Disfruté con alegría el programa de anoche.
El humor fue como en el poema chino : sonaron todas las variantes intencionadas y espontáneas en los tonos del "shi", desbordaron el texto. Se podía ir de un extremo al otro de la emoción, en estado de neuronal luciérnaga : barrilete sin cola, grillito, lance entre toro y capote, la chispa saltaba como Pan sobre mí : ¡ Vamos, jueguen! - parecía decir. Creo que casi todos han tenido su fueguito de San Telmo. Su hechizo de Luna.
Los tres han vibrado lindo.
Con qué delicado e intimista cariño de reencuentro, ha sonado El Dúo.
Suave y aclarinada, la voz de Moreira, voz que aún no ha tenido tiempo de cambiarse las texturas y colores del viaje.
La versión de Insensatez, es la que más me ha gustado de todas cuantas cantó.
Una sóla cosa faltó ( como decía mi abuela "los cinco centavos para el peso" ) y desafinó lo que pudo completarse en felicidad : la voz de el Sordo, en Insensatez, aunque estaba su música claro.
"Nuestra guitarra" no creo que significara nuestro Moreira porque eso ya se sabe; tal vez trajo a la memoria la afinación de Lozano y la broma de Ale y Martín refiriéndose a "que no le sale o no le gusta" a Moreira.
Es bello ese estilo en Lozano...
Y el modo de Moreira, "el nuestro" ( el de ellos).
¡Gracias! :-( :-)