Hago un humilde llamado a no dar por el pito (pito catalán en este caso) más de lo que el pito vale...
Si alguien quiere despedirse de un foro con un insulto genérico hacia todos los demás, ese insulto habla más de sí mismo que de los otros.
A este respecto recuerdo una conocida historia del gran Siddharta Gautama:
Habiendo recién llegado el Buda a un pueblo, fue encarado por un hombre que comenzó a insultarlo. Lo insultó e insultó largo tiempo, mientras el Buda lo observaba en silencio, con infinita compasión. Cuando hubo terminado su larga perorata, el Buda comenzó a hablar con habitual voz calma y serena:
"Dime buen hombre, si una persona quiere hacerle un regalo a otra, y ésta última no lo acepta, ¿a quién pertenece el regalo?"
"A la persona que quería hacer el regalo" le respondió el otro.
"Bien", dijo el Buda, "no acepto tus insultos".
No se sabe cómo terminó esta historia, pero me gusta pensar que, como le ocurría frecuentemente al Buda (en una época quizás con mayor ignorancia que la actual pero con mucha menos vanidad), el hombre terminó rendido ante la infinita superioridad del Buda y se convirtió en su discípulo.