Un episodio de la corte francesa

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0:00:00 Bueno, aquí tenemos un beso episodio de la Corte Francesa, así que presentaremos a Mariana de la Turnel,
0:00:11 para lo cual ya nos ubicamos en Francia.
0:00:20 Era hija Mariana de la Turnel, del Marqués de Nezble.
0:00:26 Era una de cinco hijas.
0:00:30 Parece que a los pocos días de su nacimiento, fue confiada en los cuidados de una nodriza.
0:00:36 Por entonces se creía que las chicas, criadas en el campo y sujetas a la más larga latancia posible de nodrizas,
0:00:48 eran, al llegar a edades interesantes, muy bellas y muy sanas.
0:00:57 Mariana estuvo junto a su nodriza hasta los diez años y la superstición pareció cumplirse porque salió verdaderamente hermosa.
0:01:05 Ingresó sin embargo en un convento.
0:01:08 Y cuando llegó la edad de casarla, el viejo, el Marqués Melide Nezble,
0:01:15 le comunicó que le había encontrado un partido conveniente.
0:01:20 No les deseó ese padre a nadie, Pecule.
0:01:23 Primero tenceró un convento y después cuando te pudo buscar te dijo que era porque te había conseguido un tipo.
0:01:28 El tipo que le gustaba a él, no a vos.
0:01:33 El tipo, en cuestión, era el Marqués de la Turnel, que según se decía,
0:01:40 estaba siempre concentrado en sus reveres militares.
0:01:44 Y cuando se acasaron, no más la Melide.
0:01:47 Pasó a vivir naturalmente en el Palacio de la Turnel y se aburría.
0:01:52 Su mayor distracción era la correspondencia que sostener con algunos conocidos.
0:01:57 Entre ellos el Duque de Agenoa.
0:02:02 Parece que este Duque se había enamorado completamente de la Melide y le escribía Jogosas Cartas.
0:02:08 Y esas de esos amores epistolares que habrá se han puesto una vez más de moda
0:02:16 a partir de la posibilidad de la red y de los correos electrónicos.
0:02:25 Un día, a la vuelta de una de sus campañas militares, el marido, el Marqués de la Turnel,
0:02:31 fue atacado por una fiebre estiloliquia, a los semúdicos.
0:02:37 No le dejó mucha guita a la viura.
0:02:41 Y una de las hermanas de Mariana, hemos dicho que eran cinco, Ortencia,
0:02:46 le escribió, diciéndole que fuera a París para ponerse bajo la protección de una tía.
0:02:52 Era la Duquesa de Mazarino.
0:02:55 Y Mariana fue a París.
0:02:58 Como la tía vivía en una de las dependencias reversales, ahí empezó a vivir Mariana.
0:03:05 Y la tía de Mariana era muy estricta.
0:03:09 Mariana salía de la Sartén para caer en el cuello.
0:03:13 Así que la chica se sentía protegida, pero no muy cómoda.
0:03:18 En aquella casa no hacían más que hablar mal de las escandalosas relaciones
0:03:25 que mantenían las cortesanas con el rey.
0:03:28 Y si no le festejaban las melas, ¿aríes?
0:03:32 Es que Mariana, un poco sustada, se mantenía naturalmente lejos
0:03:41 de aquella milita de la corte.
0:03:44 Luis XV había preguntado varias veces al Duque de Rijeli,
0:03:48 los motivos que retenían a Mariana, tan alejadas de la corte de los bailongos.
0:03:54 Rijeli le contestó que no sabía, pero que en todo caso de todas las mujeres que conocía,
0:04:03 la más indicada para inspirar una pasión era Mariana.
0:04:07 Y agregó Rijeli que solo un héroe podía intentar su conquista,
0:04:12 ya que era una chica cuyas ideas la guardaban de ceder a la menor tentación.
0:04:20 Y Luis XV, que naturalmente se consideraba un héroe, intentó conquistarla.
0:04:26 Pero las cosas se le pusieron difíciles.
0:04:29 En verdad Luis era odiado por la familia de Melvide, Nessia.
0:04:35 Otra hermana de Mariana, Paulina, había dado a Luis un hijo ilegítimo,
0:04:40 que parece que era del rey, y había muerto envelenada dos días después del arrumbame alto.
0:04:48 Ese acontecimiento aterró a Mariana que más que nunca intentaba no encontrase con el rey en ningún lugar de versáil.
0:04:56 Una noche Mariana fue arrester por el alma de su hermana.
0:05:01 Al rato se dio cuenta de que tres hombres la miraban unos pasos por detrás.
0:05:09 Asustada salió corriendo.
0:05:12 En su raje escuchó lo siguiente.
0:05:16 No, Salernay, señora, no puede molestar si aquí en Salmera Mariana siguió rajando,
0:05:24 pero le pareció que aquella voz era la del rey.
0:05:28 Como estaba temerosa de correr la misma suerte que su hermana Paulina,
0:05:33 le escribió aquel enamorado de las cartas al llenoa.
