran enemigos de toda pompa metafórica.
0:04:30 Entre ellos figura nada menos que Tucídides, el historiador.
0:04:34 Además de eludir la metáfora, Tucídides eludía pompas escénicas.
0:04:40 No andaba llorando, ni agachándose.
0:04:46 Se mantenían piecas y sin movimiento envuelto en su manto
0:04:50 y la voz conservaba en cada discurso siempre a misma altura y tono.
0:04:55 Otros eran al contrario como Cleón, aprovechaban el movimiento del cuerpo.
0:05:02 Cleón parece que cuando hacía un discurso corría por toda la tribuna como Axel Rove,
0:05:07 revolíaba su manto como soledad y se golpeaba la cadera como cuando uno anda a caballo sin caballo.
0:05:16 No sé cómo se golpearía la cadera, seguro que sí.
0:05:19 Sí, no, no, en mucha manera.
0:05:20 Bueno, de Móftenes, que era el mejor de todos, insistía más allá de la retórica en la buena edición
0:05:28 y en los baivenes del volumen de la voz.
0:05:32 Detengámonos un poco más en otros oradores ateniences.
0:05:37 Antifón, por ejemplo, que nació en el 480 a.C., era hijo de Sofilo, un sofista.
0:05:44 Antes de dedicarse a la retórica escribió varias tragedias.
0:05:49 Las tragedias también, como usted sabe, se presentaban en una especie de competencia anual.
0:05:56 Y este muchacho, como vio que pasaban los años y nunca se sacaba ningún premio,
0:06:02 se dedicó a otra cosa y esa otra cosa era la oratoria.
0:06:09 Aristófanes escribió alguna vez que mediante discursos el espíritu se levanta y el hombre se eleva.
0:06:16 Y justamente fue Antifón, el que de un modo más impresionante vino a plasmar esto.
0:06:21 Él abrió en Corinto un negocio, el que hemos hablado alguna vez, y que era una tienda de consuelo.
0:06:28 Él decía que podía consolar a los tristes mediante discursos.
0:06:35 Podía levantarle el espíritu al que estuviera triste discurseándolo.
0:06:40 Un psicoanalista, él decía.
0:06:44 Entonces, bueno, cuando llegaba la gente, él la escuchaba y luego minimizaba las desgracias con unos discursos consolatorios.
0:06:54 Tanto olido por eso empezaba a...
0:06:57 El problema era en verdad que la mayoría de los desgraciados que iban a verlo...
0:07:03 Era porque no tenían plata.
0:07:05 Dice el problema que tenían.
0:07:07 Entonces mal podían pagarle.
0:07:09 Así que, harto de escuchar insolventes, Antifón dejó sus discursos de consuelo y se dedicó a la enseñanza de la oratoria.
0:07:18 Y así abrió una escuela en Atenas a la que se dice concurrió Tusílides, que fue alumno de Antifón.
0:07:25 Antifón fue el primero en escribir discursos para otros.
0:07:29 Discurso para quienes necesitaban defender algo en un proceso.
0:07:33 Él nunca pronunció ninguno, ni tampoco litigó, no sometió ninguna disputa.
0:07:39 Escribía discursos para litigantes y se los vendía.
0:07:43 Se los hacía prender de memoria los tipos.
0:07:46 Y antes de ir al tribunal o a la Asamblea, tenían que recitarlos delante de Antifón.
0:07:52 Y él aprobaba o no sus propios escritos según la delincuencia del que los pronunciaba.
0:07:57 Se observaba que las palabras escritas no condecían con el aspecto del hablante corregía el trabajo.
0:08:06 Imagínense por ahí.
0:08:08 El tipo escribía un discurso tímido, compuesto, apocado.
0:08:13 Y el tipo era un ato de San Diego 1.90.
0:08:17 O sea, había que cambiar.
0:08:24 Antifón fue miembro del gobierno de los 400 y fue enviado a Esparta como embajador para conseguir la paz durante la Guerra del Peloponeso.
0:08:33 No le fue bien. Lo acusaron de alta traición y fue condenado a muerte por haber desempeñado mal a embajada.
0:08:40 Y además por haber ido a Esparta en un barco enemigo.
0:08:44 Ir a Esparta en un barco enemigo es muy difícil, ya que todo el mundo sabe que Esparta queda en el centro mismo del peloponeso.
0:08:52 Que para llegar en barco hay que arrastrarlo por la tierra muchísimo tiempo.
0:08:57 Pero bueno, se habrá bajado en un puerto cercano.
