Transcripción automática
0:00:00 Hablemos hoy, no, el imperativo no. Hablaremos hoy de Rafael el urbino, el gran pintor.
0:00:12 El sitio de biquérmonos en el renacimiento, así los artistas plásticos estudiaban anatomía para dibujar
0:00:20 y modelaban las figuras antes de pintarlas para ver qué sucedía con las perspectivas y con la luz.
0:00:27 Ya las figuras espirituales, planas, débiles y errásticas, los siglos anteriores,
0:00:37 serían lugar a una nueva generación de imágenes más vivas, más energicas.
0:00:43 Rafael nació en urbino el 6 de abril de 1483.
0:00:51 Era la ciudad urbino patrimonio del duque Guido Baldo de Montefeltro,
0:00:58 y el Guido Baldo se reunía con unos artistas a quienes sostenía, los ocupaba en el decorado, en la ornamentación de su palacio.
0:01:08 Entre sus artistas se hallaba Giovanni Santi, que era el padre de Rafael.
0:01:14 Era pintor y poeta el papá de Rafael, pero los cuadros y rimas de Santi
0:01:20 no pasaron nunca de los muros de la fortaleza.
0:01:23 Giovanni escribió 23.000 versos solo para alabar a su señor y relatar sus hazañas.
0:01:31 Y esta labor, aunque no le abrió las puertas de la fama, le conquistó la estimación del Guido Baldo.
0:01:37 Giovanni Santi estaba casado con Maya de Batista Charla y de ese matrimonio nacieron tres hijos,
0:01:47 los que se murieron en la infancia y Rafael.
0:01:51 Y Rafael creció en este clima refinado, animado por otros artistas y por su propio padre, empezó a estudiar pintura.
0:02:01 Eso va a ver cómo es.
0:02:03 También empezó a entrenar con algunos geómetros en el arte de la perspectiva.
0:02:09 El duro estaba muy tranquilo, pero cuando Rafael tenía 10 años, la malaria fulminó a los padres y de golpe...
0:02:18 No es una metáfora, sino la enfermedad, mal del aire.
0:02:25 De golpe Rafael quedó solo en medio de una disputa entre sus tíos, que no es que se lo querían llevar, sino que se lo querían sacar del cino.
0:02:33 Y Duque se hizo el Gil. Bueno, nadie quería cargar con el pobre Rafael.
0:02:39 Pero entre tanta desgracia apareció una persona que lo salvó de terminar en el hospicio de indigentes.
0:02:45 Se trataba de Timoteo Bicci, un pintor que había desempeñado un papel semejante al de Leonardo da Vinci, cerca del Ludovico.
0:02:57 Bicci tocaba el violín, tocaba el laud, cantaba maravillosamente bien y se reducía con esas virtudes a todas las minas en cualquier lugar que visitaba.
0:03:08 Timoteo decidió apadrenar a Rafael, se lo llevó a su casa y en poco tiempo.
0:03:14 Rafael aprendió algunas de las técnicas de pintura que profesaba su maestro y también las que tenían que ver con las minas.
0:03:21 Respecto a la pintura, ya en esa época pintó la visión de una noche y el San Miguel, que está no hoy en el Lubro.
0:03:30 Respecto a los otros asuntos, parece que maestro y alumno salían juntos a caminar y saludar señoritas.
0:03:39 Y lo decían que era con el solo propósito de contemplarlas para ampliar los límites de la belleza pictórica.
0:03:50 En una carta escribió Rafael. Tengo la carta aquí.
0:03:55 Para pintar a una mujer bella, necesitaría ver muchas mujeres bellas.
0:04:06 Pero viendo carestía y escasez, tanto de buen juicio para elegir la mejor, como de bella mujeres, yo me sirvo más bien de cierta idea que me viene la mente.
0:04:18 Pero en realidad parece que Rafael observaba a muchachas para colgar luego las telas o en los muros, el conjunto o la idealización de lo visto.
0:04:34 En principio no recurría a modelos vivos.
0:04:38 Según el biógrafo Basari, Basari escribió la biografía de casi todos los genios de aquella época que eran muchos.
0:04:45 Pero según Basari parece que Rafael gozaba con verdades de ficción y que inventaba las bellezas que pintaban.
