Resurrecciones en los mitos griegos

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0:00:00 Seguimos en la Vengaza Será Terrible, hoy desde el auditorio del Prata en Gorrite 5963,
0:00:07 donde estaremos también la semana próxima, los días martes, miércoles, anque, jueves.
0:00:12 Estamos aquí en este auditorio, quienes quieran pueden haber usufrupo a los beneficios de la hierba de Amanda
0:00:19 y también del agua que provee a alguien por aquí. Así que, para eso tienen que ponerla dentro del recipiente.
0:00:24 Señor, hay un amigo fiel, el Andésacar, que está tratando de soplar. No.
0:00:29 Bien. En caso de que el agua esté demasiado caliente, pueden dirigir una nota a la dirección de la raya.
0:00:36 Señor, el director de Raya del Plata, el agua está demasiado caliente.
0:00:42 Si estuviera fría, una nota, pero esta vez al director de programación.
0:00:49 Porque uno se encarga de enfriarla y el otro la encarga.
0:00:53 Y es exactamente la trascarta.
0:00:58 Hablaremos de resucitados en el bien, pero solo en los mitos griegos, miren.
0:01:04 Nada más que en los mitos griegos.
0:01:07 Habría mucho que preguntar acerca del protocolo de la resurrección.
0:01:12 Yo creo que hay un tiempo adecuado para resucitar.
0:01:17 ¿Qué quiero decir? Surgir una pregunta. ¿Cuál es el tiempo adecuado para resucitar?
0:01:24 ¿Cuánto tiempo después del fallecimiento uno resucita?
0:01:28 La respuesta es. Ni muy pronto ni muy tarde.
0:01:32 Si resucitás tarde ya se murieron todos.
0:01:35 Y nadie...
0:01:38 Ahí está para presencia de leche.
0:01:40 Ya se volvió el encargado de olas, ¿no?
0:01:43 A usted quién era, porque usted se volvió a onderar.
0:01:46 Y si resucitás enseguida, qué gracia tiene a los 20 segundos.
0:01:50 Y es igualito.
0:01:51 Para que no te moriste.
0:01:52 Ah, fue pata tu.
0:01:54 Fue pata tu.
0:01:55 Para que no te moriste, viste cómo son.
0:01:56 Sí, solo así.
0:01:57 Y no resucitar y te dice no, no resucitar.
0:02:00 O estaba dormido.
0:02:03 O sea, se arruina todo el efecto de la resurrección.
0:02:06 También hemos hablado aquí muchas veces de la parte jurídica de la erección.
0:02:13 Un resucitado generalmente produce numerosas...
0:02:19 Numerosas inconvenientes de orden jurídica.
0:02:22 Por ejemplo, un tipo se muere, los hijos heredan a casa, lo vienen, que es yo.
0:02:28 Al mes resucita...
0:02:30 Oí ya.
0:02:31 Un mes... es un momento...
0:02:33 Está para resucitar.
0:02:35 Al mes resucita un...
0:02:38 Un ligo.
0:02:40 ¡Eh! Ahora resucitás, que es yo.
0:02:42 Yo ya cambié el baño.
0:02:43 Ya la casa la vendí, ya me gasté la guita.
0:02:46 ¿Cómo vendiste la casa?
0:02:47 Unas casas hace 40 años y yo...
0:02:49 Bueno, ¿quién te manda morir?
0:02:51 No, ¿quién te manda resucitar?
0:02:53 O ¿quién te manda mejor?
0:02:54 Mejor que no.
0:02:55 Mejor que no.
0:02:56 Mejor que no resucitar.
0:02:57 Eso es el asunto.
0:02:58 Bueno, por eso no hay resurrección.
0:03:02 Porque el orden constituido más bien reciente la presencia de la resurrección.
0:03:10 La presencia más en lugar de trabajo que yo lo ocupaba, ya lo tiene otro, la novia tiene otro.
0:03:14 No, la viuda que se volvió a casar.
0:03:16 La viuda que se volvió a casar.
0:03:18 A lo mejor habría resurrecciones si no fuera tan problema.
0:03:23 Si no fuera tan problema.
0:03:25 Bueno, pero ahora vamos a contar algunas historias de resurrectos.
0:03:31 Hay en los mitos griegos más de un hombre llamado Esténeló, uno de ellos era hijo de Androgeo y compañero de Heracles.
