Transcripción automática
0:00:00 Tenemos hoy tres sustituciones amorosas. La primera.
0:00:05 Tendró más durante el gobierno de Tiberio en el año 19, pues en Cristo, un noble llamado Desio Mundo,
0:00:14 pero seguía con enorme pasión a una drama llamada Paulina. Pero no conseguía saludarla.
0:00:21 Dice la crónica que la mujer era un decado de virtud y de caosidad.
0:00:26 Dios siempre hizo la suerteza.
0:00:29 Desesperado de Esio desplegó una latín que evidencia hasta qué punto los romanos participaron
0:00:34 en los cultos importados en aquel siglo I, o que no es eso lo que interesa a esta chapa.
0:00:41 Parece que esta dama, Paulina, era adepta al culto exicio de Isis, y cierto día los aserdotes de Isis
0:00:51 le hicieron saber que el Dios Anubis, aquí de cabeza de Chacal, recuerda, es el que tiene de cabeza el perro, Anubis.
0:00:59 Los aserdotes de Isis le dijeron a Paulina que Anubis deseaba adientemente tener una cita nocturna con ella en el templo.
0:01:09 Y pafuele, y quedó, que le dice cómo le va Paulina, acá manda decirles Dios Anubis,
0:01:15 que anda con ganas de tener una cita en el templo con usted.
0:01:20 Maravillada por aquella invitación, acúlese, se trataba de un encuentro divino, la dama se presentó nomás,
0:01:28 la versión era ante Anubis.
0:01:31 Lo que Paulina ignoraba era que de Esio mundo había sobornado a los aserdotes por cinco mil denarios,
0:01:39 y que en verdad que apareció desde antes era el propio Esio, disfrazado de Anubis, no dice acá cómo.
0:01:48 Bueno, después de algunos visajes, de algunas palabras, grandilocuentes,
0:01:54 el paso de Anubis finalmente se unió a la atemorizada Paulina.
0:02:00 Poco más tarde el engaño fue descubierto, pero ni siquiera por Paulina que se había quedado lo más contenta.
0:02:07 Los aserdotes arrepentidos hablaron, y el emperador Tiberius tuvo excusas para atacar un culto ajeno que traía montado entre ese exenso.
0:02:18 Mandó desterrar a Esio, crucificar a los aserdotes extranjeros, arrasar el templo y arrojar al Tiber la imagen de Isis.
0:02:28 Así terminó aquel amor, aquella sustitución.
0:02:33 Segunda historia.
0:02:35 Está sucedió en España más precisamente en Aragón, a comienzo del siglo XX.
0:02:40 Pedro II, el católico, ponde de Barcelona y rey de Aragón, era un hombre galante.
0:02:47 En 2004 se casó con María de Montpellier, una muchacha que, a pesar de sus juventus, ya se había ganado dos meses.
0:02:57 El motivo en el enlace no fue el amor, sino el interés.
0:03:02 María acordaba a Pedro los domenios de Montpellier que él tenía.
0:03:07 Dicen que una vez que se casaron, Pedro no le dio bolilla a María y que ni siquiera consumó el macimón.
0:03:14 En cambio se dedicó a corcejar a otras muchachas.
0:03:18 Un día, Pedro II con Montpellier y se enamoró de una dama.
0:03:22 Sin mayor problemas, yo a conocer a todo el mundo que la deseaban.
0:03:29 María, la mujer enterada del asunto, sufría muchísimo.
0:03:32 Pues entonces cuando se armó una nitrilla, los cónsules y nobles de Montpellier, que estaban del lado de la Reina María,
0:03:40 se empiraron desde el enamoramiento del rey y llamaron a un hombre de confianza de Pedro para pedirle algo inabullito.
0:03:48 Le prometieron que si lo saludaba, lo harían rico.
0:03:52 Aquel caballero de confianza de Pedro respondió a los nobles de Montpellier que si lo pedido no era nada que mancharse su reputación, haría lo que se le indicase.