0:09:00 No sé si es navegable el Eurotas, que es el río que andaba por ahí por Esparta.
0:09:06 Si hay algún amigo griego que está escuchando, podrá darnos noticia de la navegabilidad del río Eurotas,
0:09:13 de la cual me permito dudar, ya que la tierra griga es muy montañosa, mezquina en llanuras
0:09:18 y los ríos de montañas están llenos de rápidos cataratas y estrecheses y torrentes que hacen muy difícil navegar
0:09:28 en cualquier caso y mucho menos contra la corriente, que es como hay que navegar.
0:09:33 El mar pretende entrar en dirección a Esparta.
0:09:37 Bueno, el caso es que lo liquidaron al pobre antifón.
0:09:41 Látima porque me estaba casando simpático.
0:09:45 Otro orador famoso fue Esquínez.
0:09:48 Su padre se llamaba Atrometo.
0:09:54 Atrometo.
0:09:55 Se llamaba Yelzizorador para defenderse de las calumnias.
0:10:04 Tenía una escuela también.
0:10:06 Su mamá Glaucotea, también tenía los suyos, era timbalera.
0:10:11 Bueno, estaría peleando todos los días ese muchacho.
0:10:15 Esa familia.
0:10:16 No es que jugaba al chinchón.
0:10:18 Tocaba los timbales.
0:10:20 Ah, no, timbera.
0:10:22 Tocaba los timbales en los ritos de Dioniso.
0:10:25 Y tenía dos hermanos, Filóquere y Alfabeto,
0:10:30 que también parece que tocaba los timbales.
0:10:33 Los ponían en el suelo, se agachaba, alfabeto,
0:10:37 y tocaba los timbales.
0:10:40 Antes de dedicarse a la oratoria.
0:10:44 ¿O tocan mientras?
0:10:46 Agachate y toca los timbales, alfabeto.
0:10:50 Bueno, antes de dedicarse a la oratoria, Esquínez
0:10:53 fue gimnasta y actor.
0:10:55 Parece que tenía una voz extraordinaria, Esquínez.
0:10:59 Una compañía de teatro, decir una compañía de teatro,
0:11:03 no sé, me imagino, la compañía de Agustín Castro Miranda,
0:11:07 de Ricardo Pasano, bueno, no, Francisco Charmielo.
0:11:11 Bueno, se cuenta que en una oportunidad,
0:11:13 hacía el papel de Enomao presidiendo a Pélope
0:11:17 y se cayó en el escenario aparatosamente.
0:11:21 Por eso, para mortificar lo de Móstenes,
0:11:23 que lo odiaba, llamaba Esquínez justamente Enomao.
0:11:28 Y en realidad hay que decir que,
0:11:29 etimológicamente, Enomao significa infeliz,
0:11:32 como todos sabemos.
0:11:33 Cuando vayamos a Grecia y nos dieran pedazo de Enomao,
0:11:38 es que nos están diciendo infelices.
0:11:42 En el teatro no tuvo éxito nuestro amigo Esquínez.
0:11:45 Entonces, se dedicó a otra cosa.
0:11:49 Pasó a ser escribiente de unos personajes
0:11:52 importantes de Atenas, que se llamaban Aristofón y Eubulo,
0:11:57 que también formaba parte...
0:11:59 Tienes que ver con el otro.
0:12:00 También tocaba los timbales, me imagino.
0:12:03 Igual.
0:12:07 Y así empezó a entrar en conocimiento Esquínez
0:12:11 de los negocios públicos, de las leyes y de la tribuna.
0:12:15 Dice que Esquínez fue el segundo grador después de Móstenes.
0:12:18 Primero de Móstenes.
0:12:20 Segundo Nadie.
0:12:22 Tercero, lejos Esquínez.
0:12:25 Según Burhard, Jacob Burhard,
0:12:29 el autor de este libro sobre Grecia,
0:12:31 no de éste sino de él,
0:12:34 lo ayudó mucho su belleza.
0:12:36 Era un tipo lindo Esquínez.
0:12:38 Y entonces le creían.
0:12:41 Está bien, a uno le crean por lindo.
0:12:43 En cierto, Rolón.
0:12:46 Y sobrevivieron tres discursos de Esquínez.
0:12:50 Los famosos tres Esquínez.
0:12:53 Yo soy del barrio de tres Esquínez,
0:12:55 viejo Valvarte de la Raúl.
0:12:58 Estos discursos son.
0:13:00 Contratimarco.
0:13:05 Contratimarco.
0:13:10 Lo cantaba Eubulo.
0:13:12 Como la luz de un candil.
