Algunos mediums célebres... o no tanto

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0:00:00 Hablaremos entonces de algunos mediums célebres.
0:00:04 O no tanto.
0:00:05 Aquí ya hemos hablado, en este mismo foro,
0:00:08 o en otros parecidos,
0:00:10 o en otros lejanamente parecidos,
0:00:13 de los inicios del espiritismo, de la sermanista Fox,
0:00:18 de Alan Kardec,
0:00:20 o Alan Kardec, porque vivía en...
0:00:23 Francia.
0:00:24 Contamos lo que sucedió con el físico
0:00:27 William Crocks, que se enamoró de un fantasma,
0:00:31 después de todo como cualquiera, como es fatal que suceda.
0:00:35 ¿Qué otras cosas se enamora uno?
0:00:42 Mucha arquitectura,
0:00:43 donde se presentaban fantasmas de escritores ilustres
0:00:47 que, accediendo a pedidos de la concurrencia,
0:00:50 escribían alguna cosa.
0:00:53 Y a eso nos convocaba Víctor Hugo,
0:00:56 que desde luego tenía suficiente habilidad.
0:00:58 No sé si como medium, pero seguramente como escritor,
0:01:01 como para acercarse al estilo de cada uno de sus convocados.
0:01:09 Hoy hablaremos, primeramente, de Josep Weisenberg,
0:01:13 que nació en 1855 en Berlín.
0:01:16 A los 42 años,
0:01:19 dijo que se le había parecido Cristo, nadie menos,
0:01:24 y que le confirió dos dones,
0:01:27 el de curar y el de comunicarse con los muertos.
0:01:32 Weisenberg se encargó de que muchos se enteraran
0:01:35 de la suerte que había tenido,
0:01:37 y al poco tiempo la casa le se le llenó de gente,
0:01:40 imagínense.
0:01:41 Vecinos que ahora querían curarse de algún mal,
0:01:45 ahora querían comunicarse con los que no habían podido curarse
0:01:49 de un mal.
0:01:51 Los vecinos de la cuadra aseguraban que Weisenberg
0:01:55 hacía no menos de 4 o 5 milagros por día.
0:02:00 Es hacer, ¿eh?
0:02:02 Era muy milagrero, parece que no se iba a dormir tranquilo
0:02:06 cuando había hecho menos de 4 milagros.
0:02:08 Sentía que había perdido el día.
0:02:12 Pero como no daba abasto en esta tarea milagrera,
0:02:16 delegó en algunas personas el poder de hacer milagros.
0:02:21 Es decir, tenía unos asistentes que hacían milagros en su nombre.
0:02:27 Entre esos nuevos ordenados había muchas mujeres.
0:02:32 Entre ellas estaba Gretchen Müller,
0:02:35 conocida por sus predicciones.
0:02:38 Gretchen había anunciado, por ejemplo, que Weisenberg
0:02:42 la amaría, esa fue una predicción de Gretchen,
0:02:47 y él no tuvo inconvenientes en hacer que la predicción se cumpliera.
0:02:55 Como medium Weisenberg formó un grupo que se llamó
0:02:59 Asociación Cristiana de los Serios Buscadores del Más allá y de los verdaderos adeptos.
0:03:03 Así se llamaba.
0:03:05 Weisenberg condenaba el espiritismo instituido por Allan Kardec
0:03:10 y decretó que sólo él, Weisenberg,
0:03:14 y sus discípulos tenían poder lícito para comunicarse con los muertos.
0:03:20 Es decir, que el resto de los que tenían poder
0:03:25 lo tenían pero de carácter ilícito.
0:03:28 Se trataría de comunicaciones clandestinas con los muertos,
0:03:31 que no eran realizadas conforme a derecho, pienso yo.
0:03:35 Todos los miércoles Weisenberg se quedaba encerrado en una habitación
0:03:41 donde nadie más que él y algunos seguidores tenían autorización para entrar.
0:03:46 De esa habitación salía después de tener encuentros con personajes del más allá.
0:03:52 Su más frecuente visitante era Weismarck, el canciller de hierro.