0:05:37 Dice la crónica que se aferró aquella correspondencia simplemente como salvación para librarse del rey.
0:05:47 El duque de Asenuá estaba demasiado enamorado como para desconfiarle.
0:05:53 Ahora bien, risiobiesa en tiro de aquella correspondencia con el duque de Asenuá se enojo,
0:05:58 ya que como buen corteza lo quería conseguir a Mariana, Paul Rey.
0:06:03 Intercedió entre los 15 y los días después el duque de Asenuá
0:06:08 recibió la orden de incorporarse en un ejército lejano allá donde Judas perdió el poacho.
0:06:15 Mariana, sola nuevamente, quiso esconderse junto a la reina, le pareció que ahí iba a estar seguro.
0:06:24 Dibacó en las damas de compañía de Marialesín, canal de la reina, la mujer del rey.
0:06:30 Pero un día acaban todas en el salón, se abrieron las puertas bruscamente,
0:06:35 apareció el rey Naldo con todos los ojos, los sugiere,
0:06:40 y Mariana se hizo la autaria detrás de las compañeras, esperando a poder perderse ahí entre las muchachas,
0:06:46 pero pudo notar horrorizada que el rey la miraba solo a ella.
0:06:52 La saludó gente y se la tomó al rey.
0:06:56 Mariana entonces decidió no ir más a los salones de Mariana Eschinska.
0:07:00 Se fingió enferma, pero la excusa no le duró mucho porque demandaron al médico real para que la revisara.
0:07:07 El doctor Bernas, aliado del rey también, le indicó que saliera a pasear por los jardines.
0:07:14 Mientras daba vuelta por los jardines, Mariana pudo ver al rey Luis que la saludaba
0:07:19 desde una de las rentanas o periodos en Palacio.
0:07:22 Un día la princesa Ykuluz, que también laburaba a Palreay, le contó Mariana que le habían hablado
0:07:29 de un doctor alemán que podía definir el carácter de una persona desconocida
0:07:34 con sólo contestarles tres preguntas.
0:07:37 A Mariana le encantó el desafío.
0:07:40 Las preguntas eran, ¿cuál es la flor que usted prefiere?
0:07:44 ¿Qué libro se llevaría a una isla de Cialta?
0:07:48 ¿Cuál es el reinado en que le hubiese gustado vivir?
0:07:51 Mariana respondió que la flor que prefería era el yotropo, que el libro era la Biblia
0:07:57 y que el reinado que más le gustaba era ese, de este momento.
0:08:00 Tras esto, la princesa Ykuluz le dijo a cualquiera que hubiese.
0:08:06 Pero al domingo siguiente, cuando Mariana fue a la iglesia, encontró en su reclinatorio
0:08:11 un cuaderno con broches de rubies.
0:08:14 Era la Biblia y en sus primeras páginas podía leerse.
0:08:18 Pero sí, a la señora de la turnel, para que disfruten la soledad de su isla.
0:08:23 Firmado el reinado.
0:08:27 Pero además, cuando estaba mirando la Biblia,
0:08:34 vio que el rey estaba asomado ahí a la puerta
0:08:39 y lo codeaba al Cardenal de Richelieu, al contra de Richelieu,
0:08:44 que no hay que confundir con el Cardenal de Richelieu de Larga Fonda.
0:08:51 Días después de este episodio se celebró una fiesta en Palacio.
0:08:57 Mariana estaba preparando su vestido cuando encontró en el tocador un ramo enorme de diotropos.
0:09:05 Se adornó con el ramo y fue para la milagra.
0:09:08 Después de la reunión se celebró una función teatral en la que se representó Steyer a una hora de volver.
0:09:16 Allí estaba el rey.
0:09:18 Cuando Mariana lo vio, no supo qué hacer porque Luis estaba coronado de diotropos, la flor que había de la Biblia.
0:09:26 Al fin decidió retirarse al campo en el castillo de Plezance.
0:09:33 Allí se fue esperar aquel contra de Asenoa que había mandado al ejército,
0:09:41 que parece que volvía en una licencia.
0:09:45 Pero cuando estaba allí, recibió la siguiente carta.
0:09:48 Por favor, no casáis con el duque de Asenoa.
0:09:51 Este matrimonio no osaría dichosa y en mí causaría un mortal dolor, firmado Luis.
0:10:00 Poco después Mariana se enteró de que el rey visitaría a Plezance.
0:10:05 Llegó el rey, todas las mujeres se alborotaron.
0:10:08 Luis tenía que ofrecer su mano a una de ellas, a la que lo acompañara en un paseo,
0:10:13 y la encaró a Mariana si lo acompañó en su curción, pero no le dirigió la palabra.
0:10:19 Luis les instirió que volviera a Versaces, que nada malo les sucediera en el día.
0:10:24 Y Mariana regresó en el paseo.
0:10:30 Cuando entró a su habitación, escusió una voz extraña,
0:10:33 hemos contado este pequeño quiso, una voz extraña que decía,
0:10:36 Amar al rey.