0:13:14 Y el otro es de la embajada mal desempeñada.
0:13:17 Y el otro es contra Tesifón.
0:13:21 Era la revancha.
0:13:22 Espa solo mismo que contratimarco.
0:13:24 Pero soy igual.
0:13:26 Bueno, en este último.
0:13:28 En este.
0:13:30 Contratisifón.
0:13:32 Esquínez no le fue bien.
0:13:34 Succedió esto después de la batalla de Quironía,
0:13:37 en que los Atenianse fueron derrotados.
0:13:40 Y de Mosten formó parte de una comisión.
0:13:42 Para restaurar, restaurar sería mejor.
0:13:44 Las murallas de la ciudad.
0:13:46 Restaurar las muchachas de la ciudad también.
0:13:49 Es casi una tarea tan interesante.
0:13:52 O más, que la de restaurar las murallas.
0:13:55 Bueno, y de Mosten contribuyó a esta.
0:13:58 Restauración.
0:14:00 Con sus ahorros.
0:14:02 Bueno, hubo.
0:14:04 Tesifón propuso un reconocimiento.
0:14:07 Como un juicio.
0:14:11 Y compitieron esquínez y de Mosten.
0:14:14 Y ganó de Mosten.
0:14:16 Fue.
0:14:18 Dolió tanto esta derrota.
0:14:21 Que esquínez se desterró.
0:14:23 Se desterró a la isla de Rodas.
0:14:25 Y así en Rodas le leía a la gente el discurso que había desplegado.
0:14:29 En el juicio que había perdido.
0:14:31 Y nadie podía comprender por qué había perdido.
0:14:34 Y había perdido con semejante discurso que era perfecto.
0:14:38 Con olímpicos argumentos.
0:14:40 Que garantizaban la demostración palmaria de los argumentos que defendía.
0:14:47 Y entonces cuando le preguntaban por qué había perdido,
0:14:50 esquínez respondía.
0:14:52 No se admirarían si hubieran oído las respuestas de de Mosten.
0:14:56 La binaria.
0:15:00 Hay una miración que vencia.
0:15:04 Dice que solía decir que un piedrazo de de Mosten lo había derrotado.
0:15:12 Y es que de Mosten tenía fama de adiestrarse.
0:15:16 Poniéndose cantos rodado en la boca.
0:15:18 Cantos rodado grafanaria me imagino yo de la sobra en construcción.
0:15:21 Y entonces se citó a frente al mar con la boca llena de piedras.
0:15:26 Hablaba y recitaba.
0:15:31 Y este dijo que de una de esas piedras salió de la boca de Mosten.
0:15:37 Esa fue la forma de un discurso y lo derrumbó.
0:15:41 Digamos para terminar que los retóricos decían que esquínez era experto
0:15:47 en lo que se llama la ordenación efectista de la argumentación.
0:15:51 Era minuciosamente gradual.
0:15:54 Sumaba pruebas pero dejaba las más fuertes para el final.
0:15:57 Es lo que hace todo el mundo.
0:15:59 Ah, no sé.
0:16:01 Bueno, a usted cuál le gusta más de estos oradores griegos que hemos citado.
0:16:05 Y a mí antifón, porque la me lo he citado.
0:16:07 A mí me gustó también antifón, que tenía el negocio ese de consuelo.
0:16:12 Decía discurso para consolarte.
0:16:14 Y nunca nadie más se utilizó la oratoria.
0:16:20 Dese modo tan evidente y tampoco metafórico para consolar salvo las madres.
0:16:25 Con resultados siniestros.
0:16:28 Luego, una madre, cuando le da un discurso a su hijo para consolarlo, es peor.
0:16:33 Lo perturba para toda su vida.
0:16:35 Como usted sabe, el latín palo consuela tanto que le genera ideas absolutamente equivocadas, dañinas y letales.
0:16:44 Por ejemplo, el niño va al colegio y lo suelten.
0:16:49 Le dan la viada.
0:16:51 Viene llorando y la madre para consolarlo, empieza a decir que no se preocupe,
0:16:55 que en realidad el otro se ha aprovechado porque es más fuerte, más vivo, más rápido, más grande y más inteligente que él.
0:17:02 Pero que él en su casa hallará consuelo y cariño, aún cuando sea un desdichado, un esmiriado y un alfeñeque de 44 kilos.
0:17:10 Y el chico crece con ese convencimiento y se convierte en un desgraciado para toda la vida.
0:17:17 De esos discursos hay, pero lo que no hay son tiendas de consuelo,
0:17:21 donde un tipo por un dinero te consuela por haber perdido a tu novia.