0:03:59 Weisenberg aprovechaba esas visitas para transmitir
0:04:05 a la población discursos pan-hermanistas
0:04:12 que supuestamente le había comunicado el espíritu del canciller.
0:04:16 También decía conversar a veces con Lutero, con Martín Lutero.
0:04:21 Con mucho esfuerzo, tal vez porque cuanto más distante en el tiempo era un finado,
0:04:28 más difícil era hacer contacto,
0:04:31 parece que con mucho esfuerzo había conseguido la materialización silente,
0:04:37 eso sí, quiere decir que no hablaba, de la figura de Aristóteles.
0:04:42 Se había materializado pero en el más completo silencio.
0:04:47 Weisenberg y sus crecientes aseguraban que Aristóteles no era como lo habían descrito
0:04:54 o como lo habían figurado en mármol los artistas, o sea, marbudo y corpulento.
0:05:00 Los serios buscadores del masa ya dijeron que Aristóteles era pelado y gordo.
0:05:06 Esto provocó una polémica con espíritistas de otras cofradías,
0:05:13 como por ejemplo Harold Leib, que ya había convocado Aristóteles
0:05:18 y había visto que efectivamente era corpulento y barbudo,
0:05:22 tal como los mármoles griegos lo sugerían.
0:05:26 De modo tal que ambos grupos se acusaban mutuamente de haber recibido
0:05:30 no al espíritu de Aristóteles sino a algún otro espíritu usurpador.
0:05:36 Es curioso que ninguno decía que no había tales espíritus y que todos eran inventos.
0:05:42 No. Decían que había un espíritu colado que asumía, engañosamente, el papel de Aristóteles.
0:05:54 Pero no decían que aquel no convoca espíritu alguno.
0:05:57 No. Convoca un espíritu que no es el de Aristóteles sino el de cualquiera.
0:06:01 Convocar un espíritu si él de Aristóteles o de Juan Pérez es una cosa.
0:06:08 Es decir, si a mí alguien me dice que convoca el espíritu de Aristóteles,
0:06:14 lo primero que sospecho es que no convoca un espíritu alguno,
0:06:17 que convoca un espíritu pero que casualmente no es el de Aristóteles,
0:06:20 sino quizá el de tales de Mileto.
0:06:22 Qué me importa.
0:06:24 Bueno, pero así. Es mucha fea por ahí.
0:06:27 Ante la cantidad de evocaciones que le pedían,
0:06:30 Bisenberg, se hacía llamar maestro divino.
0:06:35 Modestamente.
0:06:37 Presénteme sencillo, por favor, señor Carrizzo.
0:06:41 Dígame maestro divino.
0:06:43 Como confianza.
0:06:45 Como he dicho, había transmitido una parte de sus poderes a sus discípulos,
0:06:50 pero estos le debían una completa obediencia.
0:06:54 Si les desode decían, los poderes les eran revocados por una especie excomunión.
0:07:00 A comienzo del siglo XX, el maestro divino, vamos a llamarlo así,
0:07:04 inauguró en Berlín un templo.
0:07:06 Pero un templo muy grande y muy bien puesto.
0:07:11 Entonces, así que podía albergar a unos 3.000 fieles.
0:07:14 Finalmente, Bisenberg se murió.
0:07:18 Se murió y los serios buscadores del mas allá siguieron,
0:07:22 incluso convocándolo al propio Bisenberg,
0:07:25 hasta que los nazis le prohibieron la reunión.
0:07:29 Otra media famosa fue Eusapia Paladino.
0:07:33 Es un lindo nombre.
0:07:35 ¿Cómo me gustaría llamarme Eusapia Paladino?
0:07:39 Nació en 1854 en Italia, en la región de los Abruzos.
0:07:45 Allá, a fines del siglo XIX, andaba por Francia
0:07:50 y allí se hicieron famosas sus sesiones musicales.
0:07:55 Eusapia era especialista en convocar músicos del pasado,
0:08:00 como sucede con algunas audiciones.
0:08:09 Tenía nada menos que a Camilo Flamarion,
0:08:14 el famoso astrónomo como cliente,
0:08:19 y también el señor Jove D'Afontenua,
0:08:22 que era músico aficionado.