0:04:03 Los nobles le dijeron los intros.
0:04:05 Vos sabéis que nuestra señora la Reina es una de las más castacionistas mujeres que hay, y sabéis que el rey está loco por otra mujer.
0:04:15 Oroguemos que hagáis lo posible para convencer al rey de que la mujer de la que se ha enamorado se encuentra dispuesta a captar su deseo.
0:04:22 Le diréis que ella se encontrará con ella oscuras en una cosenta de palacio.
0:04:29 Nosotros haremos que envíe y saldá más, no que ya se haga con el rey.
0:04:34 Siga la Reina María.
0:04:37 ¿Qué significa?
0:04:39 El caballero que no le gustaba que Pedro tuviera ganas de amoroso fuera del matrimonio, no porque eso.
0:04:43 Podía roer la estabilidad de la corona, aceptó la propuesta de los hombres de Montpellier.
0:04:49 Muy bien, era necesario que Pedro se uniera a María para conseguir un uso sólido.
0:04:54 Una semana antes de la ejecución del plan, los funcionarios de Montpellier mandaron que durante 7 días se celebraran mis saciasco feliciosos
0:05:03 para que todos sabiera bien y para que Pedro en aquel único encuentro dejara embarazada la reina.
0:05:08 Y llegó la noche convenida.
0:05:10 El hombre de confianza de Pedro le dijo que la muchacha lo esperaba en determinada habitación y así allí fue el rey.
0:05:17 ¿Entendéis, el amigo de contigo?
0:05:19 La mina que te gusta, vos te está esperando en la habitación de la Isidem.
0:05:24 Bueno, y el rey fue a la 37 y se metió.
0:05:30 La voz cura se la posió.
0:05:32 Y esa es la crónica que el rey sin saberlo, holgó con la reina.
0:05:37 Dentrás de la puerta, 24 avales y priores y un representante de lo mismo escuchaban para certificar el éxito de la unión.
0:05:48 Y fue citosa.
0:05:50 Quizá por no haber tenido nunca María en sus brazos, Pedro II no percibió en aquella oscuridad nada que pudiera desenanearlo.
0:05:58 O quizá porque era un hombre para quien todos los gatos eran palos.
0:06:02 Unas horas más tarde, antes de me la maneger, algunos funcionarios golpearon a propósito de la puerta.
0:06:14 El rey desembayó su espada, disculpe, temeroso de ser descubierto por alguien mientras engañaba su esposa.
0:06:21 ¿Cuándo el representante de lo viejo abrió la puerta?
0:06:24 Pedro con cierta luminosidad entró y dijo con quien se había acostado.
0:06:30 Usted me dirá, bueno, pero que no dijo nada, igual eran épocas, un poco toscas.
0:06:40 Más mucha oscuridad poca palabra, ¿no? Mucha oscuridad poca palabra.
0:06:45 Y una oscuridad verdadera, ¿no? Como esta oscuridad a la que estamos acostumbrados, en la que se vetó.
0:06:54 Pagas la luz, la luz de la cocina, la televisión, la vereda, la vereda.
0:07:01 En aquel tiempo cuando estaba oscuro estaba oscuro.
0:07:04 Yo un rey no tenía mucho tiempo ni ganas, no hay cienos, siempre pensé que se entroba.
0:07:11 ¿No lo hacía mal?
0:07:12 Sí tenía, imagino yo, una forma, estimular, uscuria más relacionada con el tacto que con la vista.
0:07:27 Que estaba todo oscuro, el rey de la que está entera, que está.
0:07:33 Un turista y jargada.
0:07:35 Bueno, el caso es que el rey se dio cuenta, me ha estado con la reina y dijo, bueno, está bien, ya.
0:07:47 Al cabo de un mes se supo que María Montpelier estaba embarazada.