0:03:41 Era amiguete de Heracles y lo siguió en una expedición que hizo Heracles contra las amazotas.
0:03:48 Esténeló fue herido en una lucha contra aquellas mujeres y murió al regreso de la expedición en Plafagonia.
0:03:56 Fue enterrado cerca de la costa, lo cual en Grecia es inevitable.
0:04:02 Tiempo más tarde, cuando los argonautas pasaron por la región, Pereséfone, la reina del infierno,
0:04:13 que en esos tiempos permanecía junto a Aves, el rey del Ujerno, allí en el Orco.
0:04:20 Y digo que en ese tiempo estaba porque Pereséfone estaba seis meses y seis meses.
0:04:27 Por culpa de la Isa, 9 y 6.
0:04:29 Por culpa de la Pibas, sí.
0:04:30 Bueno, todas unas cosas. El caso que Pereséfone le permitió a Esténeló,
0:04:36 pasaban los argonautas por ahí, ese ché esténeló, porque no volviese a la tierra durante unos días,
0:04:43 para saludar a los expedicionarios.
0:04:46 Y Esténeló resucitó.
0:04:48 Los argonautas, los aglomíades, que no están con Esténeló, que está, que hace,
0:04:52 le ofrecieron sacrificios como si fuera un héroe y después continuaron su viaje.
0:04:58 Y Esténeló, después del alago, regresó tranquilamente a las profundidades del infierno.
0:05:05 A mí me parece de una sencilleza extraordinaria.
0:05:08 Una cortecía también.
0:05:09 Una cortecía.
0:05:10 El tipo resucité nada más que para saludar.
0:05:15 ¡Ah bueno, vamos! Hacemos una cena y bueno, nos vamos.
0:05:19 Seguimos con el otro, hubiera quedado colarto.
0:05:23 Me voy con ustedes y lo vuelvo a que se oye.
0:05:25 Ahora quizás resucité, me quedo tres meses.
0:05:29 Chao, hasta luego, chao.
0:05:31 ¿Y cómo te puede?
0:05:33 Esta, esta, esta.
0:05:36 Una chica, otra, otra resurrección.
0:05:40 La Odamía era hija de Acasto y esposa de Protesilao,
0:05:46 el primer héroe griego que murió en la guerra de Trosa, el primero que hicieron su...
0:05:51 La Odamía terminaba también de casarse cuando partió el marido.
0:06:00 Estaba muy enamorada esa.
0:06:03 Cuando supo la noticia de la muerte, se cosernó muchísimo.
0:06:08 Y luego pidió a los dioses que le devolvieran al marido al menos por tres horas.
0:06:13 Ya que pedía...
0:06:15 ¿Para qué casaba?
0:06:16 Era bueno.
0:06:17 Y Protesilao, por su parte, en el infierno, había formulado la misma súplica.
0:06:23 Los dioses se enternecieron ante la súplica.
0:06:26 Eran épocas.
0:06:27 Los dioses pagaron alguna vez cumplían con lo que uno le dice.
0:06:34 Y otorgaron a Protesilao ese regreso efímero.
0:06:39 Entonces los amantes se reunieron, fue bien.
0:06:42 Y cuando Protesilao tuvo que regresar, La Odamía se suicidó en sus brazos y lo acompañó.
0:06:53 Ahora, esto nos hace meditar la siguiente actitud.
0:06:57 Si en verdad hay vida después de la muerte, entonces la resurrección no es tan importante.
0:07:05 Es como una mudanza.
0:07:06 Madre mía.
0:07:07 La verdadera resurrección es cuando no hay vida después de la muerte.
0:07:12 Ah, qué piola.
0:07:14 Si hay vida si estamos en el infierno mirando para arriba, y le dan...
0:07:19 Eso es un chiste, no es un rechón.
0:07:21 Ahora si no hay nada.
0:07:24 A ese quiero que menos resuciste.
0:07:32 Sabes que son los dos.
0:07:34 Sí, una cosa muy significativa.
0:07:39 Otro mito.
0:07:44 Una mujer de Libia llamada Moria, tenía un hermano llamado Tilo, qué tal Tilo.
0:07:52 Un día estaba Tilo, paseándose por la orilla de Adrió Hermo, y tocó sin querer una serpiente.
0:07:58 La serpiente no murió y el tipo murió en el acto.
