Excelente programa el de la fecha con Dolina con todas las pilas, llevando la voz cantante él,siendo sarcástico e irónico: Lo del cartel en el sindicato de los gastronómicos fue una verdadera genialidad, eso sí. Con citas literarias alteradas etc.... Como se extraña esos verdaderos pasos teatrales que hacía con Rolón y Stronatti, en los que detrás de una mascara humorística se escondía siempre una reflexión metafísica o una alegoría amorosa.El humor era un medio; pero con Barton y Gillesppi se vuelve un fin en sí mismo y convierte al programa en una pavada digna de Pergolini o los programas de la Metro, con su humor FM. Gillesppi y Coco Silly cagaron el programa para siempre.
El programa del jueves, Dolina quiso llevar la historia del corredor secuestrado para un lado así, pero el gordito y Barton lo interrumpieron haciéndose pasar por el hijo y la mujer..¡jo jo..que gasioso dddu!... y la cagaron. Dolina se cansó y les cortó en seco.Gracias a Dios..