Transcripción automática
0:00:00 Hablaremos hoy de la decadencia del agón en Grecia. El agón es este afán de medirse y compararse insesantemente que tenían los griegos.
0:00:14 La competencia, la rivalidad, sin encono, la lucha, pero la lucha solamente por placer.
0:00:24 De ahí viene la palabra agonía que quiere decir lucha en un principio, en una primera excepción.
0:00:29 Estuvimos hablando no hace mucho de las carreras de caballos, allá por los siglos 6 y 5 ante el Cristo, que era una actividad muy difundida y que pertenecía al carácter agonal.
0:00:42 Generalmente las competencias eran deportivas o intelectuales.
0:00:48 Pero allá por el siglo IV y III antes de Cristo, la idea del vagonal empezó a deteriorarse.
0:00:56 Lo que sucedió no tuvo tanto que ver con la desaparición de la competencia, sino con el agujero y unas actividades menores para medirse.
0:01:10 Por ejemplo, la gimnástica empezaba a aburrir a la gente y algunos decían que esta clase de educación estropeaba la belleza y la salud
0:01:20 y que el ejercicio prematuro iba en perjuicio del desarrollo general del cuerpo, todas esas cosas.
0:01:27 Hoy dicen algo y mañana lo contrario, especialmente en aquellos tiempos donde no había posibilidad de medir realmente, de falizar estos decires.
0:01:39 El caso es que calculaban incluso que entre los vencedores olímpicos no había más que dos o tres que venciendo de muy jóvenes hubieran vuelto a lograr la victoria haciendo hombres,
0:01:51 que entonces cuanto más gimnasia se hacía uno más de caída, qué sé yo.
0:01:56 Después empezó a decadir la fama que obtenían los vencedores olímpicos.
0:02:02 Ya no sucedía como antes que al regreso del campeón a su ciudad las masas acudían a victoriarlo.
0:02:13 Sí, iban a victoriarlo, pero ya no tanto y las autoridades no costeaban homenajes líricos o coros en honor del vencedor,
0:02:23 como sucedía en años anteriores.
0:02:27 En la mayor parte de las regiones griegas ya nadie tenía ni ganas ni medios para presentarse, al menos con la asuntosidad de antes en las olimpíadas.
0:02:39 Y precisamente por lo que acabo de decir, por la ausencia o la decadencia de los honores que al atleta o al conductor hábil le esperaban.
0:02:51 Platón en sus últimos años de vida anotó ciertas frases de desprecio al respecto.
0:02:58 Por ejemplo, había un señor llamado Aniserio de Sirén, que decía que era muy buen conductor de caballos,
0:03:06 entonces andaba conduciendo a través de la academia en la que estudiaba.
0:03:11 Platón dedicaba tanta seriedad a cosas tan indignas y pequeñas, seguramente estaba imposibilitado para realizar cosas grandes alguna.
0:03:20 Estaba en contra Platón de los conductores de carros, de los gimnasas, de los boxeadores, de los pugilistas.
0:03:34 Espa Minondas exigía que los hombres estuvieran instruidos militarmente, antes que atléticamente.
0:03:41 Los pensadores hedonistas tampoco sentían mucha estimación por la virtud de las competencias deportivas.
0:03:49 Se aseguraba que querer ser siempre el primero era a priori incompatible con una vida de placer.
0:03:58 Y desde luego, el atleta no puede llevar una vida de placer y tampoco una vida militar,
0:04:06 contrariamente a lo que podría pensarse en un principio.
0:04:09 La vida militar está llena de madrugones, de privaciones, comemos poco, dormimos poco.
0:04:18 En cambio, el atleta está siempre muy bien alimentada.
0:04:22 Bien alimentado, pero privado del exceso.
0:04:26 Y el placer hedónico está relacionado a algún punto con el exceso.
0:04:30 Hay cosas que no empiezan a ser placeres hasta que no nos excedemos en ellas.
0:04:36 Bueno, usted dice, en su justa medida no hace mal.
0:04:40 Y otros dirán, en su justa medida no da placer.
0:04:44 Bien, contaré un episodio que da cuenta de esta decadencia de lo agonal,
0:04:56 es decir, de la competencia noble, y cómo vino a transformarse en otras cosas, más indignas.
0:05:06 Parece que un atleta teníamos el llamado Calipo, sobornó en Olympia a un adversario,
0:05:13 quiso sobornar, en realidad, a un tipo de élida para que se dejara ganarle.