0:08:02 Moria, que había visto desde lejos las desgracias, llamó a un gigante amigo que tenía, se llamaba Damacén.
0:08:09 Damacén agarró un árbol que había ahí, lo arrancó de cuajo, y con el árbol aplastó a la serpiente.
0:08:16 No ganamos mucho.
0:08:18 Pero, vieron entonces como otra serpiente, dice que la hembra,
0:08:24 otra serpiente se metió en un bosque vecino y volvió al rato trayendo en la boca hierba balis,
0:08:31 una hierba de poderes milagrosos.
0:08:34 Entonces, aplicó la serpiente esa hierba a la nariz de la serpiente muerta y la serpiente muerta resucitó.
0:08:42 Se animó instantáneamente y escaparon las rosas al bosque.
0:08:47 Entonces Moria, eleccionada, tomó un poco de hierba que la serpiente había dejado olvidada,
0:08:54 la aplicó a la nariz de su hermano muerto, Tilo, y inmediatamente el hermano volvió a la vida.
0:09:01 Y también usó, ya no se lo sé, pero hay un muerto más público de esta misma especie.
0:09:10 Glauco era hijo de Minos y Pasifá, aquella que fue novia de un toro y madre del Minotauro.
0:09:18 Un día en que Glauco era un niño aún, persiguió a un ratón, tropezó y se cayó en una tinaja de miel y se ahogó.
0:09:28 Y ya, chau.
0:09:30 Estoy llorando a un amigo que pasa.
0:09:36 Minos lo buscó durante mucho tiempo y un día, gracias a la ayuda de Apolo, le habrá dicho,
0:09:42 ¡Oh Apolo, ayúdame a encontrarlo!
0:09:44 Y los dioses eran muy activos.
0:09:47 Encontró el cadáver de su hijo a la tinaja.
0:09:52 Los curetes eran unos genios que poseían el dom profético.
0:09:57 Cuando vieron que Minos estaba desesperado, le informaron que un hombre podría devolverle la vida a su hijo.
0:10:05 Ese hombre debía ser el que mejor supiese de escribir el color de una determinada vaca de sus rebaños,
0:10:14 cuya tonalidad cambiaba tres veces al día.
0:10:17 De blanca pasaba roja y luego a negra.
0:10:20 Minos convocó a los hombres más hábiles de Creta y les pidió que describieran el color de la vaca maravillosa.
0:10:29 A ver, soldado, descríbame esa vaca.
0:10:34 Composición, tema.
0:10:36 La vaca.
0:10:37 Uno solo lo consiguió. Se llamaba poliguino al tiempo y tenía el don de la profecilla.
0:10:44 Poliguino describió que la vaca tenía el color de la mora, un fruto que empieza siendo blanco, luego enrojece y terminando.
0:10:53 Minos, juzgando que poliguino había resuelto el enigma, le ordenó que devolviese la vida a Glauco.
0:11:01 Y lo encerró junto al carábar.
0:11:04 Poliguino, perprejo e inoperante, te quedó ahí.
0:11:08 Qué tardecita dijo ese por no morirse.
0:11:12 Primero la vaca.
0:11:13 Eso se pasa.
0:11:14 Te lo haces el mismo.
0:11:15 No ha dicho cualquier cosa.
0:11:16 No ha dicho verde, claro.
0:11:18 Verde esperanza.
0:11:20 Olando al que me gira ya algo.
0:11:23 Dio entonces entrar una serpiente.
0:11:25 Jonto.
0:11:26 No estaba ahí.
0:11:27 Una serpiente se dirigió hacia el cuerpo del muerto, temiendo que la serpiente fuera de deteriorar el cuerpo.
0:11:33 Poliguino la mató.
0:11:35 Jau.
0:11:36 Al poco tiempo entró una segunda serpiente, que al ver a la otra sin vida se retiró.
0:11:42 Pero no tardó mucho en volver.
0:11:44 Al volver llevaba en la boca una hierba con la que tocó a su compañera que resucitó en el acto.
0:11:52 Poliguino se apoderó de la hierba, que no era otra que la hierba valdó,
0:11:56 como los más astutos de nuestros oyentes ya estarán sospechados.
0:12:00 Proto con ella a Glauco.
0:12:03 Y Glauco volvió inmediatamente a la vida y continuó viviendo lo más cafésio.
0:12:12 Sirse y Medea, que eran magas, usaban también la hierba valis para resucitar personas.