0:10:38 La muchacha preguntó quién le hablaba y, nuevamente, yo, Amar al rey.
0:10:43 Orolizada, corrió un vión, y encontró un loro.
0:10:47 Un loro adornado con un colar de rubíes,
0:10:51 y se balanceaba en una ramita dorada dentro de una jaula de cristal,
0:10:56 y que gritaba, Amar al rey, Amar al rey, Amar al rey.
0:11:00 Por primera vez entró esta milonga, la mina se rió.
0:11:05 Al día siguiente, en una fiesta, Mariana se vistió de verde,
0:11:09 y Luis se emocionó al adivinar el significado de su atabillo.
0:11:14 Estaba flojado.
0:11:16 En la fiesta Luis le envió un mensaje que le invitaba a los jardines.
0:11:22 Ella le mandó a conceptar lo siguiente,
0:11:24 Me confío al honor de vuestra majestad.
0:11:27 Y ahí se gaste por seducida.
0:11:32 Al rato Mariana de la turnel se hizo amante y favorita del vequince,
0:11:37 que la elevó a Ducchez a Deschatores.
0:11:41 Ahí se detiene esta historia, pero no por capriso,
0:11:46 se detiene porque la mina diez meses más tarde se murió.
0:11:52 También quedó embarazada y por mala concepción,
0:11:55 así decir, el diagnóstico murió a los veintisiete años,
0:11:59 en mil setecientos años.
0:12:02 Sí, historia tiene sin eso gracia.
0:12:06 Era resistencia en Mariana,
0:12:09 y como finalmente un loro vino a Andalus.
0:12:19 Cada vez que oigo esta historia, me la gana de comprar un loro
0:12:23 y de enseñarle a varios loros,
0:12:28 que serán convenientemente distribuidos.
0:12:32 Y había estrados freguamente para que repisan,
0:12:35 y me daba el negro.
0:12:54 A María Andréa Cumel, Alejandro.
0:12:56 No tuvo suerte esa chica,
0:12:59 desde su reclusión un marido que no conmisiquiera conocía.
0:13:03 Y además todo este acoso, que es casi violatorio,
0:13:07 ha no sido por el final de la historia.
0:13:09 Y así no le hubiera dado molís al rey,
0:13:11 era realmente un acoso muy molesto.
0:13:13 La intunidad real que le permitía meter en su cuarto, dejarme el lino.
0:13:17 Era muy molesto.
0:13:19 Pero como al final la flofobia,
0:13:22 parece ser como que hubiera sido un alto de producción que funcionó.
0:13:26 Entonces no sé, a mí me parece de todo mal en una búsqueda.
0:13:29 Pero no sé, es alarmante.
0:13:31 Que la diferencia entre un abuso y un intento legítimo,
0:13:35 seducción, se unica de la aceptación,
0:13:37 me parece peligroso.
0:13:41 Lo es.
0:13:43 Me parece peligroso.
0:13:47 Hemos sido la discoteca,
0:13:49 y allí hemos conseguido el disco de Lolita Torres,
0:13:52 que se llama No Me Mires Más,
0:13:54 que es más o menos lo que quería Mariana,
0:13:57 que es un poco alta.
0:14:00 Y aquí la sé yo amoroso.
0:14:02 No Me Mires Más es una...
0:14:06 es una bella canción, pero está cantada maravillosamente por Lolita.
0:14:14 Bien, a mí me gusta mucho esta manera.
0:14:18 Esa manera de cantar.
0:14:25 La realidad, tiene que decir que la cosa mire,
0:14:29 me parece cuento, me parece una de las grandes gracias
0:14:32 de los porcibimos musicales,
0:14:34 que haya otras maneras de cantar.
0:14:38 Es decir, que la gente cante sin una rigurosa preparación musical,
0:14:47 y se limite a emocionarse entre las letras.
0:14:54 Las emisiones, lo único que registran,
0:14:57 es la emoción del cantante al descubrir lo que dice la letra.
0:15:01 El cantante que hubiera escuchado.
0:15:09 Canta Lolita Torres, No Me Mires Más.
0:15:23 Canta Lolita Torres, No Me Mires Más.
0:15:28 Canta Lolita Torres, No Me Mires Más.
0:16:53 No me mires, de cordos camino.
0:16:58 Va nuestros destinos.
0:17:03 No me mires.
0:17:08 No me mires.
0:17:13 No me mires.
0:17:18 Que te voy a seguir con el súper nuevo que te alnes,
0:17:23 que no yo te vivo en el que me ves,
0:17:27 y yo olvides que te ames.
0:17:32 Le conseguirán, entre mi edad y la sentía,
0:17:37 no ya la vi las mesas,
0:17:40 y ya con de que la sé.
0:18:02 Que me ves mirea.
0:18:22 No me olvides de todos los queridos,
0:18:29 para nuestros queridos.
0:18:34 No me olvides.
0:18:41 No me olvides.
0:18:49 No me olvides.
0:18:59 Ha cantado Lolita Torres, No Me Mires Mal.