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10 de Abril de 2008

Paulina Bonaparte y el actor Francois-Joseph Talma

Transcripción automática

0:00:00 Paloaremos hoy de la hermana de Napoleón, de Paulina, que era lindísima y según dice
0:00:05 marcaba unos 35 la mesa. Así que ubicaremos nuestra acción en París en el año de 1811.
0:00:15 Paulina se había casado con el general de Clark, aquel con quien viajó a Haití y allí
0:00:24 este hombre tuvo la precaución de morirse de Fibre Amar.
0:00:27 ¿Qué bien?
0:00:28 Poco después de enviudar Paulina se casó con el magnate italiano Camilo Borgesse y
0:00:34 dicen que durante ese matrimonio Paulina se aburría muchísimo y no tuvo más remedio
0:00:41 que designar algunos amantes. Por esos tiempos andaba. Atención, no temo.
0:00:48 Con el alemán Friedrich, el italiano Blanchini que era un músico y componía dos para cantar
0:00:56 con ella, que extraordinario. Con un general, Canubil, con el capitán Aquiles de Togutón,
0:01:04 los coroneles rusos Chernychev y Kavlukov, el conde de Montroth y con el teniente de
0:01:11 Bragg. Además, Paulina era asistida en su aseo por un negro herculeo para que necesitaba
0:01:24 los otros. Claro que se había llevado, que había conocido
0:01:27 en Santo Domingo y había resuelto traerlo para que la ayudara. Todas al ver al negro
0:01:38 herculeo. Querían limpiar o ser.
0:01:42 Querían, no, si querían asearse con el negro o la felicitaban a Paulina. Te felicito por
0:01:51 el negro que tenés herculeo. Durante el verano de 1811, Paulina quiso ir a unas
0:02:05 aguas termales que había en la chapel para tranquilizarse un poco. Todos decían que las
0:02:11 aguas termales tranquilizaban. Se equivocó de sitio, evidentemente. Las ciudades de aguas,
0:02:18 en aquel entonces, tenían mala reputación. Por ejemplo, entre los romanos, la estación
0:02:24 termal de Basilea, que quedan en Suiza, fue llamada por Seneca el refugio del vicio. En
0:02:31 la Edad Media Badén, gracias a sus fuentes, se convirtió en uno de los más grandes lupanares
0:02:37 de toda Europa. En realidad, en aquellos lugares un verdadero enfermo era considerado
0:02:43 como un intruso a quien pronto hacían morir para que no volviera a molestar a los libertinos
0:02:49 que ocurrieron allí para cualquier cosa menos para curarse. En el siglo XVI, Plumbie, donde
0:02:57 los hombres y mujeres se guanían desnudos, la misma vertiente, fue teatro de increíbles
0:03:04 orgías. Porque había ahí una fuente que parece que ayudaba a combatir el cólico nefrítico.
0:03:13 Qué terrible. No sé lo qué, pero te duele. Entonces se bañaban allí desnudos y al final
0:03:23 más decían qué cólico nefrítico. Toler por doler dice, prefiero no curarme y hacer
0:03:32 una simpaticorgia y ahí aprovechar. Y estamos todos desnudos aquí. Qué nos cuesta. Allí,
0:03:41 Paulina conoció y sedujo al hombre que volvía a locas a todas las mujeres de París. Se
0:03:47 trataba de un actor, el mayor trágico del siglo, le decían en aquellos años, el único
0:03:53 actor a quien Napoleón concedía genio. Hablamos de François Talma, a quien todos conocían
0:03:59 como el príncipe del gesto. Del gesto. Qué cara, qué gesto decían todos al observar
0:04:09 a François Talma. Pero tenía algún tic, el hombre de la particularidad. El tipo sí tenía
0:04:15 48 años y Paulina 30. Parece que Paulina se lo había llevado rápidamente a la habitación
0:04:21 que alquilaba para pasar unos días en las termas. Talma se enamoró de Paulina y eso
0:04:33 se notaba. Dicen que Talma no podía desprenderse de una gran vilocuencia, como suele pasar
0:04:41 con los actores. Incluso en la cama expresaba su dicha venerea, declamando versos de Molier
0:04:52 o de Volter, cosa que no dejaba de asombrar a los criados que no despegaban la oreja de
0:04:59 la puerta. Y oían en los momentos culminés, cosas tales como un paisano del bragado y
0:05:06 cosas así. Mientras cosas que escribían Molier o Volter. Después de algunos días de
0:05:12 amor Paulina y Talma se volvieron juntos años allí, que era donde vivió a Paulina. Talma,
0:05:20 aunque muy enamorado, tenía miedo de que alguien lo descubriera con la hermana de
0:05:24 Napoleón, que además era casada. Si no lo agarraba con el de Borguese. Si no lo agarraba
0:05:33 el marido lo agarraba el hermano. Ese miedo a veces le impedía mostrarse tan ardiente
0:05:39 como Paulina deseaba. Por ejemplo, parece que cuando se acostaba con ella, Talma colocaba
0:05:45 muebles contra la puerta para que nadie pudiera entrar. Dice el cronista, Leo cronista. Una
0:05:53 vez mientras nuestro actor gritaba unos pasajes de Molier resonaron unos pasos en el corredor.