0:12:21 Sin embargo, Medea le informó a las hijas de pelias.
0:12:27 Me encanta contar este episodio.
0:12:29 Que había otro modo de resucitar personas, pero eso lo hizo para jorbarla.
0:12:33 Pelias vivía, pero Medea le dijo que se estaba poniendo viejo.
0:12:38 Medea odiaba pelias, les dijo a las hijas, que conocía una forma de hacer rejuvenecer cualquier ser viviente.
0:12:45 Entonces le mostró una caldera que tenía, con unas hierbas ahí,
0:12:49 despedazó un carnero viejo, lo tiró al caldo, y al ratito el carnero saltó de la fuente y echó un cordelito.
0:12:57 Me...
0:12:58 Las hijas creyeron que era una buena ocasión para rejuvenecer al padre.
0:13:02 Lo despedazaron, lo metieron en el guiso y se pusieron a esperar que su padre volviera joven y chúcano.
0:13:10 Pero pasaba el tiempo, el guiso se iba pasando poco, y pelias no resucitaba.
0:13:18 Está rico, pero no está tierdo.
0:13:20 Una de ellas, que ya yo no he dicho, será cierto, nunca resucitó pelias, ni salió de la bolsa.
0:13:28 Minos, el papá de Glauco, era ambicioso, en red decreta, ¿no?
0:13:34 Y aunque tenía su hijo con vida, no quedó satisfecho.
0:13:37 Antes de permitir a Poliguido que regresara a su tierra, hizo que le enseñara su arte profético a Glauco.
0:13:45 Y así lo hizo, Poliguido, enseñarle a la nene a que profetice.
0:13:49 Pero al ser puesto en libertad, en el momento mismo de partir,
0:13:53 Poliguido escupió en la boca a su biciclo, con lo cual Glauco perdió toda la ciencia que acababa de atirir y que no pudo nunca usar fruspar.
0:14:03 No tiene que ver con resucitados, pero sí tiene que ver con Glauco.
0:14:09 Y tiene que ver con muchos que fueron dotados del don de la profecía, pero después se lo revocaron por algunas cosas como a Cazandra.
0:14:19 Cazandra, la hija de Rey de Troya.
0:14:22 ¿Y a Prigamo?
0:14:24 Tuvo un episodio con Apolo.
0:14:28 Y Apolo le dijo, bueno, ¿creo que te enseña a adivinar?
0:14:34 Escusa.
0:14:35 Hay bien una serpiente.
0:14:40 Bueno, total que arregló enseñarle el don profético si ella le daba su favor.
0:14:46 Pero Apolo le enseñó a adivinar y ella después empezó a hacer la que, ¡ay, que no!
0:14:50 Entonces Apolo le escupió en la boca y lo que le pasó a Cazandra fue casi peor que perder el don.
0:15:00 No perdió el don, pero nadie le creía.
0:15:03 Ella profetizaba y le decía, ¡andá!
0:15:05 De hecho justamente esos episodios trágicos de la guerra cuando entra el caballo dentro de allí se dice, ¡está lleno de griegos!
0:15:11 ¡Vandita, se nos van a masaclar!
0:15:13 Si el caballo será nuestra supervisión.
0:15:16 ¡Ah, eh!
0:15:20 A ti podemos dedicar este pequeño catálogo de resucitados.
0:15:25 ¿Van lindo son los resultados chinos?
0:15:29 En la China había una... en el infierno, ¿no?
0:15:33 Había una burocracia que era una duplicación de la burocracia de la tierra.
0:15:39 Entonces estaba lleno de funcionarios en el infierno.
0:15:41 Y algunos se fijaban las listas.
0:15:46 Algunos iban, se fijaban en las listas o por casualidad se fijaban en las listas, por resucitaban.
0:15:53 Y lo primero que hacían cuando resucitaban era venir a contar cómo era la lista de Frenado.
0:16:00 A debir a quien se va a morir pronto.
0:16:02 Culano, me engano, se usaban.
0:16:03 Y uno ya sabía.
0:16:06 Y tiene un resucitado mucho más creíble.
0:16:09 Y para ti.
0:16:10 Imagínate, viene un tipo resucitado, culano.
0:16:13 Ya sé, como te voy a seguir, se acaba la conversación.
0:16:16 Pásame.
0:16:17 Me dice, sabes, unas cosas, dice.
