Transcripción automática
0:00:00 Muy bien, continuamos en la venganza, será terrible, estamos en nuestro galponcito hoy
0:00:08 en este horario particular de la matine, ustedes estarán escuchando sus casas a la media noche,
0:00:14 pero estamos hoy inaugurando una matine extraordinaria en el 2016.
0:00:20 Hablaremos esta noche del rey de la elegancia, de Joel Brommel, de Bob Brommel, el hermoso Brommel.
0:00:31 En cualquier ciudad de la llamada civilización occidental, siempre hay el nombre de Brommel,
0:00:41 está asociado a artículos para hombres, medias, perfumes, corbatas, todas esas cosas,
0:00:52 o sea con la moda masculina.
0:00:55 El nombre deriva de este rey de la elegancia del siglo XIX llamado Joel Brommel.
0:01:04 Era un señor de origen más bien humilde, su padre había sido secretario del Lord North,
0:01:12 y eso le había permitido reunir una pequeña fortuna.
0:01:18 Pero su abuelo era confitero en Boris Street.
0:01:22 A la muerte del papá, el joven George, empezó a gastar la fortuna heredada,
0:01:28 comprando vestidos, finas camisas, corbatas, sombreros, guantes, bastones,
0:01:35 todo, traer a guita se la gastaba en vestimenta.
0:01:38 Un día, en una lechería de moda, como una lechería puede estar de moda, es algo bastante curioso,
0:01:46 pero era el Londres del siglo XIX, principio del siglo XIX.
0:01:53 En una lechería de moda en Green Park, mientras estaba hablando con la propietaria,
0:02:00 entró quien a la lechería?
0:02:02 El príncipe de Gales.
0:02:04 El príncipe de Gales, en compañía de la Marquesa de Salisbury.
0:02:09 El príncipe, que en realidad quería ser conocido como el primer caballero de Europa,
0:02:16 miró con admiración, y no sin cierta envidia a Brommel, pues vio en él un impecable corbata,
0:02:27 un conjunto estupendo de casaca, chaleco y pantalón,
0:02:32 y unos brillantes zapatos de punta filada que se habían puesto entonces de moda.
0:02:38 Ahora bien, el príncipe de Gales era gordo y gastaba miles de libras en su vestimenta y los accesorios correspondientes.
0:02:49 Vamos, Brommel era bien distinto porque era alto, bien plantado,
0:02:58 hizo tan buena impresión en el príncipe de Gales que se convirtieron en amigos.
0:03:06 El príncipe de Gales también gastaba mucha guita en pichas, pero no le quedaban tan bien.
0:03:14 Se dice que se le iban 100 mil libras al año en cosas de vestir.
0:03:19 Es mucho 100 mil libras.
0:03:21 Era mucho entonces.
0:03:23 Ahora es mucho.
0:03:24 Ahora es mucho, pero entonces era mucho, mucho, mucho, muchísimo.
0:03:28 Como dato curioso poseía 500 portamonedas en el príncipe de Gales.
0:03:34 Yo como se ha dicho, se parecía más bien a Peter Justinoff,
0:03:39 mientras que Brommel se parecía a Stewart Granger.
0:03:46 Nombró a que los que creo fueron los dos actores que hicieron la película.
0:03:53 Sí, sí, era un amigo, empezaron a ir a todas partes,
0:03:57 asistía a Brommel a íntimas reuniones principiecas,
0:04:04 y su heredancia se llamaba la atención,
0:04:07 y enseguida era copiada, copiada.
0:04:14 Un día, uno de sus imitadores le dijo,
0:04:18 ayer en la casa de la duquesa de X me hice notar por mi elegancia,
0:04:23 todo el mundo lo comentó, lo comentó,
0:04:26 y Brommel le dijo, en realidad la verdadera elegancia consiste en pasar inadvertida.
0:04:33 Pero Brommel, como se ha visto acá, no era muy ingenioso.
0:04:39 Era una especie de Oscar Wilde después de la gripe.
0:04:45 Los anécdotas son así, como ésta que acabo de contar.
0:04:49 Imagínense una cosa de decir,
0:04:55 este aforismo sencillo de Wilde es una muestra de sabiduría.
0:05:03 La naturaleza admita al arte,
0:05:06 esta contradicción entre el arte que supuestamente imitativo con la naturaleza,
0:05:12 y viendo que a veces la naturaleza parece remedar los patrones y los modelos artísticos.
0:05:21 Es una observación muy profunda.
0:05:23 En cambio, decir que la verdadera elegancia consiste en pasar inadvertido,
0:05:30 es decir, cualquier cosa porque venías con gás.
0:05:35 Para Facebook.