0:08:26 Y estos dos clientes escribieron mucho acerca de las sesiones con Eusapia.
0:08:32 Desde luego, en esas sesiones,
0:08:36 o en esos escritos, uno se imagina que va a haber mesas voladoras,
0:08:41 luminosidad, golpes sorpresivos.
0:08:44 Había un poco de eso.
0:08:46 Pero lo más interesante eran los conciertos
0:08:49 que daban los espíritus oportunamente llamados.
0:08:53 Por ejemplo, en el salón de Messier y Madame de Blech,
0:08:59 se dispuso una serie de instrumentos
0:09:03 que, con vocados lofinados músicos,
0:09:06 empezaron a sonar solos, ir maravillosamente.
0:09:10 O sea, no es que se produjera la materialización del músico,
0:09:14 sino que la música era ejecutada por alguien o por algo.
0:09:17 Dicen que Beethoven toco para ellos, pero poco.
0:09:21 Lo convocaron y estaba ahí el de Fontenua,
0:09:25 que era un violinista pero malo,
0:09:28 y que al rato de empezar a tocar a fan de Beethoven,
0:09:34 tomó su violín y trató de acompañarlo.
0:09:38 Y lo único que consiguió es que todo volviera a silenciarse,
0:09:44 ya que el bueno de Beethoven se las tomó.
0:09:47 No le gustó que el otro se le pusiera también.
0:09:52 ¿Estás tocando yo qué es?
0:09:54 Sí, con Beethoven, así, haciéndole armonía de violín como Juan Darienzo.
0:10:02 El trogarre se fue.
0:10:07 Bueno, la última historia es síla de una materialización.
0:10:11 La médium fue la Condesa Fanmoldke,
0:10:14 y sucedió en Berlín en el año 1901.
0:10:17 ¿Cómo se ve?
0:10:19 El mejor lugar para la aparición de un fantasma era Berlín a comienzos del siglo.
0:10:25 Los asistentes eran la princesa Cadaya y George Larsen.
0:10:30 Se trataba de convocar a la esposa muerta de señor Larsen.
0:10:35 Muy bien, el propio Larsen escribió esto, el viudo Larsen.
0:10:40 En medio del frenesí de la Condesa, se desplegó ante nosotros un espectáculo maravilloso.
0:10:46 Vimos a una esvelta mujer vestida como una recién casada,
0:10:52 con un velo en su rostro.
0:10:55 Cuando la aparición corrió su velo, llegó un mediche y mi espanto.
0:11:00 Doce años antes, yo había llevado a esa mujer al altar.
0:11:05 Todo esto lo escribía Larsen.
0:11:07 Parece que el espíritu de la mujer de Larsen se acercó a él y lo abrazó.
0:11:15 Al requerimiento del propio Larsen, su esposa le entregó un trozo del velo.
0:11:22 Que Larsen debió conservar como un valioso tesoro mientras vivió.
0:11:27 Le hubiera pedido alguna otra cosa, digo yo, pero bueno.
0:11:30 Cuando el espíritu desapareció, el encuentro con la médium vino a complicarse
0:11:36 porque tan perturbado había quedado Larsen, imagínense,
0:11:40 que obligó a la Condesa Fondmoldt, que la médium,
0:11:44 a que volviera a convocar a su esposa como hubiera hecho cualquiera, imagínense.
0:11:49 A ver, convoque la de nuevo, dijo el tipo.
0:11:51 ¡Momento! Que todavía no termine.
0:11:57 Y ante la reticencia de la médium, Larsen extraje una pistola entre sus rombas.
0:12:04 ¡Shakun bufoso!
0:12:08 Así que no la querés convocar o convocar.
0:12:10 Sí, Shakun.
0:12:11 Si no te vamos a convocar a ver.
0:12:12 Claro. Naturalmente la médium intentó un nuevo acercamiento alafinada,
0:12:17 pero no hubo respuesta.
0:12:19 Larsen entonces, para aumentar la intimidación, disparó al aire, al techo en este caso,
0:12:26 para dar énfasis a la amenaza.
