Transcripción automática
0:00:00 La venganza de la Célia de la Venganza
0:00:07 Continuamos en la venganza Célia Terribles y efectivamente estamos en el Auditorio de
0:00:11 Radio de Plata aquí en la calle Gorriti 5963 que está entre Rabinian y Arevalo en
0:00:18 el barrio de Palermo en el Límite con Colegiales.
0:00:22 Hablaremos tal como hemos prometido de rechazos amorosos.
0:00:27 ¡Oh! ¿Qué tema?
0:00:30 Nicea era una naya de hija del río Sangario y de la diosa Sibeles.
0:00:36 Era rebelde al amor y sólo le gustaba la caza.
0:00:43 Había una corriente divina disidente que estaba en contra del amor entre los dioses grisgos.
0:00:55 Su máxima autoridad era Artemis, la diosa de la caza justamente, que se oponía a cualquier
0:01:03 manifestación amorosa.
0:01:07 Por el contrario, Afrodita representaba la cúspide del deseo amoroso y ambas corrientes
0:01:14 de pensamiento y acción se odiaban.
0:01:18 Esta obviamente era rebelde al amor, quiero decir, que estaba en contra de Afrodita
0:01:22 a favor de Artemis.
0:01:24 Un día un pastor de Frigia llamado Igno, ¿qué tal Igno?
0:01:30 Intentó seducirla y según dicen, no recibió más que desde Enes.
0:01:37 ¿Por qué era en contra del amor?
0:01:39 Justo el pastor, ¿qué tal? ¿Qué se yo? ¿Cómo le va? ¿Soy Igno?
0:01:47 Y como Igno no se resignaba al fracaso, yo como son insistidores algunos, especialmente los pastores,
0:01:53 Nisea, esta chica, esta naya de resistente al amor, lo mató.
0:01:59 Se llamaba que tanto el peguino flechaso y el líquido.
0:02:02 Eros, que era Dios del amor, indignado con Nisea, inspiró en Dioniso, Dios del vino, era una bestia.
0:02:13 Una violenta pasión por esta chica, por Nisea, a la que además había visto desnuda en el baño.
0:02:24 O sea que no le costó mucho infundirle una pasión a Dioniso que ya venía a medio apasionado.
0:02:34 Y bueno, Nisea tampoco quiso ceder al Dios, a Dioniso.
0:02:37 Vino a Dioniso que se yo, nada, nada.
0:02:40 Y otra vez lo amanosó con la flecha.
0:02:42 No me sigas corobando porque te voy a ensantar como si rascó el croto.
0:02:46 Y con otras palabras, probablemente.
0:02:51 Y Dioniso hizo lo siguiente.
0:02:54 Transformó en vino el agua de la fuente donde ella se bañaba y bebía.
0:03:01 Y una vez que la vio completamente borracha, entonces llegó y se le tiró encima.
0:03:08 Y no le costó nada, dice la leyenda, adueñarse de Nisea, ya que el vino era feral, que hacía como te quiero, todo eso.
0:03:18 Ahora, cuando volvió en sí, esta muchacha, esta Nayade, quiso suicidarse.
0:03:26 Al final, terminó haciendo las pases con Dioniso.
0:03:30 Se amigó.
0:03:31 Tanto se amigó que tuvieron varios hijos, con eso le digo todo.
0:03:35 Otra historia de rechazo.
0:03:38 Un joven persa llamado Daray agua se enamoró de Sira, la hija de un comerciante de Susa en Persia.
0:03:50 Ella no lo correspondió, pero para divertirse un rato tuvo la idea de obligarlo a realizar hazañas imposibles o en hojosas.
0:03:58 Y lo hizo con la promesa de entregarle su amor si las cumplía exitosamente.
0:04:05 Bueno, en primer lugar, Daray agua fue a buscar los frutos del árbol de la sabiduría,
0:04:10 que crecía no lejos del río Indo en los confines del imperio.
0:04:14 Los frutos provienen de una higuera que está rodeada de centinares de otras higueras,
0:04:21 cuyos sigos producen conocimiento falsos.
0:04:25 El joven permaneció largos años en una enorme biblioteca que hay junto al jardín de las higueras.
0:04:31 Así indagó en los libros secretos la forma de diferenciar un fruto de otro.
0:04:39 Después tuvo que profanar el templo de Maharashtra, donde sólo pueden entrar los monjes de la Orden de la Águila.
0:04:49 Daray agua entró como novicio y, al cabo de siete años de duras pruebas, fue ordenado monje.