0:05:18 Te doy 100 mago y se te deja ganar.
0:05:21 Este rival, el Iense de Calipo, que así se le pagaba, denunció el interno de sobornos.
0:05:29 Y Calipo fue multado, multa para Calipo.
0:05:34 Normalmente, estas multas la pagaba en la ciudad de Estado, de donde provenía el atleta.
0:05:41 Pero el gobierno de Atenas no quiso ver pá.
0:05:44 Así que el atleta fue expulsado de la participación en la Olympia.
0:05:49 Semejante desinterés por la suerte de un atleta, en aquel tipo de competencia, era inaudito.
0:05:56 Pero Atenas le vio cumplir con la multa, porque gente de Delfos, sin duda, instigada por los eliences,
0:06:03 mandó decir a Atenas que no iba a dar más oráculos a los Ateniences mientras no garpará la falta.
0:06:10 Es extraordinario, ¿verdad? ¿Cómo funcionaba aquello?
0:06:14 Fíjese, el oráculo que para nosotros es un...
0:06:18 Para nosotros es algo relacionado con la superstición, con cierta ingenuidad de los pueblos, etcétera.
0:06:30 Era un negocio que había montado.
0:06:33 Y además era necesario para la toma de decisiones.
0:06:38 Y así lo entendieron los representantes de Atenas, que temerosos de la ausencia de predicciones cumplieron y pagaron la multa porque necesitaban el oráculo.
0:06:48 ¿Creeían en el oráculo preguntar a usted? No lo sé, pero necesitaban el oráculo.
0:06:55 Fíjese usted, que usted está en un lugar difícil como podría ser la conducción de Atenas,
0:07:04 tener un oráculo y cumplir con sus predicciones de algún modo era una externalización de su responsabilidad.
0:07:13 Y yo seguí el oráculo, ¿verdad?
0:07:16 Cierto es que el oráculo era suficientemente oscuro como para que usted pudiera adecuar su conducta,
0:07:22 pero de algún modo ya su responsabilidad no era tan tremenda porque la compartía por lo menos con el oráculo de Delfos.
0:07:30 Así que yo no sé si creían en el oráculo. A mí me parece que no.
0:07:35 Al menos no creían aquellos que más interesados estaban en su existencia, pero le servía evidentemente.
0:07:42 Le servía evidentemente.
0:07:46 Suele pasar.
0:07:48 Suele pasar que muchas cosas en las que nadie cree tienen una utilidad muy grande y no es posible terminar con ella diciendo simplemente,
0:07:58 pero si yo no creo, bueno, no es así. No se trata solamente de eso.
0:08:03 Bien, de lo que en el siglo V había sido el agón principal,
0:08:09 que no era un fan competidor de hacerse destacar, el ansia de hacerse famoso.
0:08:15 Había encontrado otros foros que no eran ni el de la gimnasia, ni el canto, ni la discusión retórica, ni nada.
0:08:22 Empezaron, por ejemplo, competencias de chistes.
0:08:27 Un casamieras.
0:08:29 Se fue degradando las cosas.
0:08:31 Y hicieron famosos algunos, ¿no?
0:08:33 Había un sitio clásico para los que se dedicaban a hacer chistes en Atenas,
0:08:38 por ejemplo, de Heracles, en el barrio de La Diomea.
0:08:42 Allí solían reunirse unos tipos que eran autores de chistes,
0:08:46 si querían 60 y competían entre sí.
0:08:49 O al menos había 60 lugares, pues quienes lo ocupaban no sé.
0:08:54 Y cuando un chiste bueno circulaba por Atenas, por ejemplo el chiste del paisano que fue a comprar sus positorios,
0:09:01 decían para darle prestigio al chiste, lo contaron las 60.
0:09:06 Te voy a contar un cuento para mi nonda.
0:09:11 ¿De dónde lo has sacado?
0:09:13 Lo han contado los 60.
0:09:16 Resulta que había una vez un paisano que fue a comprar sus positorios a la farmacia.
0:09:23 Así comenzaban algunos de los cuertos.
0:09:27 Filippo de Macedonia, el legendario papá de Alejandro, estaba interesado en esos asuntos.
0:09:33 Gustaban los chistes verdes a Filippo.
0:09:37 Y tenía unos funcionarios que iban a anotar los cuentos y después se los pasaban a él.
0:09:42 Iban ahí, al templo de Heracles, que luego estaba en Atenas, Filippo de Macedonia.
