Sirlefalk hace 8 horas en La venganza será terrible del 03/10/2013 dijo (entre otras cosas), algo que me dejo pensando: "...tengo miedo que se me caiga un ídolo." Y yo pienso: amigo, ese es el riesgo de idolatrar...
Justamente, en el comienzo del programa de ayer (7/10/2013), Dolina abre con un tema que se relaciona con la necesidad o la dependencia a ciertos ídolos y al saber que ellos poseen; expresando una cierta decepción, también; refiriéndose a personas que él admira (o admiraba), que lo han defraudado.
La critica comienza así: ( a partir de 4'10'') "Qué poco saben los hombres sabios en Argentina!"
Luego siguió: "El saber ajeno es algo que te ampara"; y después: "Cuando uno ve que algunos lugares llenos de honor, de prestigio, son ocupados por gente de menguada sabiduría, uno se asusta muchísimo"
Y: "Aquellos que deberían protegerme no están en condiciones de proteger a nadie y eso me asusta muchísimo."
Seguidamente, Dolina cambio de foco geopolítico, hablando del mismo mal; pero en los países sajones. Hablo del "idealismo Wilsoniano"; una idea por la cual, a un pueblo ignorante debían gobernarlos hombres sabios, aunque fueran pocos.
Para Dolina, esos hombres "son un grupo de dementes funcionales al poder del imperio. Eso mete mucho miedo. Eso ya no es la democracia"; y termino concluyendo que, "salvo en algunos países emergentes (cuales?), donde por la influencia de ciertos deseos de emancipación nacional suelen aparecer otra clase de formas políticas (cuales?), eh, no hay otra cosa que esto"
(infiero que Dolina se estuvo refiriendo a gente que ocupa cargos en lugares académicos y de difusión, pero también otros, que detienen poder político, en los gobiernos)
La poliarquia es también el caso aquí en Francia, donde la educación, si bien es teóricamente gratuita y accesible a todos, es elitista; y son esas "élites", quienes ocupan altos cargos en las instituciones.
Y es lógico ; esta claro que es deseable que sean personas capacitadas quienes dirijan los destinos de la gente.
Para mi, ese no es el problema.
El problema no es la falta de saber, de conocimiento, de preparación intelectual; sino la falta de valores morales, que desembocan inevitablemente en desatinos y en corrupción; provocando decepciones y temores.
Creer que solo realizar altos estudios, negándose a considerar el aspecto espiritual de la vida, otorga la llave de La Sabiduría, es un error.
Yo coincido con el rey Salomón, quien decía que « el temor de Dios es el principio de la Sabiduría »; que se adquiere practicando una estrecha relación con el Creador; y no me refiero ni única ni especialmente, a participar solo en una comunidad religiosa; siendo necesario también, establecer y ejercer una relación cotidiana con la Divinidad.
Por supuesto que la espiritualidad y la Fé no descartan ni se oponen al conocimiento científico ni al arte ; lo completan dándole el verdadero sentido. De nada sirve poseer todo el conocimiento del universo y no saber para que sirve. Tener una biblioteca no garantiza el conocimiento ni mucho menos la Sabiduría, que no es mas que La Verdad.

Si solo confiamos en la sabiduría de Hombres, viviremos la decepción, una y otra vez ; es inevitable. Los ídolos, tarde o temprano, fallan, uno tras otro, sin excepción. Todos fallamos ; cuanto mas quienes son elevados por otros al rango de élites, de ídolos.