0:04:57 Entró al templo y robó unas reliquias que entregó luego a la joven siga.
0:05:04 A lo largo de los años Daray agua fue matando dragones, escalando montañas, resolviendo enigmas y desobedeciendo leyes sagradas.
0:05:16 A cada asaña cumplida, Sira le encargaba otra, prometiendo que sería la última.
0:05:23 Finalmente ella le dijo que nunca lo amaría.
0:05:26 Daray agua no le importó mucho porque ella estaba viejo y Sira también.
0:05:32 Murió poco después creyendo que no había sido amado por la insuficiencia de sus provezas.
0:05:39 Y es que en realidad siempre es preferible creer que a uno no lo quieren por una razón exterior.
0:05:45 Uno elige y ya no me quiere por esto porque son pocas las ideas que hice, porque no se anima, porque en su familia le dan contra.
0:05:54 Una excusa maravillosa para creer que no te aman por esa es la falta de dinero.
0:06:24 Y el momento suera pobre sonidad, que brío de luna no pude ofrecerte más bien que mi terlura.
0:06:37 Vos pesaste en la balanza tu hermosura y el dinero del otro de su mar.
0:06:51 Conocida es la historia de este nevea.
0:06:57 Este nevea era la esposa del rey Pretto.
0:07:02 La pareja, Pretto y este nevea vivían en Tirinto. Tenían varios hijos, eran muy felices.
0:07:10 Un buen día se goa Tirinto, un muchacho llamado Belero Fonte, que era un muchacho muy lindo, bien puesto.
0:07:19 Y la mina se enamoró. Este nevea no aguantó ni un minuto.
0:07:24 Seguida fue y le insinuó sus pretensiones.
0:07:30 Belero Fonte casi ofendido, se negó a satisfacer aquellas pretensiones.
0:07:37 La muchacha entonces irritada, es una forma mítica que se repite muchísimo, distintas culturas.
0:07:45 La muchacha irritada lo acusó, en secreto, ante su marido Pretto, de haber tratado de violentarla.
0:07:53 Pretto, que sentía un poco de afecto por Belero Fonte, en vez de matarlo él mismo lo envió a Alicia,
0:08:01 a casa de su suegro, Liovates, con una carta en la que pedía a Liovates que diese muerte al portador.
0:08:13 Y se cerrada la carta.
0:08:15 Sí, me lo imagino.
0:08:17 Y se abrió la carta y dice, matalo. Matalo a este.
0:08:24 Mate sea el portador y a la vista.
0:08:27 Cuando le lló la carta a Liovates ordenó a Belero Fonte que eliminara a la quimera,
0:08:32 que era un monstruo con cabeza de cabra y cuerpo, mitad león, mitad dragón.
0:08:37 Para Liovates esto era matarlo, porque sabía que jamás Belero Fonte lograría acabar con este ser terrible.
0:08:45 Pero el muchacho montó sobre el caballo al lado Pegaso, ¿se acuerdan?
0:08:50 Y elevándose por los aires se precipitó sobre la quimera, y como ya hemos contado alguna vez,
0:08:55 la mató de un solo saque.
0:08:58 Impresionado Liovates lo mandó a luchar contra las Amazonas, después contra los sólimos,
0:09:04 y contra un grupo de valientes que él mismo había formado.
0:09:07 Y Belero Fonte los mató a todos.
0:09:10 Entonces Liovates reconoció que el héroe era de origen divino,
0:09:15 y lleno de admiración le mostró la carta de preto, y se miraba la carta que me mandaba.
0:09:22 Y lo invitó a quedarse en su reino.
0:09:25 Y además le presentó a su hija, Filonoe, que era joven y hermosa.
0:09:30 Y le tomaba, dice, le presento a Belero Fonte.
0:09:33 Mató a la quimera, hay un montón más.
0:09:37 Ese es otro rechazo, el de Stenevea.
0:09:42 Por último, no podemos hablarnos, sí podemos hablarnos en secreto,
0:09:47 pero tampoco podemos olvidarnos de Celemno.
0:09:51 Fíjese, Arjirea era la nínfa de una fuente arcadia
0:09:56 que amaba a un joven y hermoso pastor llamado Celemno.
0:10:02 Pero el amor de Arjirea, usted sabe que las nínfas son también especies de divinidades,
0:10:07 y son jóvenes para siempre, son siempre jóvenes.
0:10:11 Y se enamoró de este chico Celemno,
0:10:14 pero el amor de Arjirea duró mientras Celemno fue joven,
0:10:18 cuando perdió la belleza y la juventud, la nínfa lo abandonó.
