Transcripción automática
0:00:00 Senores, vamos a hablar de la revuelta Nikke. Es una revolución, pero empecemos por otra
0:00:12 parte. Ayer hablamos acerca de la poliorcética del arte del sitio, de las ciudades, y por
0:00:21 ahí en una lista nombramos el banquete de Rabena. Y me gustaría recordar qué pasó en Rabena.
0:00:31 Allí se juntaron Teodorico y sus Ostrogodos y Odoacro, y ahora me acuerdo cómo se llamaban
0:00:39 los hérolos, que así eran los seguidores de Odoacro. Teodorico, después de haberse rendido
0:00:50 los hérolos incluso, los convidó a un banquete para negociar y para celebrar una rendición
0:01:00 formal, con algunas condiciones, etc. Y hubo un banquete en Rabena, en donde se sentaron
0:01:07 día uno, intercaradamente, los hérolos, pero los otros también los de Teodorico, los
0:01:17 Ostrogodos. Muy bien, a una orden de Teodorico, cada hombre, cada Ostrogodo mató al que tenía
0:01:26 su derecha, y de este modo quedaron muertos todos los hérolos, menos según se suele
0:01:34 decir. Quizá todo esto es mentira, las cosas no son en celtas mecánicas, menos un joven
0:01:42 al que dejaron como testigo para que lo contara a nuestra generación.
0:01:49 Suele ocurrir esa decenas.
0:01:50 Cosas que no han hecho mucho, pero sí lo suficiente para que el cuento llegue hasta
0:01:54 este programa. Allí, Teodorico tenía como ministro a Boesio, ustedes conocen a Boesio,
0:02:07 fue el inventor de muchas clepsidras y órganos, pero era demasiado sabio, él se ocupaba de
0:02:12 matemáticas y astronomía, y entonces dijeron que era brujo, naturalmente, qué otras cosas
0:02:18 van a decir. Teodorico sospechó que se había aliado en secreto con el emperador de Constantinopla,
0:02:24 y lo encarceló en Pavia. Allí escribió la consolación de la filosofía una obra
0:02:32 estoica metadeo platónica. Apenas acabado el libro, acabado de escribirlo a Boesio,
0:02:42 no acabado de leerlo él, Teodorico hizo ejecutar al filósofo, era mucho peor que lo hubiera
0:02:49 hecho ejecutar, después de terminar el libro, él como lector, y no Boesio como lector.
0:02:55 Parece que lo apretaron de apretar una cuerda alrededor del cogote, y los ojos le saltaron
0:03:02 de las órbitas y la lengua de la boca, pero Boesio no se moría, vio cómo se la gente,
0:03:09 entonces lo tendieron sobre una miga, le dieron muchos palos y lo remataron con un hacha y
0:03:16 ahí murió. La consolación de la filosofía.
0:03:20 Rabena es la ciudad que se dibujó a Dróktufull, es Dróktulft, sería Dróktulft, este hombre
0:03:32 venía desde los bosques y las guerras lo llevaron a Rabena, y así vio algo que nunca había
0:03:40 visto en plenitud, vio el mármol, vio los jardines, vio las estatuas, las casas, las escaleras,
0:03:48 los capiteles, los espacios regulares, las inscripciones, los arcos, la ciudad, y la ciudad
0:03:57 lo deslumbra y lo transforma, lo transforma tanto que cambió de bando, de bando Dróktulft,
0:04:04 y empezó a luchar por los romances, esa era la ciudad de Rabena, ciudad que fue conquistada
0:04:10 por el emperador de Constantinopla, que era Justiniano. Ahora bien, Justiniano, y aquí
0:04:17 el protagonista de nuestra historia, era muy devoto, era uno de los emperadores cristianos,
0:04:26 amaba la gloria y trabajaba incansablemente, tenía fama de no dormir jamás, tenía eso
0:04:34 si una esposa que se llamaba Teodora y era prostituta, pero también santa, es la del
0:04:42 melodrama este de Victoría en Sardún, que creo que se llama Teodora emperatriz de Visas,
0:04:50 además creo también que Teodora, estoy seguro de esto, era hija del guardián de los osos
0:04:59 del hipódromo de Constantinopla, y al morir su papá tuvo que ganarse la vida, fue actriz
0:05:08 y se prostituyó, le gustaba el dinero y el amor, qué maravilla, sus excesos se han hecho
0:05:17 famosos, se habla por ejemplo de una cena en la que rodeada por 30 esclavos concedió
0:05:24 sus favores a 10 jóvenes, 10 jóvenes no parece gran cosa.
0:05:32 No, y menos se había 20 que estaban mirando.
0:05:34 Si, aquí se está mal escrito aquí, debieron ser 30, ya que 30 eran los esclavos que estaban,
0:05:41 no importa, estuvo enamorada varias veces y Justiniano se enamoró de ella cuando todavía
0:05:47 no era emperador, creo que la madre de Justiniano se murió, se suicidó cuando se enteró de
0:05:55 que Justiniano estaba enamorado de esta mina.
