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24 de Marzo de 2017

La compañía que uno va a tener en el cielo

Transcripción automática

0:00:00 La venganza será terrible por AM750. Estamos hoy en la matine de mañana también. Habrá matine de viernes a las 8 de la noche. Los esperamos en Venezuela, 3.30. En Buenos Aires, muy cerca del Plaza de Mayo.
0:00:22 Hablaremos esta noche acerca de la compañía que uno va a tener en el cielo. Es un tema bastante frecuente en este programa y en algunas obras que he tenido la desfachatez de escribir.
0:00:39 Así que vamos a ver lo que se ha dicho o lo que dicen los eruditos acerca de con quién se encontrará uno en el cielo desde el punto de vista de la pareja y el afecto.
0:00:50 En la edad media, el matrimonio, ha habido un ente entendido como un medio para la legítima procreación, se encontraba acorralado por una red de relaciones, de sangre, de necesidades económicas, de estructuras jerárquicas.
0:01:08 Tiene que decir que el matrimonio no solamente unía a dos personas, sino también a dos fortunas, dos propiedades, dos familias. Dentro del matrimonio el amor tenía una significación bastante limitada.
0:01:24 En ningún caso debía perturbar el delicado equilibrio de las alianzas. Como bien sabemos, el amor cortés que comenzó a florecer por el siglo XII o XIII, permitía una relación amorosa estable fuera de los lazos del matrimonio.
0:01:42 Pero el amor cortés libre de la dimensión sexual existía, sin embargo, al margen de toda esperanza de institucionalización.
0:01:56 El cielo, pensado por la ortodoxia religiosa, no podía satisfacer aquellos que profesaban el amor cortés, el amor tal como lo conocemos ahora, el amor de enamorarse, volverse luego por alguien.
0:02:12 El cielo estaba reservado para los que habían contraído matrimonio. Y apenas si permitía el encuentro de las damas con la divinidad y el encuentro de los hombres con la divinidad.
0:02:27 Es decir, que la relación de un señor con su esposa se daba solamente de un modo lunar. Muchos caballeros, sin embargo, soniaban con un cielo junto a sus amantes.
0:02:41 Un poeta medieval llamado Ocasán se atrevió a enfrentar la oposición entre el amor a Dios y el amor a las damas. Ocasán proclamaba,
0:02:53 yo busco ganarme el paraíso, pero el cielo no parece ser una moral adeseable, sino más bien un lugar aburrido.
0:03:03 Vuestros curas viejos que se pasan el día de rodillas ante los altares y en viejas criptas, tal es la gente que va al paraíso.
0:03:12 Prefiero el infierno, prefiero de los caballeros delicados, por ellos iré yo para tener conmigo a Nicolette la más dulce de mis amigas.
0:03:24 Pero la relación, mejor dicho, la religión enseñaba que en presencia de Dios la relación de amor cortés debía dejar de existir o en el mejor de los casos,
0:03:38 el caballero podía transferir la admiración prosaumada a la virgen bendita Ocasán. La adoración de una mujer y de la divinidad no parecía compatible.
0:03:49 Un trovador llamado Arno Daniel pudo escapar a ese dilema reconciliando los dos tipos de amor.
0:03:58 Arno, que vivió allá por el año 1200, aseguraba que la veneración de una dama, según los preceptos del amor cortés, podía en realidad llegar al cielo.
0:04:10 Arno esperaba disfrutar en el otro mundo de la doble dicha, de la presencia de su amada y del Señor.
0:04:18 Podemos percibir un eco de la doble decisión de Arno, más de un siglo después en la vida nueva del Dante y después en la vida del Dante de Bocaccio.
0:04:28 Al final de sus versos, Dante expresa su esperanza de que Solma pueda ir a ver la gloria de Beatriz que contemplaba el rostro del Todo Poderoso.
0:04:40 Al hablar de la muerte de Dante, Bocaccio, sugirió que el alma del poeta había sido en verdad recibida en los brazos de su amiga, con quien Dante vivía feliz en presencia de Dios.
0:04:54 Los dos poetas se aseguraron de conceder el primer puesto a lo divino, aunque sólo fuera para contentar la retórica peadosa y para quedar bien con el comisario.
0:05:07 Beatriz estaba en el cielo, recibió a su mamante que era el Dante, pero estaba siempre atenta a Dios.
0:05:14 En sus versos, Dante permitió que Beatriz lo mirara y le sonriera, pero fugazmente, antes de volver a dirigir su mirada a la luz divina.
0:05:26 La sonrisa de la amada, antes de volver a la visión beatífica, era todo lo que un amante medieval podía esperar.
0:05:35 Nada más.
0:05:37 El fraile Jordán de Sajonia, prior de los dominicos durante 15 años, allá mediados del siglo XIII,
0:05:45 no sólo promovió la fundación de un convento de monjas, sino que estaba íntimamente ligado a las mujeres religiosas.