0:04:54 Pero naturalmente tenía que inspirarse en la realidad.
0:04:57 Una vez unos amigos le reprochaban algunos detalles del cuadro amor y psique como poco coincidentes con la realidad.
0:05:06 Y Rafael preguntó y los otros detalles cómo están.
0:05:10 Y se dijo que el pintor dijo que en todo caso trabajaría en eso.
0:05:16 El artista no debe copiar la naturaleza como la ve, sino como debería ser, quizá aún mejor, o ser vecino.
0:05:25 Esto no es el impresionismo, no es pintarla como la ve.
0:05:29 Si no pintarla como debería ser, ¿qué es bien otra cosa?
0:05:33 Para Rafael el modelo desnugo no servía más que como invitación para conservar el detalle en la memoria,
0:05:42 pero no para repetirlo, sino para comprender las relaciones, para crear acción, para crear vitalidad, pero no para repetirlo.
0:05:52 Recuerde la diferencia entre el Caravallo y esta idea.
0:05:57 Caravallo sentía necesidad de pintar con un realismo brutado.
0:06:01 Había pintado aquel tránsito de la Virgen, escandaloso tránsito de la Virgen, con el cadáver de su amada,
0:06:10 y a la resurrección de Lázaro con un muerto de cuatro días.
0:06:15 Sin embargo hay que decir que en un momento Rafael hizo uso del naturalismo más extremo para escapar de una situación bastante complicada.
0:06:24 Parece que el pintor llevaba una vida disoluta y muchas veces se quedaba sin guita.
0:06:30 Un día se había hospedado en una posada, hacía ya tiempo que estaba allí, se le ocurrió pedirle a cuenta,
0:06:38 y advirtió que debía mucho más que lo que temía.
0:06:41 Entonces le dijo al encargado que volviera a buscar el importe en un rato.
0:06:48 Al cabo del plazo del dueño Fuy se encontró la habitación vacía, pero sobre la mesa había unas monedas relucientes de oro.
0:06:57 Bueno, estaban pintadas.
0:06:59 Estaban pintadas.
0:07:00 Deben ser mentiras.
0:07:03 Se fue a Florencia, mitad para no pagar algunas deudas.
0:07:08 Y así continuó esos estudios con el pinturiquio, que era sordo y considerado uno de los mejores artistas decoradores del siglo.
0:07:15 Decoradores quiere decir que no era tan buena.
0:07:17 Junto al pinturiquio, además de pintar, se dedicaban a esconderse de las campañas de terror que Cheza Leborgia lanzaba sobre algunas poblaciones.
0:07:29 Entre otras cosas, Rafael y el pinturiquio, trataron de evitar que Cheza Leborgia se interesase por ello, porque era preferible hacerse yotario ante sujetos como él.
0:07:43 Entonces, allí también estudió anatomía y se llevó a su pieza un montón de esqueletos.
0:07:51 Bueno, debe haber sido un cuadro de antezco.
0:07:53 Entrar a la pieza de Rafael, si hubiera los esqueletos, uno sentado, el otro acostado.
0:07:59 Pintó muchísimo.
0:08:01 Se puso en contacto con los adeptos de Sabonarola, aquel que mataron allá en las piaces de la señoría.
0:08:08 Él estaba en un grupo liderado por FACCO de la Porta.
0:08:14 Pero al final se cansó de Florencia y hizo para Roma con una carta de recomendación para el Papa Julio II.
0:08:20 En Roma lo esperaban cuando llegó quedó completamente admirado por el arte clásico, el arte de los griegos, el arte de la antigüedad clásica.
0:08:30 Se puso a estudiarlo con gran devoción y él mismo incorporó a su obra una enorme carga de espíritu helenista.
0:08:38 Si ustedes ven sus cuadros, algunos parecen verdaderamente una reproducción del espíritu griego.
0:08:45 Bueno, como que algunos se llaman...
0:08:47 Sí, sí, de hecho, referencia a esas cosas.
0:08:49 Algunos no les gusta eso.
0:08:54 No sé si a mí tampoco me gusta, no sé.
0:08:57 Por ahí yo prefiero... ¿Qué importa lo que yo prefiero?