0:06:02 Paulina, que no quería perder un segundo de placer, le pidió que continuase recitando.
0:06:09 Pero el desdichado, repito, el desdichado trató de obedecer y la naturaleza no lo ayudó.
0:06:18 ¡Ay que mal! Paulina furiosa le gritó y le dijo que fuese a buscar al negro Hercules.
0:06:24 No, en serio. Para que lo reemplazara con ventaja.
0:06:31 Ay que feo. Talma corrió al pasillo, llamó al negro, lo encerró con Paulina y se fue
0:06:39 cabiz bajo. Después de ese episodio, Paulina, ya harta de los ampulosos párrafos que en
0:06:50 cada momento de amor reproducía este hombre, perdió todo interés. Debe decirse que Talma
0:06:57 seguía enamorado. Paulina, mientras tanto, se había convertido en la amante de un jefe
0:07:03 de infantería, Augusto de Lichon, y hacía todo lo posible por evitar al actor. Y ahí
0:07:09 apareció el malentendido, que es clásico de muchos imbéciles cuando se enamora. Cada
0:07:16 cosa que Paulina hacía, cosas que siempre tenían que ver con la burla y el desdén,
0:07:23 era interpretada por Talma como un gesto amoroso y de correspondencia de su amor. Una noche
0:07:30 en un salón, Talma estaba sentado a los pies de Paulina en actitud reptil. Y ella dijo
0:07:39 solo para ponerlo en cómodo, ahora Talma nos hará reír. No es cierto, Talma, que
0:07:47 vais a divertirnos con una escena cómica. Era como pedirle a un cantante de ópera
0:07:53 que entonase canciones de murga. Talma palideció. Él era un trágico, no podían pedirle que
0:08:00 hiciera algo cómico. Pero Paulina le acarizó la cabeza y Talma terminó por aceptar. Durante
0:08:08 media hora se esporzó Talma por interpretar escenas de comedias y su ridículo fue espantoso.
0:08:17 Pero él, orgulloso, pensando que Paulina lo amaba, había recurrido a su talento para
0:08:22 impresionar a sus amistades. Y al día siguiente le hizo saber exactamente eso a Paulina y
0:08:28 le agradeció su muestra de amor y confianza y la invitó a dar un paseo. Ella no le contestó
0:08:36 y él entonces renovó esta invitación cada día. Le escribió durante varias semanas.
0:08:42 Estaba tranquilo porque pensó que Paulina no le correspondía debido a sus obligaciones
0:08:45 de protocolo. Finalmente Paulina organizó un paseo en barco por un lago y Talma se coló.
0:08:54 Pero a la tarde se desató una tormenta que obligó a todo el mundo a refugiarse abajo
0:08:58 del toro. De repente se desozo la voz de Paulina. Talma, ¿por qué no recita la tempestad?
0:09:06 La última tragedia de Shakespeare. Y el enamorado salió de abajo del toro. Se puso
0:09:11 bajo la lluvia, se agarró del mástil y empapado recitó la tragedia. Le agarró fiebre que
0:09:19 casi se muere. Al final del 1812 el actor recibió una carta de un organizador de giras con
0:09:30 quien él tenía firmado un contrato. Y este hombre le comunicó que tenía unas audiciones
0:09:34 en Ginebra que requerían la presencia del actor. Y creciendo todavía en el amor de
0:09:40 Paulina, Talma se preguntó de qué manera le comunicaría la terrible noticia de su
0:09:45 viaje. Con lo que me llama esta mujer, se va a desmayar. ¿Cómo le digo que me tengo
0:09:51 que ir a Ginebra? Bueno, finalmente se arrodilló a sus pies y con la rodilla en el pecho entonces
0:10:00 no se arrodilló. Y un brazo extendido le recitó un discurso que ayer mismo había escrito.