0:09:47 Y anotaban los cuentos y después se los contaban a Filippo y decía,
0:09:52 sucedió a Filippo que había un paisano que no sabía dónde estaba el escusado.
0:09:59 Y Filippo se arraigó.
0:10:04 Otro encuentro interesante era el de las adivinanzas.
0:10:12 Particularmente en los simposios.
0:10:14 Sabes cómo era el simposio.
0:10:15 El simposio era un lugar donde se escabeaba, se bebía y se proponían temas.
0:10:20 Entonces se jugaba a ver quién podía decir algo interesante
0:10:26 sobre el alma, sobre la inmortalidad.
0:10:31 Así es, el banquete de Platón, sobre el amor.
0:10:34 Sí, sobre el amor.
0:10:36 Pero allí empezaron a hacer adivinanzas ya.
0:10:41 No es lo mismo escribir sobre el amor del modo que lo ha hecho Platón.
0:10:45 Decir que es una cosa que tiene ojos pero no ve, que tiene patas pero no camina
0:10:51 y que tiene pelo si tiene plumbas.
0:10:54 No sé qué es eso.
0:10:59 Bueno, y entonces jugaban ahí en los simposios, decían esto,
0:11:04 y había castigos para los que no sabían decir que era un caballo muerto con un plumero en la boca.
0:11:13 Le contaron los 60.
0:11:19 Y dice, ¿habría quienes por acertar o por inventar tales acertijos se hicieron famosos?
0:11:25 Y dicen que algunas de estas adivinanzas eran de la obscenidad más descarada.
0:11:30 Pero desde luego todas las adivinanzas son obscenas.
0:11:34 Como aquel chino que había hecho 1114 adivinanzas todas con la misma respuesta.
0:11:41 Es la que yo doy siempre cuando me hace una adivinanza cualquiera.
0:11:48 En la Rioja estuvimos jugando a las adivinanzas con un libro de adivinanzas.
0:11:56 Ah, se acuerda.
0:11:58 Claro, claro, y Mike A. Iglesias me leía adivinanzas y yo contestaba siempre lo mismo.
0:12:03 Siempre es lo mismo, si.
0:12:05 Y la lista de cadencia del agón dio lugar también a competencias que incluían.
0:12:11 Citar versos o médicos y completarnos con completar estos versos con contrastes cómicos.
0:12:19 Canto odiosa.
0:12:23 Canto odiosa la venganza de A. Iglesias de Peleo, ¿dónde estás que no te veas?
0:12:31 La colera funesta.
0:12:34 La colera funesta.
0:12:41 Siene la puerta con esta llave.
0:12:46 La llave está con la otra.
0:12:51 Bueno, y la recitación precipitada también de listas de héroes, un trollano y un aqueo alternativamente.
0:13:02 Y me imagino yo hacer ritmos con... no había ritmos.
0:13:07 No había ritmos.
0:13:09 Por ejemplo, trales de mileto, trales de mileto.
0:13:13 Agarré una silla y sentaste.
0:13:18 Bueno, eso te viene en los símbolos.
0:13:20 Es decir, está te quieto.
0:13:22 Bueno, también famosos glotones hacían competencias.
0:13:29 A ver quién comía más, pete ya de comelones.
0:13:37 Dijo de cuidarse entonces la noble perfección y hasta se quitó a los intelectuales las ganas de querer ser siempre los primeros.
0:13:45 Así que eso es lo que pasó hasta fines del siglo III.
0:13:52 Donde ya aparecieron incluso los psicofantas, aquellos que competían por ser los primeros en la factura de denuncias.
0:14:01 Los principales del ator.
0:14:03 A ver quién era más del ator.
0:14:05 Psicofanta, en principio, era el que denunciaba el comercio ilegal de Igos.
0:14:10 Y ahí viene el nombre, el psico de Igos.
0:14:13 Entonces se prohibió la tena, la exportación de Igos.
0:14:16 Y se pidió que las personas que se enteraran, que alguno estaba vendiendo Igos al exterior, lo denunciara.
0:14:25 Estos denunciantes se los llamó psicofantas.
0:14:28 Psicofantas.
0:14:30 Y tenían una propina por cada delación.
0:14:38 Entonces se pidió a la gente que denunciara a aquellos que hacían delaciones faraugulentas.
0:14:47 Para el cual también se ofreció una recompensa.
0:14:51 Así que muchos empezaron a denunciar a los falsos del ator.
0:14:54 Pero sucedió también que muchas de estas delaciones eran faraugulentas.