0:05:54 Las 37 cartas que se han conservado dirigidas a Diana de Andaló, no intentó nunca esconder su amor por la monja que vivía en un convento de Bologna.
0:06:06 Para el fraile Jordán, su amor a Dios y su pasión por Diana, sólo podían culminar en la Jerusalén celestial.
0:06:15 Y aquí llegamos al amigo de este programa, Francesco Petrarca, que era admirador de Arnaud Daniel.
0:06:22 Era incapaz de liberarse de la carga que suponía la tradición con respecto del cielo que soñó para sí.
0:06:30 Tras la muerte de Laura, así se llamaba la mujer que Petrarca amaba, Petrarca se imaginó que podía estar con ella en el otro mundo.
0:06:40 Defendió esta idea, pero con palabras santas, inmaculadas.
0:06:47 En un poema encontró coraje suficiente para repetir la síntesis de Arnaud, diciendo que su deseo era ver a Cristo y a Laura.
0:06:58 Pero a la mía donna, al mío señor, no fue más que un deseo poblado por su humanismo y su culpa cristiana, digamos lo así.
0:07:11 Tuvieron que llegar los románticos mucho tiempo después para que el amor en el cielo dejara de estar prohibido.
0:07:17 Los escritores románticos declararon audazmente que después de la muerte los justos recuperarían el amor perfecto en el cielo.
0:07:25 Los buenos enamorados debían ser llevados mutuos y reciprocamente al disfrutar en el paraíso de la dicha eterna, junto con un Dios favorecedor de los amantes.
0:07:37 Nosotros hemos hecho aquí una melancólica contribución a esta colección de pensamientos al conjeturar la suerte de los que padecen mal de amores de los enamorados en derrota.
0:07:52 El que sufre un desengaño amoroso y gana el cielo no encuentra en el cielo un consuelo a ese desengaño, porque la mujer que lo dejó aquí por otro estará en el cielo con otro, con ese otro.
0:08:11 Porque no podemos gestar una desdicha en el mismo cielo nada más que para compraser a otro bienaventurado.
0:08:18 Ese es un enorme dificultad en el diseño de paraillos.
0:08:22 A saber lo que uno necesita para ser verdaderamente dichoso es precisamente lo que a otro le produce la desdicha.
0:08:31 Y ahí hemos sido más lejos y hemos cobijado la idea de la construcción individual de paraísos fantasmales donde cada uno encuentra con quien quiere encontrarse, se encuentra con el que quiere encontrarse o con la apariencia de esos seres.
0:08:49 En verdad están en otros paraísos propios disfrutando de sus propios fantasmas.
0:08:54 Quiere decir que la única posibilidad de ser feliz es renunciando a la idea de veracidad, a la idea de certificación.
0:09:06 Y esto me parece más cercano a la razón, porque creo que también sucede en la tierra.
0:09:12 La única posibilidad de disfrutar enteramente un amor es no pidiendo garantía de certeza a cada una de las cosas que nos entusiasma.
0:09:21 La actitud de escribanil es la peor para un amante.
0:09:25 Un amante debe ser antes que nada crédulo.
0:09:29 Y si lo que tiene frente a sí es un engaño estará bien igual si es que le está enamorado de ese engaño.
0:09:37 Lo peor que puede hacer un amante es empezar con tareas detectivescas para desarmar su propia ilusión, cosa que hace mucho.
0:09:46 Lo primero que hacen cuando se consiguen una novia es tratar de desmentirla.
0:09:52 Disfrútenla, disfrútenla en vez de estar averiguando dónde está la trampa, porque la trampa está ahí en que la única forma de disfrutar es con un engaño.
0:10:04 Los enamorados suspicaces preguntan todo el tiempo, ¿me querés?
0:10:08 ¿Te gusta tanto el Onious Monk como decís?
0:10:12 En realidad, no tiene idea de quién es el Onious Monk.
0:10:16 Y ha dicho que sí porque se enteró de que a él le gustaba.
0:10:21 Y todo es así.
0:10:22 Uno come arroz porque el otro cree que a uno le gusta.
0:10:25 Uno se ejercita en unas preferencias, pero ni siquiera tiene.
0:10:30 No hace mucho en otra oponencia. Habíamos dicho uno no es de ninguna manera.
0:10:36 No somos todos como un rolón que lo tiene todo clavado.
0:10:40 Me gusta esto, me gusta lo otro, me gusta la carne de caza, me gusta la pisa con palmito, no me gusta esto, no me gusta aquello.
0:10:47 La verdad es que uno es una persona tan sencilla, tan elemental y tan desilachada que no tiene preferencia.
0:10:56 Algunos necesitan comprar el libro de Orangel para decidir su carácter según la fecha nacimiento.