0:10:06 No. Oh mi reina y señora, los dioses no se paran. Los lazos que tejido hemos con tanta
0:10:15 paciencia, momento. Será mañana víctimas de un destino tirano e implacable. Paulina
0:10:22 un poco sorprendida trató de entender qué le pasaba a aquel hombre y le dijo que se rajara
0:10:28 no más a Ginebra. Y Talma siguió diciendo quiero dándole a amor justa y bella alegría
0:10:35 demorar o señora mi marcha un solo día. Pero la verdad es que Paulina estaba demasiado
0:10:41 contenta de liberarse y le dijo que no hiciera esperar a su arte y se fue en ese momento.
0:10:48 Talma creyó que Paulina se estaba sacrificando por él. Estalló en llanto, abrazó las rodillas
0:10:54 de Paulina, etcétera. Por la mañana subió un coche y se fue. No sospechaba que su bella
0:11:02 amiga ya estaba en los brazos del artillero. Al cabo de dos días, Talma empezó a escribirle
0:11:08 a Paulina. Le decía cosas así. Te he abandonado. Eme aquí separado de ti por mucho tiempo.
0:11:15 Tu bondad, tus lágrimas, bla, bla, bla. Paulina tiró la carta junto con las otras docenas
0:11:22 que había recibido y nunca le contestó. Talma desesperó. Pero tampoco allí sospechó
0:11:28 la verdad. Pensó que Paulina había dejado de amarlo por su abandono y apenas pudo regresó
0:11:35 a Aneldi y deambulando y enviando aún más cartas. Todas eran pedidos de perdón por
0:11:41 su ausencia. Paulina ya se había olvidado por completo del actor y ni siquiera leyó
0:11:47 esas cartas. François Talma, experto intérprete de Shakespeare, continuó amando a Paulina
0:11:56 y cuando ella murió muy joven, en 1825, Talma cayó en una profunda depresión y murió
0:12:03 muy poco después. Tenía 66 años de edad. Impresionante y triste historia. Cualquier
0:12:13 historia de un enamorado contrariano a sus deseos es inevitablemente triste y no tiene
0:12:20 regreso, no tiene reparación ni en la tierra ni en el cielo. No hay foro donde el enamorado
0:12:27 rechazado pueda reponerse. Por eso lo mejor que puede hacer el enamorado rechazado es
0:12:33 ir rápidamente allí donde no lo rechazaren. Es decir, con otra mujer.
0:12:43 Ahora Talma negaba un poco el rechazo. No lo vivía como un rechazo lisuillano.
0:12:48 Es la peor clase de enamorado rechazado, es que está siendo basurado y no se da cuenta.
0:12:54 Es el último que se entera.
0:12:55 Es el basurado.
0:12:58 Te lo digo yo que he sido basurado por las mejores minas de Buenos Aires. Las mejores
0:13:04 minas de la ciudad de Buenos Aires me escupieron en la cara en su...
0:13:07 Bueno, por lo menos fueron las mejores.
0:13:09 En ese sentido yo no me dejo escupir por cualquier...
0:13:13 Para dar negro.
0:13:15 No me anoto desengaños de segunda categoría.
0:13:21 Podemos dedicarse a Talma, ya que es pobre tipo.
0:13:27 Si hay algo que empeora el rechazo es justamente la imposibilidad de comprenderlo.
0:13:31 Hay tipo que no pueden admitir que no le gusta a nadie.
0:13:42 Se declaran o se insinúan delante de una mina y la mina de algún modo les dice, no me
0:13:47 gusta.
0:13:48 Sí, pues piensa, pero lo piensa seriamente.
0:13:51 ¿Cómo que no te gustó?
0:13:53 Y se mira a sí mismo así.
0:13:56 Converse con él, ¿no?
0:13:59 ¿Cómo no le voy a gustar?
0:14:01 Y empiece a pensar otra explicación.
0:14:04 ¿Por qué esa le parece imposible de creer?
0:14:07 No es la familia que le llena la cabeza.
0:14:10 Bueno, es que ella se está haciendo la difícil para ponerme a prueba.
0:14:15 Todas cosas que no suceden nunca.
0:14:16 ¿Qué tiene miedo al amor?
0:14:17 Nunca una mina que le haga caso a la familia.
0:14:20 Ni una mina que queriendo abrazarte se escape.
0:14:25 No, si te quieres se queda.
0:14:27 Incluso se queda más allá de nuestro deseo.
0:14:30 Y si no te quieres se va.
0:14:33 Así es de sencillo ser comportamiento humano, ¿no?
0:14:36 Hay algunos que se enojan.
0:14:39 ¿Qué te pensabas que soy yo?
0:14:41 ¿Qué significa la frase que te pensás que soy yo?