0:05:36 Es claro.
0:05:43 Bueno, se puso de moda todo lo que hacía este muchacho.
0:05:46 Por ejemplo, su forma de ponerse la corbata.
0:05:49 Las corbatas de entonces consistían en unas largas tiras de tila
0:05:55 que daban varias vueltas alrededor del cuello
0:05:58 y se dejaban caer sobre el pecho en forma negligente.
0:06:02 El probable se levantaba el cuello de la camisa,
0:06:06 que entonces era de proporciones considerable,
0:06:09 hasta que casi le tapaba la cara.
0:06:12 Y a continuación se anudaba la corbata.
0:06:15 Cosa que no era muy sencilla,
0:06:18 porque a veces ensayaba diez, quince y hasta veinte veces hasta acertar con el nudo.
0:06:24 Cada vez que fallaba, tiraba la corbata al suelo y la reemplazaba por otra.
0:06:32 Cuando por fin quedaba satisfecho,
0:06:34 miraba las corbatas desechadas y decía,
0:06:37 hay que ver cuántos errores que se cometen.
0:06:40 Y ahí otra supuesta muestra de ingenio.
0:06:45 Su vanidad, sin embargo, o su vanidad,
0:06:50 lo inducía a decir y cometer impertinencia.
0:06:55 Pero como hemos dicho, carecía de ingenio y de tacto.
0:06:59 Y eso fue su perdición.
0:07:03 Un día, estaba a Rommel, el príncipe de Gales y unos amigos,
0:07:12 tomando café tras la cena.
0:07:15 Y en un momento dado,
0:07:17 Rommel le dice al príncipe de Gales,
0:07:21 dice, ¡chegales!
0:07:25 Llamaba un criado.
0:07:27 ¿Se lo puse?
0:07:29 Sí, me pareció.
0:07:31 Llegó a él y dice, ¡llamaba un criado!
0:07:34 Y aquel día el príncipe le había estado un poco de mal humor,
0:07:38 porque sí llamó al criado, pero cuando lo tuvo delante, le dijo,
0:07:42 el señor Rommel se va, acompáñale hasta la puerta.
0:07:47 Y este fue el principio del film de este muchacho.
0:07:54 Desprovisto del favor del príncipe,
0:07:58 tuvo que afrontar, por ejemplo, a sus acreedores,
0:08:02 que se lanzaron como fieras sobre él.
0:08:04 Se dice que en 10 años había gastado más de un millón de libras,
0:08:10 en corbatas, pantalones y casacas.
0:08:13 Yo no creo esto en absoluto.
0:08:17 Una comparación.
0:08:20 Justo en aquellos mismos años,
0:08:23 en aquellos mismos años,
0:08:25 Don Bernardino Rivadavia nos dejó el famoso enpréstito de la barring.
0:08:33 El enpréstito de la barring que se terminó de pagar más de 100 años.
0:08:38 Sí, la semana pasada.
0:08:40 La semana pasada.
0:08:43 ¿Saben a cuánto ascendía ese préstamo?
0:08:47 ¿A cuánto? No me va a decir que usted no lo sabe y yo...
0:08:51 Un millón de libras.
0:08:53 Justo lo mismo.
0:08:55 Justo lo que se había gastado en 10 años, este muchacho.
0:09:00 Hay que ser gastador, eh.
0:09:02 No, es que no, es una guita que...
0:09:04 Ahora un millón de libras no hay nada,
0:09:06 porque compras una casa,
0:09:08 que vale un millón de libras.
0:09:11 Pero en ese entonces era el monto de un enpréstito.
0:09:17 Yo puedo gastarte...
0:09:19 La deuda externa toda entera, la de ahora.
0:09:21 No, sí, sí, la de ahora.
0:09:23 Sí, no, no puedo gastarte.
0:09:26 200 millones de dólares en pincha.
0:09:32 Deme tiempo, no, no, no.
0:09:34 No, no, no, porque no.
0:09:36 Podría gastarlo si fueran cantidades industriales,
0:09:39 pero no de uso personal.
0:09:41 Así que solamente ir a la...
0:09:43 Bueno, gastó mucha plata y listo ya está.
0:09:47 Y finalmente sus muebles fueron subastados.
0:09:51 Tuvo que rajar de Inglaterra, se refugió en Francia.
0:09:55 Allí vivió un tiempo gracias a préstamos,
0:09:58 que sonzacaba de algunos ingleses que visitaban Francia.
0:10:02 Parece que se levantaba a las 9.
0:10:05 Según su costumbre, tardaba dos horas en vestirse.
0:10:09 Salía a pasear, como si estuviesen Londres.