0:07:51 Nació un hijo que fue su excesor de Pedro II y que fue quizás el más grande de los fondes de Barcelona y de Aragón,
0:07:57 que es Jaime I y Conquistador y los frescos y cunzados.
0:08:02 Vama usted habrá captado.
0:08:05 Última escala.
0:08:07 Está tuvo lugar en frases, ya lo hemos contado.
0:08:10 A principios de febrero de 1745 las ramas de Versace se pusieron muy contesta.
0:08:16 Se había arrociado que con motivo del matrimonio de Telfín, el hijo de Luis XV,
0:08:21 con la infanta de España, se daría en el palacio un gran baile de más.
0:08:27 La verdad era que el rey en esa fiesta elegiría una nueva favorita.
0:08:32 Aseas pocos le había muerto a Marán de Chaturó y el puesto estaba abancado.
0:08:41 Los mejores informados lo efectuaron, pero no, chicos, y se cruzaron a puestas sentando que las ramas
0:08:51 creían tener alguna oportunidad, se entregaban a los siguientes para enterarse del disfrajo del rey.
0:08:59 Como no se sabía de que iba a ir de casa, trataban de abribarlos
0:09:02 para no tener que arrojar perdiendo tiempo tratando de descubrir los detalles de una máscara.
0:09:06 Era un dato importante.
0:09:08 Si uno sabía que el rey era el problema que estaba disfracido de Osso Carolina,
0:09:13 pues no, trataba de levantarte los aes de Osso Carolina.
0:09:20 Por fin se supo que los sirvientes batieron en su magental noquinesa en disfrazaría de árbol.
0:09:27 Sí, para su poco incómodo, para andar de levante, pero...
0:09:32 La noche del 25 de febrero de 1945, toda la corte con disfrazia de abletin,
0:09:38 con rompina, turco, chino, salvaje, pator y mago, se empujaba por la gran galería de Versaz,
0:09:44 alzón que una música burnesca.
0:09:47 De repente se vio la puerta de la posembra real y aparecieron ocho personas que disfrasaron de árbol
0:09:52 por falta de uno.
0:09:54 Las jóvenes que habían acudido a probar suerte se quedaron bocadiertas.
0:09:58 No se sabían cuál de los ocho era el rey.
0:10:01 Una tras otra empezaron a dar vuelta al entorno de aquella fronda.
0:10:09 Acabo de un instante una ley en la señora de Fontel,
0:10:14 que era yó reconocer a Luis Vincenze.
0:10:16 Se acercó al árbol correspondiente, se quitó la mástara y, según el tronista,
0:10:22 empezó a perseguirlo y a correr al árbol.
0:10:24 El árbol no era el rey, sino un hombre de su guardia que conocía bien a la señora de Fontel
0:10:30 y se aprovechó de su error.
0:10:32 Arrastró a la dama un salóncito discreto y obtuvo desde todas las ventajas que pudo desear.
0:10:40 Y ya de hecho la mujer volvió a la fiesta con las ropas en desorden,
0:10:44 muy satisfecha del placer que quería haber recibido, creía haber recibido el rey Nardo.
0:10:50 Su tristeza fue giantesca cuando vio que todos señalaban al árbol correcto
0:10:56 que en ese momento estaba conversando con una muchacha disfrazada de Diana Cajadora
0:11:02 y que era una vez menos que Madame de Pompadour, la favorita elegida en el gel famoso Maillot.
0:11:12 Y el tiempo del árbol era más lejos.
0:11:20 Por eso tiene una laboralidad.
0:11:24 Esto es la que se sabe.
0:11:26 La verdad es que el rey de la dama correcta, el tronco correcto, la raíz correcta,
0:11:34 hay que hacer un antes de quedarse con alguien que uno cree el rey una amplia investigación.
0:11:44 Bueno, estas son las tres subdicuciones.
0:11:46 ¿Cuál les gustó más?