0:14:45 Lo voy a preguntar.
0:14:46 En ese caso, cuando el hombre es rechazado, vale la pena seguir bajando.
0:14:54 Arrastrarse.
0:14:56 No, porque la mina...
0:14:58 Empecé a secutar menos todavía.
0:15:00 ¿Y la la quina en comprar un ramo de flores?
0:15:03 No, las flores no.
0:15:05 Nunca torcieron la voluntad de nadie.
0:15:07 Escribir un poema de amor.
0:15:09 El compre a todo escobar.
0:15:11 Y si la mina no está con usted no cambia.
0:15:14 Las flores es para acompañar, para subrayar algo que ya está ocurriendo.
0:15:18 La mina está con usted, te le regaló un arroz o...
0:15:21 ¡Oh, mi amor!
0:15:22 ¡Un arroz!
0:15:23 Pero si usted le regala todo el rosal de las ruinas junto y si la mina no gusta de
0:15:29 usted no cambiará.
0:15:30 ¿Y un poema de amor cambiará?
0:15:32 ¡No, menos!
0:15:33 Menos.
0:15:34 Y si usted es gran poeta, peor.
0:15:36 Pero cuanto mejor poeta sea peor, claro.
0:15:40 Sí, para otro, lo usan para otro.
0:15:42 Pero entonces el amor está fundado...
0:15:44 Se emociona con el poema pensando en otro tipo.
0:15:50 Si lo digo yo, qué compuesto canciones a minas que después la escuchaban con el novio
0:15:54 y lloraban.
0:15:56 Ella y el novio.
0:16:03 No hay estrategia, no hay salvatables.
0:16:06 ¡Ah, sí que hay estrategia!
0:16:08 Ya le ir corriendo y no volver más.
0:16:10 Y hasta puede pasar que la mina y el cómo sale corriendo este.
0:16:13 La mina también tiene su pensamiento.
0:16:16 ¿Cómo no se espera por mí?
0:16:18 Y ahí a lo mejor tiene una esperanza, digo, una en un millón.
0:16:21 Si pero si ya queda no hay esperanza.
0:16:22 No, se queda no hay ninguna esperanza.
0:16:23 Y la única esperanza que hay tiene otro nombre y otra dirección.
0:16:32 Una dama que me dejó me dijo lo siguiente.
0:16:35 Cuando estaba explicando, porque me dejaba como si yo hubiera pedido una explicación.
0:16:39 Me dijo, quédate tranquilo porque no es por ningún error.
0:16:44 Y yo dije, sería mucha suerte que se tratara de un error.
0:16:48 Aquello que pareció un elogio era espantoso.
0:16:51 Porque de un error se sale en cambio de la forma que se le da.
0:16:55 En cambio de la propia identidad, que es lo que no le gusta la mina,
0:17:00 no se sale jamás.
0:17:04 La única manera de empezar a gustarle uno que no le gustaba es convirtiéndose en otro.
0:17:09 Pero no de un modo metafórico.
0:17:11 Ahora soy otro, me acuesto temprano, que sé yo, de gelopio.
0:17:19 Sí, lo otro, redondamente.
0:17:22 Rubio, si usted era morocho, y alto, si usted era bajo.
0:17:26 Y ahí la mina le dice, quédate tranquilo porque no se trata de ningún acierto.
0:17:30 No, está muy bien.
0:17:33 No hay alternativa, ni se casa cuando ya está.
0:17:35 Sí, la hermana, la cuñada. Hay muchas alternativas.
0:17:38 Tantas alternativas como mujeres hay en el mundo.
0:17:41 ¿Qué pasa? Yo le plateo lo siguiente. ¿Qué pasa si el hombre la amenaza?
0:17:45 Ya estamos hablando de personas normales, un tipo que amenaza.
0:17:49 Bueno, son hipótesis.
0:17:53 Son hipótesis.
0:17:55 ¿Ella qué dice? Suciete.
0:17:58 No, no. Lejos.
0:18:00 Claro, dice, vamos a hablarlo mañana. Trate de ganar tiempo.
0:18:04 Si se va a suicidar, por lo menos que no se le suicide ahí en la casa.
0:18:10 Se le dice, llamarme mañana, llamarme mañana, y miren, le va empujando,
0:18:14 después le solto la puerta y no la abre más.
0:18:20 Es fico, señor amor.
0:18:22 Es feo, pero qué lindo cuando te dicen sí, pasar no me importa quién son.
0:18:26 No te traes nada de regalo, no importa, me gusta si igual.
0:18:30 Soy un poco no importa.