0:12:28 Es un énfasis muy apreciado en algunos círculos el disparar al techo.
0:12:33 Un disparo al techo enfatiza lo que uno dice.
0:12:38 Uno dice, y no estoy dispuesto a cumplir con lo que usted me pide.
0:12:43 ¡Fau!
0:12:44 Y le tiró a él.
0:12:46 En este caso dijo, convoque de nuevo al espíritu del mefinada esposa.
0:12:51 ¡Fau!
0:12:52 Nuevo intento de la Fondmoldt que, nueva ausencia de la mujer de Larsen,
0:12:57 entonces, George Larsen le encajó una patada a la condesa directamente
0:13:02 y abandonó aquella sala para siempre.
0:13:07 El carácter temible.
0:13:10 Pero empezó a concurrir a otras sesiones de espíritismo
0:13:16 y amenazar a otras médiums, sin que la esposa compareciese en lo más mínimo.
0:13:22 Finalmente terminó detenido y lo condenaron a un año de prisión
0:13:28 acusado de amenazar médiums con una pistola.
0:13:33 Ya se sabe que en Alemania la pena por amenazar médiums
0:13:37 con una pistola intentando que esta persona viniera a convocar a nuestra esposa fallecida
0:13:41 merece un año de prisión.
0:13:45 Y lamentablemente no sabemos qué fue de Larsen cuando salió de la cárcel.
0:13:50 Si no hubiéramos podido seguir contando aquí la historia de Larsen.
0:13:55 Y este es el fin de nuestro catálogo.
0:13:58 Un catálogo que me gustó mucho.
0:14:01 ¿A usted cuál le gustó más?
0:14:03 Me gustó la de la condesa, pobre, que se tuvo que bancar la prepotea de este tipo
0:14:08 porque el espíritu de la mujer no quiso volver.
0:14:10 ¿Qué culpa tenía?
0:14:11 ¿Qué sabe si no quiso volver o si era ella la que no estaba en condición
0:14:14 en repetir el fraude?
0:14:16 A mí me gustaba esta señora que convocaba a los músicos.
0:14:20 Eusapia Paladino.
0:14:23 Va muy bien.
0:14:26 Por lo menos habría buena música.
0:14:29 Sé cómo lo haría.
0:14:34 Bueno, a quién le gustaría dedicar esta charla sobre mediums?
0:14:39 Bueno, el amigo Beethoven ya que ha acudido a algunos de estos llamados
0:14:44 a hacer un milagro con su música.
0:14:47 Y ya que hemos hablado del mejor de todos los mediums, me parece a mí,
0:14:51 aunque sea por el espíritu y por la poesía,
0:14:53 que es Víctor Hugo, a Jean Valjean, que siempre acompañe este programa,
0:14:56 aunque sea en el Como Mú.
0:14:58 Es el personaje de los miserables.
0:15:01 Bueno, a ver.
0:15:02 Y al pobre de Fontenu, que se puso a tocar tan entusiasmable, lo link,
0:15:06 que Beethoven lo paró, es lo que hace.
0:15:10 Es macho, eso es un poco sordo.
0:15:12 Pobre, eso uno empieza a tocar y la gente se va haciendo,
0:15:15 yo conozco eso.
0:15:18 Pobre, ¿no?
0:15:19 Y estaba Camilla Flamarion, que era astrónomo.
0:15:24 Hubo en vida de Flamarion, ¿no?
0:15:26 ¿Dónde vamos a hablar de Flamarion?
0:15:29 Una lluvia de meteoritos.
0:15:36 Y él estaba durmiendo.
0:15:39 Un gran astrónomo.
0:15:41 Cuando se despertó le contaron que había...
0:15:43 Sí, ya te lo dió.
0:15:44 Una lluvia de meteoritos y se quería matar.
0:15:46 Sí, claro, aquí en el ser.
0:15:48 Y la lluvia de meteoritos.
0:15:51 ¡Ay, que tenemos la suerte!
0:15:54 Bueno, Flamarion, que miraba para arriba,
0:15:58 evidentemente también buscaba algo,
0:16:03 porque andaba por las sesiones de espíritus.