0:11:48 Me gustó más la primera, la de Decio Mundo.
0:11:55 La de Decico que pasaba de Alun.
0:11:57 ¿Qué pasaba de Alun?
0:12:02 Yo me estoy seguro.
0:12:06 No, la última está bien.
0:12:08 No, no, la última.
0:12:10 ¿Vas a aprovecharse?
0:12:12 De andar haciendo el amor con cualquiera, los cubros, mientras están uno al fiel.
0:12:18 Me estoy diciendo que si no se ve.
0:12:20 ¿Están oyendo?
0:12:22 Sí, estoy oyendo con el ruido.
0:12:24 No lo ve ni el mismo que lo está haciendo.
0:12:26 Tú lo vas a ver lo que está haciendo.
0:12:33 Pero por el ruido, por alguien.
0:12:35 Por el ruido, claro.
0:12:37 Para mí, parece que ese es el rey.
0:12:45 ¿Le gustó la última o qué?
0:12:47 A mí me gustó la última.
0:12:49 ¿Pero que se puede aprovecharse del amor y la dama?
0:12:52 ¿Qué piensa?
0:12:54 Y yo creo que siempre nos aprovechamos el error de la dama.
0:12:59 En eso consiste el amor.
0:13:03 En el error de una dama.
0:13:13 La verdad que todas las damas que me han beneficiado con su preferencia momentánea,
0:13:18 que siempre se han creído que no uno es.
0:13:36 También tengo uno a cero honor.
0:13:40 Al árbol.
0:13:44 Y la dama está en el avucado.
0:13:48 Tratada de parecerse a esa arbolidad.
0:13:50 No ha sido otra cosa.
0:13:52 Bueno, hemos elegido una canción que usted tocó hace poco,
0:13:57 junto con María Marta Pizzi.
0:13:59 Ah, que linda.
0:14:01 ¿Le olvidaste?
0:14:03 Que seguramente era Luis Quínes.
0:14:07 Y lo escucharemos en la versión de nuestra querida amiga,
0:14:10 ¡Sú Mapa!
0:14:16 El árbol.
0:14:18 Que tú olvidaste.
0:14:22 Siempre se acuerda de ti.
0:14:28 Y le pregunta la noche.
0:14:31 Si será o no.
0:14:34 Si se acuerda de ti.
0:14:37 Y le pregunta la noche.
0:14:40 Si será o no.
0:14:43 Si será o no.
0:14:49 El árbol.
0:14:51 No me acontaré.
0:14:54 Que el árbol suele decir.
0:15:00 Quien se aleja.
0:15:03 Junta queja.
0:15:06 En vez de quedarse aquí.
0:15:13 Quien se aleja.
0:15:17 Junta queja.
0:15:20 En vez de quedarse aquí.
0:15:25 Para que se va por el mundo.
0:15:31 Pues usted es de aquí.
0:15:37 Que el corazón va con uno.
0:15:41 Y uno tiene que sufrir.
0:15:48 Y el árbol.
0:15:51 Que tú olvidaste.
0:15:54 Siempre se acuerda de ti.
0:16:07 Y yo te quisiera decir.
0:16:12 Que lo que a muchos le pasaron.
0:16:16 También me ha pasado a mí.
0:16:38 Que me lo digas.
0:16:41 Pero lo tengo que oír.
0:16:45 Quien se aleja.
0:16:49 Junta queja.
0:16:52 En vez de quedarse aquí.
0:17:10 Para que se va por el mundo.
0:17:15 Pues usted es de aquí.
0:17:20 Que el corazón va con uno.
0:17:24 Que el corazón va con uno.
0:17:27 Y uno tiene que sufrir.
0:17:34 Y el árbol.
0:17:37 Que tú olvidaste.
0:17:41 Siempre se acuerda de ti.
0:17:55 Acantado sumapaz.
0:17:58 El árbol que tú olvidaste.
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