0:18:34 Tengo mal carácter y ahora me veo mejor.
0:18:38 Porque ahora estamos hablando un poco de que la mujer es la que decide no seguir.
0:18:44 No lo quiere al tipo, la mujer.
0:18:47 ¿A la qué pasa si sal revés?
0:18:49 La mujer es mucho más sana que el hombre.
0:18:51 El hombre pasa.
0:18:52 La mujer no tiene esas actitudes reptiles,
0:18:54 y cuando alguien le sienta le gusta,
0:18:56 en todo caso trabaja con mayor astucia,
0:18:59 pero nunca me dice, por favor, por favor, que me mato.
0:19:03 ¿Qué pasa de la situación inversa?
0:19:06 El hombre y la mujer que no le gusta a la mujer, la mujer se arrastra, le pide.
0:19:11 No, ya le acabo de decir, no lo hace la mujer, no, es muy raro.
0:19:14 Puede darse, pero no lo hace.
0:19:17 Y si lo hace, lo hace contar en la vida.
0:19:20 ¿Qué se enamora?
0:19:22 El hombre se enamora, se enamora de esa...
0:19:25 ¿El hombre es capaz de seguir con la mujer que no le gusta?
0:19:28 ¿Qué me está preguntando?
0:19:40 No puede por un rato, después no.
0:19:44 Pero está muy bien esa pregunta.
0:19:47 Y cuando decimos no le gusta, no le gusta en el sentido más brutal el significado.
0:19:54 No lo atrae, y no se puede.
0:19:57 Lo mismo, una mujer.
0:19:59 Todo lo demás se negocia.
0:20:02 Por ejemplo, está saliendo con un tipo que vuelve tarde.
0:20:06 Bueno, a lo mejor lo convencés de que venga temprano.
0:20:09 Está saliendo con un tipo que habla muy fuerte en el cine.
0:20:15 Por el que promete que no va a hablar en el cine.
0:20:18 Ahora está saliendo con un tipo que te resulta feo.
0:20:22 ¿Qué haces? Lo convencés de que sea lindo.
0:20:27 Y ahí sí rompemos.
0:20:29 Por eso, mi modestísima experiencia, he tenido a lo largo de tantos años, dos novias.
0:20:37 Sí, pero un montón de ensayo me parece.
0:20:42 Le puedo decir que cuando todavía no se extinguió el deseo, tenemos esperanza.
0:20:52 Pero cuando el deseo se extinguió por mucho que me hablen,
0:20:57 los que yo yo, el apego, el afecto, el atén, nada.
0:21:02 No podemos comenzar más.
0:21:04 Así que suélteme a Guilepi.
0:21:07 Vamos a dedicar esto también al negro Herculio.
0:21:11 Y sí, porque salvo las papas de más de una ocasión.
0:21:15 Es una impresión que al negro Herculio no le hacen ningún planteo.
0:21:20 No hay planteo alguno.
0:21:22 No hay planteo alguno que hacer.
0:21:25 Bueno, y a todas las damas que me han dejado, dando muestras de su buen gusto y elegancia.
0:21:32 Hemos de escuchar además en conmemoración de tantas cartas sin respuesta
0:21:40 que envió François, el actor.
0:21:43 Tal más.
0:21:45 Tal más.
0:21:48 No, qué más estas cartas no.
0:21:50 Pero sí, cartas viejas, un bello tango que oiremos en la clásica interpretación de Carlos Gartén.
0:22:47 Las mujeres que eran buenas, las mujeres que eran malas, que nunca pude amar.
0:22:54 Cartas viejas, cuánto amor entre mis manos, cuánto fe, son fantasitas, pero ya nunca volverán.
0:23:05 Sin embargo, de la ingrata, que a me tanto ni una carta, que me vuelva con sola.
0:23:13 Esa carta dice angucias que pasaron y esta otra mi amor que regresó.
0:23:21 Grandes ojos carrieron y lloraron, todos dicen el tartar de la emalia.
0:23:29 Ya en mi caso con la cien carcida quiero ver en una ovea tanto amor
0:23:37 que su llama de cual modo que en la vida, a mi acaricia, fue que amarteo el corazón.
0:23:45 Cartas viejas, nadie sabe la historia que aquí dentro ayer cerraba que jamás relaterá.
0:23:56 Las mujeres que eran buenas, las mujeres que eran malas, que nunca pude amar.
0:24:03 Cartas viejas, cuánto amor entre mis manos, cuánto fe, son fantasitas, pero ya nunca volverán.
0:24:13 Sin embargo, de la ingrata, que a me tanto ni una carta, que me vuelva con sola.

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