0:10:23 Y el pastor murió de desesperación,
0:10:26 y Afrodita, la diosa del amor, lo transformó en río.
0:10:33 Pero como a pesar de la transformación Celemno seguía penando de amor,
0:10:38 es decir, ya no era más celemno, era río, pero río y todo seguía penando.
0:10:45 Entonces, Afrodita le concedió el privilegio de olvidar todas sus penas,
0:10:50 hizo que el río olvidara, pero más todavía.
0:10:54 Dicen que todos los hombres o las mujeres que se bañan las aguas de ese río
0:11:02 olvidan sus pesares amorosos.
0:11:06 El río olvidó y él mismo se hizo olvidó.
0:11:11 Y todos los que allí se bañan encuentran el olvido su pena de amor.
0:11:17 Me imagino que llegarán centenares y hasta miles de estas zonas
0:11:22 tratando de olvidar sus penas de amor.
0:11:26 Pues quizá no.
0:11:28 Yo que una forma de sacralizar banalidades
0:11:35 es creer que los amores de uno son singulares únicos e irrepetibles.
0:11:43 Entonces cuando uno lo deja una mina, cree que esa es la única pena que hay en el universo
0:11:48 y que es un milagro que las estrellas no se apagan.
0:11:53 Y entonces el tipo resuelve perseverar en su pena.
0:11:57 Se le ofrece el olvido, quiero olvidar, olvidé a amigos dirán algunos.
0:12:02 Y el tipo dice, no, no quiero olvidar.
0:12:04 Así que estoy pensando que a lo mejor no hay tantos postulantes a lo olvido
0:12:08 sino que quiere el amante rechazado, no es el olvido,
0:12:13 sino que la persona que lo rechazó revise su decisión y regrese.
0:12:19 Bueno, para eso no hay río.
0:12:21 Sólo hay río para el olvido.
0:12:24 He ido a la discoteca y lo único que le impresionó al discotecario
0:12:31 fue la transformación del agua de la primera fuente allí donde se bañaba la nalla
0:12:38 en vino por parte de Dioniso.
0:12:41 Pero no escuchó lo demás que él.
0:12:43 No, ahí se quedó.
0:12:45 No pudo escuchar lo demás porque estaba impresionado con eso
0:12:48 y enseguida fue a buscar un disco.
0:12:51 Sí, pero no hay una canción de eso.
0:12:53 Hay un disco que de modo muy difícil de precisar
0:12:59 habla de el vino que antes fue agua.
0:13:04 Y es el vino triste.
0:13:07 El vino triste.
0:13:09 El vino que fue triste,
0:13:10 pranicea la nalla que quería rechazar a Dioniso
0:13:13 y no pudo porque ya se sabe como es uno.
0:13:16 Cuando se... a la segunda copa ya no hay rechazo que vaya.
0:13:19 Bien, escucharemos entonces el vino triste
0:13:22 en la versión de Hugo del Carri.
0:14:29 Amigos.
0:14:31 A todos pido perdón.
0:14:33 Se apaga a Ducristo.
0:14:35 Se ha tenido a tu bebé.
0:14:37 Quiero tomar mi emoción.
0:14:40 Pero aplato tan bien como todo varón.
0:14:49 Cuando se tiene un pesadero.
0:14:56 Cuando se tiene un pesadero dentro del corazón.
0:15:01 No se puede evitar que el vino se vuelva pesado y dorado.
0:15:06 Como el tijote al final de mi canción.
0:15:16 Dicen los amigos.
0:15:21 Que no soy el mismo.
0:15:24 Y hoy en cuanto debo me da por no hablar.
0:15:29 Por arrinconarme con mi pesimismo.
0:15:34 Y que muchas veces me han visto dorar.
0:15:37 Y no saben en los que no es la bebida.
0:15:42 Si no que me faltan en aire y en la luz.
0:15:46 En el alma llevo sangrando una ida.
0:15:51 Y voy por la vida cargando mi peru.
0:16:01 A todos pido perdón.
0:16:03 Se apaga a Ducristo.
0:16:05 Se ha tenido a tu bebé.
0:16:08 Quiero tomar mi emoción.
0:16:11 Pero a flotar tan bien como todo varón.
0:16:22 Cuando se tiene un pesadero dentro del corazón.
0:16:27 No se puede evitar que el vino se vuelva pesado y dorado.
0:16:32 Como el tijote al final de mi canción.
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