0:05:58 La ley prohibía a los personajes de escaso rango con tener matrimonio con los de más
0:06:07 alto rango, pero especialmente estaba mal visto casarse con actrices o prostituyos.
0:06:15 Justiniano hizo prom...
0:06:19 No, no dice eso.
0:06:21 No, señor, no dice eso.
0:06:23 Está prohibido contraer matrimonio con actrices o prostitutas.
0:06:29 ¿Será prostitutas o actrices?
0:06:34 No, digo, Justiniano le hizo promulgar al emperador, que todavía lo antes se di a su tío,
0:06:44 un edicto imperial que derogaba la ley y se casó no más con Teodora.
0:06:51 Entonces ahí fue donde la mamá murió de pez.
0:06:55 Ahora bien, los bizantinos habían heredado de los romanos, en general habían heredado
0:07:00 más cosas de los griegos, pero bueno, una pasión violenta por las carreras de carros
0:07:06 y los juegos de circo.
0:07:09 Más que el Palacio del Emperador o el Foro Orabasílica de Constantino, el centro de la ciudad clásica
0:07:17 era el Hipódromo.
0:07:19 Ocupaba la gran plaza que se extiende en la actualidad delante de la Mesquita Azul
0:07:25 y se llama Atmeidani.
0:07:28 Así iban las nuchedumbres a aclamar a los conductores de carros
0:07:34 que se habían convertido en verdaderas estrellas llenas de dinero y de gloria
0:07:39 como hoy en día los jugadores de fúaval.
0:07:43 Todos hablaban de ellos, de sus amores, de sus rivalidades, de sus pequeñas miserias,
0:07:52 de sus triunfos, claro.
0:07:54 Según una división cuatripartita, los cocheros estaban divididos en cuatro grupos
0:08:01 que correspondían, tal vez, a una división religiosa, geográfica y social.
0:08:09 Estaban los azules, los blancos, los verdes y los rojos.
0:08:13 Los azules y los blancos representaban a los barrios ricos, favorables a la ortodoxia
0:08:19 y al gobierno de unos pocos.
0:08:21 Los verdes y los rojos representaban a los barrios populares y se inclinaban a la erigía.
0:08:30 Dice aquí que una idea del aspecto visual que podía tener aquello
0:08:37 la da el palio, esa carrera anual que se realiza en la ciudad de Siena.
0:08:44 Durante mucho tiempo el emperador había sido partidario de los verdes y llevaba a su casaca.
0:08:50 Pero era costumbre mantener equilibrio entre los azules y los verdes por razones políticas, como se entiende.
0:08:58 Entonces Justiniano se inclinó por los azules.
0:09:02 Los verdes se enfurecieron y se echaron a la calle alentados por el favor del emperador.
0:09:10 Los azules se arrojaban sobre los verdes y saqueaban sus casas. Cuidado, esto se le miedo.
0:09:20 Bueno, entonces se arrojaban sobre los verdes y los azules en la calle
0:09:26 y el emperador trató en vano de detenerlos.
0:09:28 Pero al fin tratando de restablecer la calma, Justiniano se dijo al mismo tiempo con azules y verde,
0:09:37 como el que se mete a separar en una pelea.
0:09:41 Y entonces ambos bandos hicieron causa común y adoptaron un grito de guerra en contra del emperador
0:09:49 y se gestó una rebelión, la rebelión que se llama Nikke Victoria.
0:09:55 Cuando ustedes ven unas zapatillas que se llaman Nike, tengo muy malas noticias,
0:10:01 no se llaman Nike en ninguna parte del mundo,
0:10:05 que no sea en esta región más angloparlante que la mismísima en la terra,
0:10:10 donde por lo menos le dicen Nike, porque viene de esta palabra y quiere decir Vitor.
0:10:18 En el único lugar donde se dice Nike es aquí porque se tiene más fe a una fuente inglesa que a la verdadera fuente bizantina.
0:10:28 Sí, no siguen igual y los muertos americanos tampoco saben muy bien de dónde vienen.
0:10:33 Para comprarse un par de zapatillas no es necesario ser filólogo.
0:10:38 Cuando aprenden castellanos le dicen la palabra Pussy, y así es.
0:10:46 Y esta sedición, la sedición Nike fue una de las más terribles de la historia.
0:10:53 Constantinopla cayó en manos de los amotinados, los palacios fueron saqueados, los comercios de palijados,
0:11:01 la vacílica de Constantino, arrasada por la yaman, y entonces el emperador vaciló, dijo,
0:11:07 ay, qué hago, qué hago, y ahí surgió Teodora, convenció a Justiniano de que había que luchar.
0:11:14 Y eligió a un general muy famoso, que es protagonista de una novela de Robert Graves,
0:11:21 que se llama Belisario, era un general sin escrúpulos, pero con genio, y aplastó la revuelta.
0:11:31 Desde aquel tiempo existe una superstición que sigue hoy, pero ya ante la ausencia de carreras de carro,
0:11:41 sigue en la fórmula 1.