0:16:06 Esto es todo lo que tengo que decir respecto de los espíritus.
0:16:11 Pero, ¿qué tango podríamos escuchar?
0:16:16 Hay un pianista que usted conoce muy bien y que es amigo nuestro,
0:16:19 y también pollo, que es Sebastián Junta.
0:16:22 Y vamos a escuchar un tango en solo de piano por Sebastián Junta.
0:16:26 Y el cervello tango de Joaquín Mora, que se llama en las sombras.
0:16:30 Que es donde suelen estar los espíritus que convocan estos médiums, amigos nuestros.
0:16:39 También cierro esta charla con la promesa de traer aquí mismo,
0:16:43 bien pronto un médium, o de asumir nosotros mismos.
0:16:50 Algunos de los poderes que tenemos,
0:16:54 yo no estoy seguro de lo que les estoy prometiendo,
0:16:57 pero una vez lo hicimos,
0:17:00 esta gente se ríe, pero porque no se ha visto en acción.
0:17:04 Yo fui vehículo de...
0:17:06 Sí, señor, un día vamos a hacer una experiencia,
0:17:10 pero claro, tenemos que contar con la colaboración espiritual de todos ustedes,
0:17:16 que van a tener que ponerse en disposición.
0:17:21 ¿O que se convoca espíritus del más allá o del más acá?
0:17:25 No, no, no le podemos decir lo que hacemos.
0:17:28 No le podemos decir lo que hacemos.
0:17:30 No le vamos a adelantar nada.
0:17:32 Pero un día que estemos también, tenemos que estar en dedos.
0:17:35 Sí, tenemos que estar muy inspirados,
0:17:38 tenemos que sentir que hay una conexión,
0:17:42 los astros deben ser propicios, y ahí algo bueno.
0:17:46 Y si no, convocaremos a algunos médium profesionales que sabemos,
0:17:51 que atienden cualquier día, sí, sí.
0:17:53 El médium profesional no tiene que estar inspirado,
0:17:56 él se convoca a un espíritu porque para eso es profesional.
0:17:59 En cambio, el aficionado, el aficionado como yo o como usted,
0:18:03 por ahí tenemos que estar en vena.
0:18:05 Más bien tenemos que esperar a que los espíritus vengan.
0:18:09 No los podemos convocar nosotros.
0:18:10 A voluntad.
0:18:11 A voluntad, por ejemplo hay una fiesta en casa, a veces me dicen, a veces me dicen,
0:18:15 hay una asada, una choriciada, me dicen Alejandro.
0:18:19 Convoque Alejandro.
0:18:22 Gente incluso que me conoce poco me trata de usted.
0:18:24 Alejandro, ¿por qué no se convoca 4 o 5 espíritus?
0:18:28 Dicen que acá...
0:18:29 Pues se toquen algo.
0:18:30 Los chorizos ya están secos.
0:18:32 Sí, sobre un poco de estados.
0:18:33 Y también las anibolillas.
0:18:35 Las pecoreminas ya están ocupadas.
0:18:38 Y yo me estoy durmiendo.
0:18:40 ¿Por qué no se convoca alguno de los espíritus y nos matamos de resa?
0:18:44 Y yo digo, entonces yo contestó, no.
0:18:47 Si yo pudiera hacerlo a piachere, sería médium profesional.
0:18:51 Pero en este momento lamentablemente no puedo.
0:18:54 Digo yo y sigo comiendo el chorizo.
0:18:58 Chorizo reseco, ya.
0:19:00 Chorizo de madrugada.
0:19:02 Cansadito.
0:19:03 Chorizo que ha sobrado el asado.
0:19:05 Algunos con un mordiscón.
0:19:07 Sí, incluso.
0:19:08 Un mordiscón ajeno.
0:19:09 Me he durito de afuera, sí.
0:19:11 Oigamos, entonces, este bello solo de piano de Sebastián Junta,
0:19:15 con el tango en las sombras.
0:21:19 No, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no
0:21:49 no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no
0:22:19 no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no Profesoria Moon Jam
0:22:23 Chait Katz
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0:22:27 Hay un
0:22:28 Art Face
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