0:11:03 Se yo como soy yo.
0:11:06 ¿Cómo es usted? No sé.
0:11:08 Entonces, yo me compro el libro de Orangel, me lo quería nací, ni siquiera lo sé yo.
0:11:17 Y ahí me construye un carácter. Ustedes te nacen perseverados, ¿qué sé yo?
0:11:23 En el caso de los amantes tampoco uno es nadie y da lo mismo, da lo mismo el campo que la sierra, que la playa.
0:11:31 A uno no importa todo humbledo.
0:11:33 Si para enamorar una dama hay que preferir la playa, la prefiero.
0:11:38 ¿Qué me importa total? No soy nadie yo.
0:11:42 Soy quien quieras que yo sea.
0:11:47 Ese es la única cosa que soy.
0:11:49 Un ser proteico destinado a compraserte.
0:11:53 Así que decime qué es lo que me tiene que gustar y a mí me va a gustar.
0:11:59 Porque en realidad todo me importa nada.
0:12:02 No me importa nada, no tengo ninguna preferencia que no sea aquella dictada por la más ciega y de mental pasión.
0:12:10 Lo cual ya no es una preferencia, porque no es una elección, es algo que a uno le ha ocurrido.
0:12:16 Bueno, ocurrido ese accidente que es el amor, ¿qué le cuesta a uno preferir esto o aquello?
0:12:22 Da lo mismo, señor.
0:12:23 Deme de lo que quiera, el chocolate, el pistachio, nada todo igual.
0:12:29 Mire, yo soy el presidente de la sociedad, todo me da igual.
0:12:35 Todo me da igual menos una cosa.
0:12:41 Bien, después de estas consideraciones, digamos que no solo en la tierra sino en el más allá,
0:12:48 siempre es muy difícil estar con la persona que uno ama.
0:12:52 La mayoría de nosotros está convenada por vivir entre personas que no ama.
0:12:57 Y eso es la verdad.
0:12:59 Entonces, si uno le toca por 10 minutos estar con una persona milagrosa, disfrútenlo,
0:13:03 en vez de preguntarlo, cuándo a la que estaba haciendo a las 5 de la tarde.
0:13:08 Y aprovechelo, porque no hay mucho de eso en el universo.
0:13:13 La mayor parte del tiempo no está con personas que no son el hombre o la mujer de su vida,
0:13:19 el gerente de la radio, el tipo que viene a reglarle la edadera, el que no se atiende en el supermercado.
0:13:27 Es necesario no desperdiciar el tiempo de felicidad que nos puede tocar en toda una vida.
0:13:38 Cuento nos toca de felicidad en toda una vida.
0:13:41 Yo calculo, puede llegar a ser unos 20, 25 minutos.
0:13:46 Bueno, no hay que desperdiciarlo.
0:13:51 Porque esos son los minutos de felicidad que nos van a tocar en toda la vida.
0:13:57 No, no, no, no hagamos correr ese minuto desconfiando.
0:14:02 Hemos ido a la discoteca.
0:14:06 Y el disco que elegimos...
0:14:09 No importa, ponga cualquier.
0:14:11 No, no, porque este justamente en este caso no.
0:14:15 En este caso no.
0:14:16 Lo que hace este disco es continuar la disertación.
0:14:21 El tema de este disco es un disco que renuncia al cielo para seguir a su amada,
0:14:30 que además es una turra hasta rinfear.
0:14:36 Y se llama desdén, porque es el historia de alguno que desdeñó el edén.
0:14:43 Es una letra también un poco rara.
0:14:48 Está un compuesto por Carlos Gardero.
0:14:51 Sin embargo, la letra, de los mismos años prácticamente que...
0:14:57 no sé, que volver o que sus ojos se cerraron,
0:15:02 es un poquito más gruesa.
0:15:08 Está muy bien, pero es un poquito más melodramático.
0:15:12 Canta Carlos Gardel con una voz grave.
0:15:17 Casi como con un estilo que no era exactamente el del, pero igualmente eficaz.
0:15:23 Canta desdén.
0:16:12 No, no, no, no, no, no.
0:17:12 Me matan covárele la entregacia a mi rival.
0:17:17 Usted no correré de acá con esto.
0:17:21 Me mandaste a la prisión.
0:17:25 Por más que vos seas repierta, no por las enerceras.
0:17:31 Deseñé mi vida entera en la ubera de tu amor.
0:17:39 Eh, pero a todo que fuera, sin decirte ni siquiera que en mi pena hay mi dolor.
0:17:47 Sin embargo, a este eterno seré el evipo mi desdene.
0:17:55 Y en mi amor profudidierno por seguirme hasta el infierno
0:18:00 de su desesperción es молодed...
0:18:10 Era Carlos Gardel.
0:18:12 Y la venganza será terrible.

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