0:11:44 Los corredores le tienen cierta prevención al verde, y existe la superstición de que se le teme al verde en las carreras de fórmula 1.
0:12:00 Ya se debe estar perdiendo.
0:12:03 Suspecho que a partir de que entraron en este capital, en este Saudí, el verde se debe haber incorporado en la paleta, pero...
0:12:10 Y sponsors, como Petrobras.
0:12:13 Sí, en realidad...
0:12:15 Qué verde.
0:12:17 Hay muchísimos autóferes, y aquí en la fórmula 1, uno de cuatro es verde.
0:12:22 No, no, no, tampoco está...
0:12:24 En la fórmula...
0:12:26 Son de todos los colores, por por por.
0:12:28 Son por eso, es imposible, no ser verdad.
0:12:31 Son como esos viejos avisos que había en los cines de ese mosaico de avisos.
0:12:37 Esa especie de...
0:12:40 de sentón.
0:12:42 Esa especie de frazada construida con un montón de fragmentos de avisos.
0:12:51 Entonces, no, ustedes se acuerdan, sí, preciada catra.
0:12:54 En ese sentido, sí.
0:12:56 Casa Reinozo, Frenos.
0:12:59 Panadería la Linda.
0:13:01 ¿La Roleria?
0:13:03 La talla de Cepeda, todo eso.
0:13:05 Y vos te pasó a leer, no hay hasta que empezó la película.
0:13:09 Es lo lindo de los trajes de los corredores de auto, que tienen todo eso así también.
0:13:13 Y bueno, ahora eso pasó a los corredores de auto.
0:13:15 No puede charlar con ellos, pues los leyes mientras tanto.
0:13:18 En los equipos de divisiones inferiores del fútbol, en las canchas, se ve muchas también publicaciones.
0:13:23 Sí, hay camisetas que...
0:13:25 Se daba un rato.
0:13:27 Abajo de todo eso está la camiseta.
0:13:30 Sí, posiblemente.
0:13:32 Bueno, ¿a quién quiere dedicar?
0:13:34 Estaba, estaba...
0:13:36 Está el recuerdo de aquel episodio.
0:13:39 Estaba recordando que este...
0:13:41 ni que, además de andar en las zapatrices, es un fragmento.
0:13:44 La victoria que estamos...
0:13:46 hemos contado aquí alguna vez presenta en muchos nombres, ¿no?
0:13:48 Berenice viene de ahí, que es nuestra cosa que es la portadora de la victoria y...
0:13:52 La treiche de la victoria.
0:13:54 Igual que Verónica, y el caso es que si un señor se da un séforo, por ejemplo, que viene a ser lo mismo.
0:13:59 Pero estaba pensando, recordando, Alejandro, que el en esta lengua que está...
0:14:02 En cambio, no sé qué sucede con el ya mencionado Nicola.
0:14:07 No es de victoria en este caso.
0:14:09 Pero la filología aplicada a los verduleros es interesante.
0:14:13 Sí, y claro que sí, como su nombre de vinicita.
0:14:16 Pero bueno, estaba pensando en un idioma que es muy caro a este programa, como es la lengua china,
0:14:21 y donde la palabra crisis se construye con dos caracteres que significan uno de ellos, peligro y el otro oportunidad.
0:14:30 Y pensaba este muchacho, este custiniano, que pareció apostar a este tipo de cosas todo el tiempo,
0:14:36 y casi siempre elició lo contrario, como si él, un amante de las carreras,
0:14:40 no supiera que entre el peligro, el riesgo, la derrota total y la oportunidad se puede perder incluso por una cabeza.
0:14:47 Y por una cabeza es el tanguito y santino que vamos a escuchar inmediatamente en la voz de Gardel. Adelante.
0:15:18 Y que al regresar, pares y decir, no olvides ser hermano, no sabés lo hay que morar.
0:15:26 Por una cabeza me tejó un día de aquella coqueta y rey sueña mujer.
0:15:34 Y al jurar, torriendo, que el amor te está mintiendo, que más en uno vea todo mi querer.
0:15:43 Por una cabeza, toda la locura, con un cajé beta borra la triceta, calma la margura.
0:15:59 Por una cabeza, y ella me olvida.
0:16:07 Me importa perderme mil veces la vida para que vivir, cuanto desenganio por una cabeza.
0:16:18 Yo jure mil veces no vuelvo a insistir, pero si un mirar me guiere al pasar,
0:16:26 tu goja de fuego, que te lo desvío a estar, basta de carrera.
0:16:31 Que acabo la cimba, un final rellido, yo no vuelvo a ver.
0:16:37 Pero si algún pingo llega a ser ficha el domingo, ya me juego entero, qué le voy a hacer.
0:16:47 Por una cabeza, toda la locura, con un cajé beta borra la triceta, calma la margura.
0:17:03 Por una cabeza, y ella me olvida.
0:17:11 Me importa perderme mil veces la vida para que vivir.
No hay comentarios. ¡Podés ser el primero en comentar!