Mi pregunta era tácita, implícita : qué es entonces humanismo, si no es política.
Qué hace confiable a un hombre : que sea VERAZ con él mismo, que no actúe por NINGÚN interés personal de poder, que AME la verdad aunque la verdad lo "perjudique", que "inmole" su ego a la verdad, al bien general, pero que responda al emergente individual, lo resuelva, lo salve, aunque en apariencia contradiga el discurso impecable, un "idealista realista" no un acomodaticio.
Dolina dijo que viendo cómo piensa alguien respecto de esenciales asuntos, se puede inferir como piensa de los demás. Si un hombre en lo personal por mantener la "imagen" invicta de su palabra, traiciona el hecho, entonces es un miserable o un débil o un soñador menos al que acompañaré no más allá de la pizzsaría. Una metáfora debe seguirse en lo puntual, con buena fe, fuera de contexto es contradictoria. ¿Qué Dolina seguís, qué Dolina escuchás, qué oye tu oído, qué el mío? Más allá del error que es humano ( como la bomba es el objetador capcioso ) es la actitud, la intención, la conclusión a la que llega por los mejores caminos, el hombre que piensa, el que siente - y no son dos divididos, es uno - Un hombre siempre debe definirse, comprometer su historia y su imagen en el apoyo a lo que cree, o no vale nada, ocupa un lugat que no le corresponde, es un impostor. Y no es el caso de Dolina. Dolina no es el de ayer o el de la infancia, es el que el tiempo, el estudio, el esfuerzo, la honradez, la voluntad de ser, la voluntad de sobreponerse a todo mal, desembocó en este que ahora parece decir que la metáfora del gris es otra, que hay que tener muy claro qué es negro y qué es blanco, para encarnarla. Y yo digo que él ya no es "el ángel gris". No señor, no es gris. Para entender el gris, para abrazar el gris, para tenderle la mano y la cabeza y el corazón al gris, no se puede ser gris.
¿ Qué tiempo de tu vida le dedicás a Dolina o a seres como él, qué te mueve...?
Que no te preocupe lo que mueve al otro : a la hora de actuar, serás vos y tuyo el compromiso y tuyo el hacerte cargo.
Buscá coincidencias, revelaciones y rebelaciones, buscá al que te ama como gris, te acepta, pero suavemente o con paso de murga o con provocaciones cínicas que te obligan a reflexionar ( el modo que mejor se avenga a tu naturaleza ) te va llevando de la franja gris, hasta - al decir de Einstein - el campo abierto de la luz del entendimiento. Tal vez no te siga al campo abierto : tal vez se quede en la retaguardia del claroscuro recibiendo los tomatazos.
No cuestiones mi fe, no te sirve : cuestioná la tuya.
Y contame, y te contaré, y ayudame y te ayudaré. Y NOS ayudaremos.
La condición es la búsqueda de la buena fe, la buena voluntad, la coincidencia honrada. O los milagros que se pueden, cuando un grupo se ha reunido desde ellas ya logradas.