Carlos,
Simplemente es una sensación a partir de lo que justamente comentás respecto de las intervenciones de Barton y de la aparición de este supuestamente gracioso Cabito. Hoy me costó muchísimo escuchar el segmento de humor, por ejemplo, que si no hubiera sido por el remate de Barton (trivial pero necesario, porque la cosa no iba ni "patrás") hubiera naufragado sin remedio. Me da la sensación de que la única opinión que importa es la del Negro, y que se privilegia el humor fácil frente a los comentarios de un tipo que sabe de medios y que habla de lo que sabe. Un tipo cuyo ritmo es el de la argumentación más que el de la conclusión terminante. Pero es cuestión de gustos, claro.
No me horroriza que en los medios hable cualquiera al que se le pone un micrófono adelante. Eso pasa acá y en la China, te lo aseguro. Sí me jode que pase en el programa de Dolina. Para mi gusto personal, estuvo muchísimo más divertido, interesante y jugoso el programa que hicieron Dolina y Barton solos, pero como bien dice Diego, el capitán manda. Y el día en que el capitán decida que en la estructura debe dejar de haber contrapesos, dejaré de escuchar el programa y pondré un poco de música, y no habrá pasado absolutamente nada malo. Y nadie se va a morir y los teatros se seguirán llenando.
Dolina ha dicho varias veces, y me gusta que así sea "detrás de esto que hacemos hay mucho trabajo". Hoy, ayer, eso no se notó. A mí me gusta cuando la cosa es fresca pero pulida. Otra vez es cuestión de gustos.
Ni pienso escuchar audios antiguos porque, como dice Erika parafraseando al Negro "todo tiempo, por pasado, fue peor".
Saluditos