0:09:01 Esa sinperfección, esa cosa menos terminada de los cuadros de Miguel Ángel, que...
0:09:06 pocos cuadros de Miguel Ángel porque no era un pintor.
0:09:09 Era un escultor.
0:09:11 Fue pintor porque aprendías de todo en aquella época, entonces fue pintor.
0:09:15 ¿Y porque había que elaborar?
0:09:16 Claro, todos dicen que el mejor de todos, desde los puntos de vista de la perfección, fue Rafael.
0:09:22 Pero el otro tenía un descuido, una especie de enojo que era también muy poderoso.
0:09:30 En Rafael todo es más prolijo.
0:09:33 En fin, en por.
0:09:34 El papa lo llamó.
0:09:36 El papa también quería darle a Roma un esplendor antiguo, helenístico, y lo llamó Rafael.
0:09:43 Pero ahí estaba también Miguel Ángel trabajando con la tumba de Julio II,
0:09:49 una de las grandes tragedias de la vida de Miguel Ángel, nunca la terminó.
0:09:53 La cosa es que a Miguel Ángel no le gustó nada la presencia de Rafael.
0:09:58 Rafael le mostró unos dibujos al papa, el papa la encargó inmediatamente,
0:10:03 y la decoración de las habitaciones en las que ya estaban trabajando,
0:10:07 señor él y su árbitro y otros pintores.
0:10:10 Bueno, Julio II se emocionó tanto con los dibujos de Rafael, los echó a todos,
0:10:15 a los otros le dijo, lave las paredes y le encargó las pinturas a Rafael.
0:10:20 Incluso le encargó los tapices de la capilla septina, encargo que Miguel Ángel esperaba.
0:10:26 Porque igual estaba pintando el techo, ¿cómo no le van a dar los tapices?
0:10:30 No, se los dieron a Rafael.
0:10:32 Rafael aceptó el encargo y se encargó el de las tareas más ingratas de la pintura.
0:10:40 No delegó nada, ni siquiera la construcción de andamios.
0:10:44 Los hacía él.
0:10:46 En realidad creo que todo era para mostrarse frente a Miguel Ángel.
0:10:49 Recordemos que Miguel Ángel pintaba la capilla septina en una posición de un incomodidad supina.
0:10:54 Y escribía cerca de ella.
0:10:57 Pero se odiaron, eh, se odiaron, entre los ayudantes, de uno y otro,
0:11:01 más de una vez se agarraron de los pelos.
0:11:04 Con la muerte del papa, Julio II, las cosas cambiaron, apareció León X,
0:11:09 Miguel Ángel despechado, no despechado por la muerte de Julio,
0:11:13 pero despechado, en fin, a abandono Roma.
0:11:17 Rafael fue nombrado arquitecto, se dedicó a esculpir, a dibujar,
0:11:22 a hacer declaraciones de teatro para las obras religiosas.
0:11:26 Un día debió pintar en tamaño natural al elefante favorito del papa.
0:11:32 Era más cortesano, Rafael, que Miguel Ángel,
0:11:36 que era un tipo feo, desagradable, antipático.
0:11:39 Era más urbano en todo sentido.
0:11:41 Muy tranquilo estaba Rafael, hasta que conoció a una chica llamada la fornarina,
0:11:46 que como su nombre indica era hija del panadero.
0:11:51 ¿Cómo me gustan las hijas del panadero?
0:11:53 Las mejores minas son hijas del panadero, o laboran en las panaderías.
0:11:58 O se llaman fornarina, que es casi domingo.
0:12:00 O las ve uno en las panaderías.
0:12:04 Pero en cambio uno no las ve en el cine, en las películas de cine.
0:12:08 Ahí no.
0:12:09 Yo he visto algunas películas, en algunas películas he visto alguna belleza.
0:12:14 Pálida imitación de las bellezas que he visto yo en el tren,
0:12:19 o acompañando otro tipo en un baño.
0:12:22 Totalmente, totalmente acuerdo.
0:12:26 Qué cosa, alguna de las sueñas de mi vida fue que se cruzara conmigo a alguna hija de panadero.
0:12:33 Alguna inmersidad suerte he tenido en eso.