0:16:20 Yo trabajaba ahí en el infierno.
0:16:23 Era ayudante en oficina.
0:16:25 Y me traje unas copias.
0:16:28 Me lo ponía unas copias de lo que son.
0:16:31 ¿Sabes quién se va a la semana que viene?
0:16:34 A vos, dice.
0:16:35 A vos, te borré.
0:16:36 Me guiñe el ojo, ¿no?
0:16:38 Te borré.
0:16:39 ¿A quién quiere dedicarle?
0:16:41 Estaba pensando, Alejandro.
0:16:42 Una cosa que me da muertes en estas conversaciones es
0:16:44 de dónde yo entré esa expresión que le da la capacidad de subversión
0:16:47 a un bisecto como un piojo.
0:16:49 No es una figura brillante.
0:16:51 Y sin embargo, se habla mucho del piojo resucitado como...
0:16:54 Pero bueno, esa es la arena de otro costal.
0:16:56 Estaba pensando en gente como...
0:16:58 Bueno, la misma Uri dice que bajó, anduvo por ahí,
0:17:01 orfeo que la va a buscar.
0:17:02 Es general, son las mujeres.
0:17:04 Y son los hombres que van a buscarlas al infierno.
0:17:06 Lo cual es una cosa bastante extraña.
0:17:08 No aparece una mujer que tenga la capacidad de ir al infierno y volver.
0:17:11 Incluso el mismísimo Dante, nuestro amigo que...
0:17:14 realmente bajó ese infierno y está, vuelvo a reparar y a resaltar
0:17:17 lo que usted dijo como un verdadero hallazgo.
0:17:19 Es interesante la resurrección, solo y solo sí, de la muerte.
0:17:23 En la muerte no hay nada.
0:17:25 Porque si no, realmente es como le pasa a Pablo Francesca en la comedia.
0:17:29 Qué infierno es ese donde estamos juntos.
0:17:31 No estamos juntos, díselos enamorados, no es un infierno,
0:17:33 porque, etcétera, la vida sigue.
0:17:35 Estaba pensando también que en ese tipo de historias,
0:17:38 lo que hay es una especie de insistencia en la vida.
0:17:41 Estaba recordando un párrafo, mi amigo Rodrigo Fernández,
0:17:44 Miral Namé, me hacía recordar un párrafo de Andrés Rivera,
0:17:47 donde habla Castelli, y dice que esta relación,
0:17:50 cual la vices como la revolución,
0:17:52 porque hay que perder, resistir e insistir.
0:17:54 Perder, resistir e insistir.
0:17:56 Y al final, cuando hablé de esa venudía,
0:17:58 dice que nunca confundir lo real con la verdad.
0:18:01 Y algo de eso hay en esta historia de la vida y de la muerte.
0:18:04 Se parece esos juegos de niños,
0:18:06 donde lo real es una cosa que estamos reproduciendo,
0:18:09 que los niños reproducen.
0:18:11 Y la verdad, es justamente eso que están reproduciendo.
0:18:14 Es como un juego en el cual hay un premio,
0:18:16 pero el premio no importa.
0:18:17 Quizás es como un juego en el cual estamos tratando
0:18:20 de sacar la sortija, dando vueltas en la paredcita permanente de la vida.
0:18:23 Y la sortija es un asalte que quiere hacer,
0:18:26 dar otra vuelta nada más.
0:18:28 Como si en realidad la única gracia fuera de estar girando todo el tiempo
0:18:31 era un bello y bario pinto carrusel.
0:18:34 Y carrusel es la canción que vamos a escuchar ahora,
0:18:37 que será cantada por mí a falta de mejor intro.
0:18:41 Y que sea cantada por mí a falta de mejor intro.
0:19:11 Y que sea cantada por mí a falta de mejor intro.
0:19:41 Y que sea cantada por mí a falta de mejor intro.
0:20:41 Nada más, nada más, nada más.
0:20:48 Carrusel van rodando cansados, tus colores pintados a mano.
0:20:57 Hoy su tibia ilusión de grano y su barro recuerdo de hacer.
0:21:07 Carrusel organito gastado, musique gando todos los días.
0:21:15 Porque quiere volverme al pasado, si el pasado lo quiere volver.
0:21:36 ¡Hagamos de escuchar el tema carrusel, interpretado por Alexandre O'dolina!