0:15:01 Por suerte hoy ya no sucede todo esto.
0:15:05 No hablo de las delaciones faraugulentas, pero sí hablo de la gong decadente, de la competencia por la competencia misma.
0:15:18 Y ya convertida, no solo en un ejercicio de nobleza y de preparación, rigor físico o intelectual, sino en una mera colección de adivinanzas, de acertijos, de concurso sin la menor importancia.
0:15:41 Y yo creo que todos nosotros que pertenecemos al medio artístico debemos tener mucho cuidado, como que ese espíritu agonal, que en el occidente actual creo que está representado por los Estados Unidos, antes que por ninguna otra nación.
0:16:00 Que es una nación muy agonal. Por ejemplo, en las escuelas, en los Estados Unidos, se concursa continuamente, hay una comparación contínua.
0:16:11 Se vota a ver quién es el más popular, se elige presidente del colegio, del establecimiento, del aula.
0:16:21 Yo cuando era chico y veía las películas donde contaban eso me daba una cierta envidia, hasta que comprendí que había algo pernicioso, había algo perverso, en esa comparación, en esa carrera de ratas.
0:16:38 Y creo que poco a poco vamos heredando, no de los griegos, sino más bien de los Estados Unidos, esta pasión por lo agonal, por la competencia, por los concursos, por el ubicar todas las cosas, aún las que parecen más abstractas, en escalafones y en posiciones relativas.
0:17:03 ¿Cuál es el mejor alumno de la clase? ¿Cuál es el segundo, el tercero, el cuarto que es quinto?
0:17:08 Y el empleado del mes.
0:17:10 ¿Cuál es el empleado del mes o el segundo?
0:17:15 Pero también ¿cuál es el programa del mes? ¿Programa de radio del mes, del año o de la vida como he visto por allí?
0:17:55 no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no
0:18:09 no, no, no, no, no, no, no, no no noArinen de que...
0:18:11 No, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no no, no, no, no no, no, no, no, no, no, no, no, no, no, no no, no, no...
0:18:16 no, no no, no, no
0:18:18 ¿Cómo quiere que yo me ponga contento por estar ternado en esta votación, en este comisio
0:18:28 que ha hecho la escuela de Aliberte?
0:18:30 Yo respeto y quiero muchísimo.
0:18:33 ¿Cómo quiere que me ponga contento?
0:18:34 Me lo tendría que tomar en serio para ponerme contento.
0:18:38 El año pasado sacaron premios hasta los perros en ese concurso y nosotros no fuimos ni siquiera nominados.
0:18:44 ¿Qué? El año pasado éramos onzos y este año somos vivos.
0:18:48 O resulta que todo es una martingala.
0:18:50 O resulta que todo es una cosa más horrenda, su pertición.
0:18:57 Yo no digo ni que estén arreglados ni que no estén arreglados.
0:19:00 Digo que no tiene ningún sentido.
0:19:02 Digo que no tiene ningún sentido.
0:19:05 Para no hablar, para no hablar de tener uno que jugar su color de las cerdas a juegos a los que uno no juega.
0:19:12 Yo particularmente he decidido no jugar ninguno más.
0:19:16 Ninguno más.
0:19:18 No estoy interesado en saber si soy mejor o peor que pongamos por caso el comentarista de fútbol, de radio, de la red.
0:19:31 Si no jugamos a lo mismo.
0:19:33 ¿Cuál es mejor? ¿Qué es mejor para mí? ¿La larga o el nuestro?
0:19:41 O mejor dicho, lo sé.
0:19:43 Pero ¿qué sentido tiene que yo...
0:19:48 Supongamos que por algún error le llegaremos a la larga.
0:19:52 ¿Y qué digo? ¿Somos mejores que la larga? ¿Y qué es mejor para jugar?
0:19:57 ¿En qué? ¿Sabemos mejor que los de la larga como forma boca?
0:20:01 Seguro que no.
0:20:02 Seguro que no.
0:20:04 Seguro que no.
0:20:05 O sea, creo que esa su pertición agonal tiene sentido.
0:20:09 Si es que se refiere a aquello que es intrínsecamente agonal.
0:20:16 Me estoy refiriendo al deporte y me estoy refiriendo a cierto tipo de actividades que tienen sentido únicamente si hay competencia.
0:20:27 Por ejemplo, una carrera.
0:20:28 Por ejemplo, un sorteo de la quimiela.