0:12:36 Y sí, conocí a hijas de panadero, nunca estrella de cine, ni modelos de la tele.
0:12:42 Cuando las conocí, nunca vi un plato.
0:12:44 Fío largo.
0:12:45 Sí, sí, sí, sí, sí, me acuerdo.
0:12:48 Bueno, Rafael se había de eso y se enamoró.
0:12:51 Era una moracha hermosa y según Bazar y...
0:12:56 esta mujer lo agotó.
0:13:00 Dice Bazar y...
0:13:01 Maldita sea esta mujer que causó la muerte del príncipe de los pintores
0:13:06 cuando a Uzi allaga en la primavera de la vida.
0:13:09 Fue una cortesana cuyos besos ardientes devoraron la fuente de la vida de Rafael.
0:13:14 Dice Bazar y...
0:13:15 Muerto de bronca porque no era él.
0:13:17 Claro, más bien.
0:13:18 Que se moría de eso.
0:13:20 Parece que así como se entregó largas temporadas a la pintura,
0:13:25 no delegando ninguna tarea por áspera que fuese,
0:13:29 del mismo modo no abandonó la habitación de la fornarina.
0:13:33 Y entonces el 6 de abril de 1520, el día de su cumpleaños,
0:13:38 no del suyo de Orio, murió, según dijeron,
0:13:42 de una fiebre perniciosa.
0:13:46 Pero si era cierto que hace mal.
0:13:48 No, no le salga el caso.
0:13:50 Eso era antes, ¿no?
0:13:51 Ahora te hacen creer que hace bien.
0:13:53 Yo no sé quién está detrás de esto, ¿no?
0:13:55 Yo iba a ver intereses creados en ambas afirmaciones.
0:13:59 No debe ser ni tan mal como decían ni tan bien como dicen.
0:14:02 Y además todo depende de cada uno.
0:14:04 ¿Qué se está metiendo la ciencia o la historia con eso?
0:14:07 Bueno, no lo sé.
0:14:09 Algunos cuentan que aquella noche, la noche de la muerte de Rafael,
0:14:14 se sintió en Roma un gran temblor
0:14:17 que ya acudió a las paredes del Vaticano.
0:14:21 Los funerales fueron tan pomposos como los de un príncipe,
0:14:25 como que príncipe le llamaba.
0:14:28 A la cabecera de su lecho de muerte fue colocado el cuadro,
0:14:31 la transmutación que fuera destinado luego a la catedral de Narona.
0:14:36 Tenía 38 años cuando murió Rafael.
0:14:40 Notece que Miguel Ángel vivió hasta bien pasado los 80.
0:14:45 León X, el papa, escribió el epitáfio Rafael.
0:14:49 Dice, aquí ya se Rafael.
0:14:51 Ponto.
0:14:54 Cuando vivía, la gran madre de las cosas temía ser vencida.
0:14:58 A su muerte tuvo miedo de morir.
0:15:00 No es un buen epitáfio.
0:15:04 Como que escribió un papi.
0:15:05 Mal, mal construido.
0:15:08 Bueno, a quién quiere dedicar esta breve...
0:15:11 Quería empezar a recordar brevemente, Alejandro,
0:15:14 porque hay ciertos momentos de la que quería que valiera la pena recuperar
0:15:18 y, esperadamente, con nuestro amigo Miguel Vincen,
0:15:21 hemos estado en el Louvre,
0:15:22 pasando por Rafael y por Caravaggio,
0:15:24 también pasando a mí mismo un momento frente a eso.
0:15:27 Y así habrá visto esas multitudinarias construcciones
0:15:34 de Rafael con todos los tipos bien acomodadas.
0:15:37 Totalmente, cada uno en su lugar.
0:15:38 Y que se vayan esas oscuridades caravajes,
0:15:39 que a mí me gustan, ciertamente, mucho más.
0:15:42 Pero estaba pensando que el otro día leía,
0:15:44 en otro día leía, no sin cierto estupor,
0:15:46 que socrates, en algún comentario,
0:15:49 ulterior de alguno de sus diólogos,
0:15:52 habla de la pintura como de la escritura,
0:15:54 en esa especie de oposición que tenían los clásicos.
