El amor no es imperfecto : el amor es un dios y el ángel está hecho de amor, hecho de dios.
No se "tiene" amor; el amor toca, visita, habita, es la mano en el guante del ser vivo, en el cuerpo animado; compone si hay que componer, sana si hay que sanar. A veces se queda bastante tiempo, tanto que impregna hasta fusionarse, hace del ser "su medio" - pero ahí entramos en el terreno de la santidad, de las Madre Teresa o los San Francisco o las Clara, es otra cosa - No hay amor imperfecto, el concepto de perfecto es usado para que el humano "entienda" por comparación de qué se trata. El concepto de "imperfección" es hijo de la materia en funcionamiento no de la energía.
Así que ningún hombre o mujer está dispensado de nada.
La ironía no es propia del amor en todo caso.
"Al presente vemos como en un espejo y bajo imágenes obscuras..."
Así que un acto de amor es dar claridad, hacer claridad, buscar claridad... Y donde se la halle, no obscurecerla.
El amor humano por lo tanto, lo máximo que puede ser es : un adimensional y transfigurado acto de reflexión. ver lo que miramos como nunca fue visto. Mirar en estado de salto.
Luego, podemos sentarnos en el suelo e intercambiar cosas mundanas. Hasta que el amor arrebata a otra instancia. Obedecer o no, querer o no, tiene sus efectos.
Cuando hablar sobre el tema avergüenza, es que se está fuera de tiempo y lugar.

"Si no tengo amor, no soy nada." Carta de San Pablo a los Corintios 13:1
2 de septiembre de 2011 a las 10:19

" Aunque yo hablara todas las lenguas de los hombres y de los ángeles, si no tengo amor, soy como una campana que resuena o un platillo que retiñe.

Aunque tuviera el don de la profecía y conociera todos los misterios y toda la ciencia, aunque tuviera toda la fe, una fe capaz de trasladar montañas, si no tengo amor, no soy nada.

Aunque repartiera todos mis bienes para alimentar a los pobres y entregara mi cuerpo a las llamas, si no tengo amor, no me sirve para nada.

El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no se envanece,

no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tiene en cuenta el mal recibido,

no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad.

El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.

El amor no pasará jamás. Las profecías acabarán, el don de lenguas terminará, la ciencia desaparecerá."
Este texto es para usted Daniel, ya que lo citó. Pero, cuando usted usó el término "grosero" no habló de la carta, dejó filtrar algo personal.

Un pequeño Evangelio impreso en Barcelona, me regalaron cuando me recibí de maestra - un librito que en la portada tiene el báculo como base de la cruz, dorado sobre rojo. Allí dice "no se huelga de la injusticia, complácese sí en la verdad". Cuando dejamos de hablar para dios y comenzamos a hablar para los hombres la falsedad -aduladora ignominiosa-, dice que viene a perfumar y embellecer el soplo... Y el aire se llena de sonidos no identificables y son lo mismo, arpa, flauta, trompeta, nadie sabe para qué suenan... "Sed niños en la malicia, pero no en el juicio. Y en la conducta, varón y mujer maduros".
Ah...Daniel : no lo "corregí" mencionando la v ; quise recuperar el signo lingüístico de nuestro ilustre Dr. Ignacio Pirovano, nacido en el barrio de Belgrano -disculpe la rima involuntaria-, aunque también rima con las menciones de Dolina, porque parece que Pirovano gustaba del humor pesado, era un fuerte bromista.
Dejo por aquí algún error ortográfico y de otra clase seguramente. :)