0:10:14 Bueno, acostumbrado a la buena comida,
0:10:18 se hacía servir, cenas,
0:10:21 pero se iba hundiendo cada vez más en deudas.
0:10:27 Y uno de sus antiguos amigos
0:10:30 consiguió que se lo nombrara Consul de Inglaterra en Cayenne,
0:10:34 pero los acreedores volvieron a surgir
0:10:40 y se lanzaron sobre él.
0:10:43 No pudo comprarse más ropa,
0:10:46 un sastre de caán movido por la compasión,
0:10:51 y de respeto por quien había sido el rey de la elegancia,
0:10:54 le arreglaba algunos pantalones más o menos.
0:10:59 Le arreglaba a Caratarola lo lienzó que le quedaba.
0:11:04 Parecía que no podía caer más bajo, pero sí.
0:11:07 En mayo de 1835 lo metieron en cana por deudas.
0:11:12 Aquella prisión por deudas,
0:11:14 que era clásica en Inglaterra de aquellos años,
0:11:17 y que también cuenta una de sus víctimas,
0:11:19 que fue Sardikens.
0:11:21 Cuando salió de la cárcel Bromel
0:11:23 ya no era ni una sombra de lo que había sido.
0:11:26 Perdía la memoria.
0:11:28 Estaba en un hotel de mala muerte.
0:11:32 Pasaba horas enteras sin moverse.
0:11:35 Bueno, ¿qué hay?
0:11:37 Un día una inglesa de la que no se conoce el nombre
0:11:40 se presentó en el hotel preguntando por Bromel
0:11:43 y adquirió una habitación
0:11:47 solo para ver lo pasar.
0:11:52 Y lo que vio en realidad fue un hombre
0:11:54 de cara idiotizada,
0:11:56 hablando consigo mismo y vestido pobremente.
0:12:00 Cuando el dueño del hotel subió a ver
0:12:02 qué quería la señora en cuestión,
0:12:04 se la encontró llorando, sentada en un sillón.
0:12:07 Era una de las tantas admiradoras
0:12:09 que Bromel había tenido en Londres.
0:12:13 Su razón fue declinando...
0:12:23 Jugaba esto, me voy a contar.
0:12:27 Llevaba a su habitación unas sillas
0:12:30 que juntaba de todo el hotel.
0:12:32 Las ponía vacías, se dían montonadas,
0:12:35 no montonadas alineadas.
0:12:37 Y jugaba, decía, su alteza real,
0:12:40 el Príncipe de Gales,
0:12:42 Lord Furano,
0:12:44 el Con de...
0:12:47 de tal, el Marquede,
0:12:49 jugaba a las viejas reuniones
0:12:52 de la realeza, ¿no?
0:12:54 Y iba abriendo la puerta y así entrar
0:12:57 a fantasmas.
0:13:00 Qué cosa.
0:13:04 Murió en un manicomio
0:13:06 el 24 de marzo de 1840.
0:13:11 Todo esto nos deja una enseñanza,
0:13:14 aunque yo no sabría decir cuáles.
0:13:17 Pero si uno es amigo
0:13:22 del Príncipe de Gales,
0:13:24 no cabe decirle,
0:13:26 Che Gales.
0:13:28 Che Gales, ya más...
0:13:30 Porque el Príncipe de Gales
0:13:32 por naturaleza ha creído.
0:13:34 Y si...
0:13:36 Ustedes, si fuera Príncipe de Gales,
0:13:38 no sería creído.
0:13:40 A mí me aguantaba nada.
0:13:42 No me iba a tratar de che así nomás.
0:13:44 Señor,
0:13:47 el hermoso, grame,
0:13:49 así se llama, creo,
0:13:51 la película y las novelas que se han escrito.
0:13:56 A mí me cae mal el tipo.
0:13:59 Pero me parece que porque el que me cae mal
0:14:02 es Stuart Granger,
0:14:05 que era un actor bastante antipático,
0:14:08 que hizo la película.
0:14:10 Bueno, pero el actor que tiene que ver...
0:14:12 Si fuera ahora a ponerle Brad Pitt,
0:14:15 ahora a mí me caería mejor.
0:14:17 Brad Pitt le cae bien.
0:14:19 Me cae bien.
0:14:21 También me cae bien algunos actores,
0:14:23 porque son medio fulero.
0:14:25 Por ejemplo, Morgan Freeman.
0:14:27 Morgan Freeman.
0:14:29 Como medio fulero, pero sabio.
0:14:31 Morgan Freeman es el actor que más sabe...
0:14:33 Es científico, es científico.
0:14:35 El otro día yo lo había en la peor película
0:14:37 que se ha filmado últimamente,
0:14:39 que se llama Lucy.