0:15:56 Dice, ¿por qué la escritura, finalmente,
0:15:58 no se constituye sino en un instante?
0:16:01 Cuando los discípulos le preguntan,
0:16:03 porque dice, ¿por qué un libro dice algo
0:16:05 y siempre va a decir lo mismo,
0:16:06 es como una máquina que repite,
0:16:08 vamos, es como un cuadro, dice socrates,
0:16:10 que siempre reproduce esa misma cosa.
0:16:12 Uno no puede dialogar con un cuadro,
0:16:14 dice con cierto desprecio.
0:16:15 Y con el mismo desprecio por la literatura
0:16:17 que por la pintura, dice,
0:16:18 uno no puede dialogar con un libro,
0:16:20 sí con un maestro.
0:16:21 Dice, y este es el motivo por el cual,
0:16:23 en otro de los diálogos le dice
0:16:25 un tipo que había memorizado un poema,
0:16:27 por favor, no cites una cosa así,
0:16:32 leyendo la, porque, y menos estando
0:16:34 su autor presente, como que estaba
0:16:36 copiándose el texto.
0:16:37 Decía que la improvisación de la palabra
0:16:40 estaba realmente la posibilidad del seño,
0:16:42 de la recuperación y de la explicación.
0:16:44 Esto duró un tiempo,
0:16:45 yo creo que ya en el renacimiento
0:16:47 la gente había advertido la distancia
0:16:49 que hay entre la literatura y la pintura
0:16:51 y la singularidad de cada una.
0:16:52 Y ya en el renacimiento también
0:16:54 los meseras eran cultos.
0:16:55 Esto es una gran ventaja que hemos perdido
0:16:57 en la moneda.
0:16:58 Sí hemos perdido, sí.
0:16:59 Digamos que un César Borges,
0:17:00 que estaba loco,
0:17:01 pero también en julio segundo,
0:17:02 pronto un papa.
0:17:04 Cuando encargaban una obra,
0:17:05 sabían cuando un artista era bueno.
0:17:06 Y el artista, a su vez,
0:17:08 creo que tenía sin temores de al ridículo
0:17:11 o a la soberbia
0:17:13 esta cierta idea de inmortalidad.
0:17:15 Sabían que estaban pintando para siempre,
0:17:17 por ejemplo.
0:17:18 Igual que alguno autor estaba pintando para siempre.
0:17:21 Estaba pensando también que los artistas
0:17:23 estaba esta especie de espíritu anti-Linus.
0:17:25 Esta cosa es decir,
0:17:26 Linus sostenea,
0:17:27 este es el mejor de los mundos posibles.
0:17:30 Ese es el mundo que hay.
0:17:31 Hagamos uno mejor.
0:17:32 Y esto solo lo puede lograr el arte.
0:17:35 Digo, saburaron la creer todo lo contrario
0:17:37 y por eso terminó quemado.
0:17:38 Y pensaba que, bueno,
0:17:39 anda dando vueltas por así,
0:17:41 tiene la soledad, la realidad,
0:17:43 la noche negra que uno lo envuelve.
0:17:45 Y finalmente, quizás,
0:17:46 como dicen los orientales,
0:17:48 aún no aquí es imposible distinguirlo,
0:17:50 la eternidad,
0:17:51 no sé nada más que ese momento perfecto
0:17:53 que dura,
0:17:54 justamente eso, un momento.
0:17:55 Y que la pintura ha sido eterna.
0:17:58 Que ese fímero en la pintura
0:18:00 dura para siempre.
0:18:01 Absolutamente.
0:18:02 Ese dedo que está a punto de tocar al hombre
0:18:06 en la pintura de Miedelangel.
0:18:08 No se mueve de allí.
0:18:10 Está siempre allí.
0:18:11 Un momento, justamente,
0:18:13 es el título de este beso ball
0:18:15 de nuestro querido Héctor Stamponi
0:18:17 que escucharemos tocado por él
0:18:19 en solo de piano.
0:18:20 A ver, Álvaro.
0:18:36 Miedelangel.
0:19:06 Miedelangel.
0:19:36 Miedelangel.
0:20:36 Era Héctor Stamponi.
No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!