0:17:26 Te debería que haber.
0:17:34 El otro también está Cleón, el de las tonalidades, el de las expresiones.
0:17:42 Bueno, es Quines que aparte era cantor.
0:17:48 Es Quines que era cantor y que era actor también.
0:17:52 ¿Y usted cuál le gusta más el discurso? Austero o el extrovertido?
0:17:59 Me gusta una cierta combinación casi de la proporción aúria,
0:18:05 de los expositores, en qué lugar de la exposición ponerse un poco más.
0:18:10 ¿Y usted qué clase de psiconegista es? ¿Es declamatorio o austero?
0:18:15 Yo soy declamatorio.
0:18:17 ¿Ah, sí? Por ejemplo, cuando una paciente le contó una cosa y yo,
0:18:20 pero qué barba es que atrás, qué barba es que atrás.
0:18:26 ¿Me dejó?
0:18:28 Prío.
0:18:31 Mire, que he escuchado el ojo.
0:18:35 ¿Sabe los locos que vienen aquí?
0:18:41 Lo tuyo no es nada.
0:18:43 Claro, me lo resistando.
0:18:45 Corro de un lado al otro al consultor.
0:18:47 Y yo le contar a la cantidad de locos que vienen aquí,
0:18:50 usted no podría creerme.
0:18:55 Qué lindo. Bien.
0:18:58 Bueno, ya está.
0:19:01 ¿A quién quiere dedicar esto? Ya lo hemos dedicado.
0:19:04 Antifón, ¿no? Antifón.
0:19:06 Y ya que tiene que ver con un cierto uso artístico de las palabras Alejandro,
0:19:11 permítame dedicarle a dos amigos de este programa,
0:19:13 Mario Mactoas y Antonio Carriso.
0:19:15 Oh, claro que sí.
0:19:17 Por nombrarlo usted porque trabaja conmigo y queda feo.
0:19:19 ¿Qué hacen esa utilización en el lenguaje tan preciso y tan artístico?
0:19:23 Bueno, adhiero a esa.
0:19:25 Desde luego hay otros también muy meditorios,
0:19:27 pero mira que usted,
0:19:29 no probó a esos dos queridos amigos,
0:19:31 vamos a homenajearlos con nuestro afecto.
0:19:34 Hemos elegido el tango,
0:19:37 dicen que dicen,
0:19:39 que contiene ya en su título
0:19:44 una amenaza de retórica,
0:19:46 sino un ejercicio de la misma.
0:19:48 Escucharemos la estupenda versión
0:19:51 al 31 de octubre del wave,
0:19:53 y el caso no es así.
0:19:55 seminars de tutorias drinking éxito,
0:19:57 el craving de leer la música.
0:19:59 Espero que no sea tan ornamental
0:20:01 como yo previeso.
0:20:06 Si me encuentro solo cont»
0:20:17 ver﹐
0:20:19 Todo cerco que con un amor
0:20:22 Que fue el orgullo que en contra tanca
0:20:25 En fondo fue tu con vuelo
0:20:29 Y va a ser fuerte un vuelo con otro
0:20:33 Que era una gloria que vivía con vos
0:20:36 Y dice el barrio que él la quería
0:20:40 Con las de mi mamá que puso el sol
0:20:43 Y fue un norte que paula buro
0:20:47 El taula mal no se había usentado
0:20:50 Por el dinario te los amores perros
0:20:54 En la mina que ella le había echado
0:21:17 Y la guitarra es antigua para borrar
0:21:19 Esa misma frecuencia de la voz
0:21:22 O sea que la voz sale absolutamente desmerecida
0:21:24 Y los peoras que hicieron esta
0:21:26 Agregados salen en primerísimo
0:21:29 Primero plano al lado de la voz de Carlos Gardel
0:21:32 Es un asco esto, es una intromisión
0:21:35 De unos guitarristas a los que nadie llamó
0:21:38 Y como en este programa no toleramos intrusos
0:21:41 Y somos muy admiradores y tenemos mucho cariño por Carlos Gardel
0:21:44 Y nos prometemos escuchar mañana mismo
0:21:46 Dicen que dicen la versión extraordinaria
0:21:48 Que le hizo 1930 con sus guitarristas
0:21:50 Y no le hacía falta ningún otro nuevo
0:21:52 No le hacía falta ningún otro nuevo guitarrista
0:21:55 Así que saludamos también a estos
0:21:57 Entrometidos guitarristas
0:21:59 Pero creo que en este programa no tienen lugar
0:22:03 Dicen que dicen
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