0:14:41 Con Morgan Freeman
0:14:44 y Scarlett Johansson.
0:14:51 Entonces la tipa,
0:14:53 se toma, no sé qué,
0:14:56 o algo, un accidente cualquiera,
0:14:59 y la mente le empieza a funcionar
0:15:01 de modo tal,
0:15:03 que en vez de usar el 15%
0:15:06 de sus células nerviosas
0:15:09 como todo el mundo, es un neurón.
0:15:11 Va subiendo ese porcentaje
0:15:14 hasta llegar al 100%.
0:15:16 Y los tipos de la película
0:15:20 que no saben lo que es usar el 100%
0:15:24 la empiezan a dotar de poderes,
0:15:28 como por ejemplo retroceder en el tiempo,
0:15:31 dominar la materia,
0:15:34 todo.
0:15:36 No, bueno, no es así, pero...
0:15:39 Y Morgan Freeman era un tipo que explicaba eso.
0:15:42 ¿Y qué explicación daba?
0:15:44 Ninguna.
0:15:46 Usamos solamente el 15% de nuestras células.
0:15:49 Si usáramos el 20%,
0:15:52 seríamos más inteligentes que...
0:15:54 Ah, ahí está.
0:15:55 Pero si usáramos el 40%, podríamos modificar la materia.
0:15:59 Y con el 50%, podríamos llegar
0:16:03 a cualquier lugar del universo.
0:16:05 Porque se le ocurrió.
0:16:07 Y bueno, sí.
0:16:08 Se le ocurrió al tipo del argumento.
0:16:10 No lo podemos constatar.
0:16:12 Si estaba... Yohan Sen, que en vez de andar ahí
0:16:15 enamorándose,
0:16:17 no, andaba poniendo cara de que lo sabía todo,
0:16:20 la cara que no era que mejor les salga.
0:16:23 Y, no sé cómo termina la película,
0:16:26 porque no...
0:16:28 me fui.
0:16:30 Claro, ¿qué le pasó a Luz?
0:16:33 Bueno...
0:16:34 Me yo ganas de verla ahora que...
0:16:36 ¿Cómo la he describido?
0:16:38 No vea, no vea.
0:16:39 Bueno, fuimos a la discoteca, le hablamos
0:16:42 de la elegancia,
0:16:44 de este tipo...
0:16:46 de la hermosa rama.
0:16:48 Que era un dandy.
0:16:50 No se lo diciamos.
0:16:52 Qué raro que no utilizamos esta palabra.
0:16:54 Tal vez porque estoy trabajando
0:16:57 con un material de un autor español.
0:16:59 Ah.
0:17:01 No sé, no se usa tanto quizá
0:17:03 para el dandy.
0:17:05 No apareció ni Sanini, Bombivanto alguna vez.
0:17:07 Claro, claro que es.
0:17:10 Acá hay mucha literatura sobre el dandy,
0:17:13 es una palabra que se usa mucho en el tango.
0:17:16 Y dandismo también.
0:17:18 Sábato pensaba que el dandismo
0:17:21 era una cosa más espiritual quizá que...
0:17:23 de elegancia.
0:17:25 Y decía...
0:17:27 un dandy es un tipo
0:17:31 que...
0:17:33 estando libre de pecado
0:17:36 y pudiendo arrojar la primera piedra
0:17:39 no la arroja.
0:17:41 Ese es un gesto de supremo elegance.
0:17:44 Entre la concurrera, que es el Cristo, no lo dice.
0:17:47 Aquel que esté libre de pecado
0:17:49 que arroje la primera piedra.
0:17:51 Y sábato imagina, un tipo que sí
0:17:54 estaba libre de pecado,
0:17:56 pero que igual por dandismo, por el legal...
0:18:00 No, tira ahora.
0:18:02 No hace bandera más.
0:18:04 Arruino todo, si tira.
0:18:06 Se arruina todo.
0:18:08 Y esa clase de elegance.
0:18:10 Y el discotecario
0:18:14 me entregó justamente
0:18:16 una canción que lleva ese título.
0:18:19 Bombivante.
0:18:21 Y que ayer fue recordada por Beto Caseta.
0:18:26 Escucharemos una brevísima versión
0:18:29 que en solo de piano hizo su autor,
0:18:32 Lucio de Mar.
0:18:34 Adelante.
0:18:55 La música es muy lenta.
0:18:57 Y es muy lenta.
0:18:59 Y es muy lenta.
0:19:01 Y es muy lenta.
0:19:57 Muy lenta.
0:19:59 speeds
0:20:01 Quand la conjunction inc約
0:20:04 Oderó un díaplicado
0:20:06 En la cadena de
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