0:20:32 Un sorteo de la quimiela tiene sentido únicamente si sale algún número.
0:20:36 Si no sale ninguno o si salen todos, no tiene ningún sentido.
0:20:40 Si no fuera agonal la quimiela nadie jugaría.
0:20:42 Si no fuera agonal el hipódromo nadie jugaría.
0:20:46 Pero en cambio la escritura de novelas no tiene porque ser agonal.
0:20:50 Uno debe escribir novelas porque es bueno escribir novelas.
0:20:53 Más allá de que uno gane o pierda.
0:20:55 Y no lo podés convertir en agonal solamente para interesar en las novelas a aquellos tipos que solamente están interesados en las carreras de caballo.
0:21:04 Así que yo no quiero jugar ese juego falso.
0:21:07 No quiero ser ni el mejor y mucho menos el peor.
0:21:11 Nada más porque este es un año de impar.
0:21:14 Y porque ya me tocó antes en el reparto.
0:21:17 No quiero nojarme con nadie, pero no puedo menos que ser sincero y decir que esa martingala de los premios la realice quien la realizara es absolutamente contraria al pensamiento refinado.
0:21:33 Así que no eran solamente los griegos los que tuvieron una decadencia en el agon.
0:21:38 Estamos existiendo a ella con el mejor de nuestros entusiasmos.
0:21:44 ¿A quién quiere dedicar esta chapa?
0:21:46 Bueno ya que a tipos que se especializaban en adivinanzas nombró, yo le voy a dedicar al amigo Edipo que tanto bien me ha hecho.
0:21:57 Que es uno de los mejores.
0:21:59 Para mí viene Edipo y después en la terna.
0:22:04 Y ya que de campeones y de deporte hablamos de que me dedicaré esto a Alejandro, a Nicolino López, a Manu y a Diego Maradona.
0:22:16 Bueno, qué es el consejo.
0:22:18 ¿Qué es el consejo?
0:22:20 Es algo que se competida.
0:22:22 ¿Es el campeón?
0:22:24 No sé si tiene sentido ser campeón.
0:22:26 ¿Es de programas de radio?
0:22:31 Lo que pasa es que si usted se sube un rin conmigo, por ahí podemos saber cuáles son los dos.
0:22:36 Pero escuchando así...
0:22:38 También se puede.
0:22:40 También se puede.
0:22:42 Pero vemos quién es el de Alejandro.
0:22:44 Ah, qué vivo.
0:22:46 ¿Quién escucha?
0:22:48 ¿Quién escucha?
0:22:50 Sus alumnos.
0:22:52 Vamos a escuchar a...
0:22:55 Vamos a escuchar un tango que tiene que ver con esto.
0:22:58 Y se llama primero yo, que obviamente es una expresión de deseo de aquel que se ha notado en alguna clase de competencia.
0:23:05 Y lo escucharemos en la versión de Don El Mundo Rivero. Adelante.
0:23:10 ¡Pues puedes pasar por mi lado como pasaste esa noche, inflada de despotismo con lírimos de cartel!
0:23:29 O despasas por mi lado y hacer de pinta de roche como perfecta guaranga.
0:23:34 Esta es tu gran papel.
0:23:36 Saliste de mi academia con nociones de cultura.
0:23:40 Yo te vi los mejorcitos ejemplos de educación.
0:23:44 Pero ya estoy convencido que por tu cabeza dura no debí perder el tiempo en darte tan pereció.
0:23:54 Sé colombir los afares de tus etiquetas ruegos y como el amores iremos en cojíver de mujer.
0:24:08 Me adoraste si ella me te...
0:24:12 Y tan si ella te sentiste que una tarde te perdiste y fue para no volver.
0:24:23 Para mí no has cremechado a siente la misma cosa por mucho que galantes al pasar en tu renón.
0:24:31 Eras parentes en tus modales, una moral desastrosa, podrán cambiarte de afero, pero de más hombres no.
0:24:39 Nosotros hemos tenido un diferente desvío.
0:24:43 Vos te fuiste para arriba en placer, te irás en sillon.
0:24:46 Yo me quedé empantanado en la mitad del camino.
0:24:50 A vos que ayudó la suerte y a mí me desergo.
0:24:56 Primero ya forma fuerte, que te pierde bien la guita.
0:25:02 Esta es la página escrita de los que mueren nuestro amor.
0:25:10 Y aunque la viva gozando, gente va a tener dichoso en la lista de tus vasos.
0:25:21 Por primero, por primero, yo.
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