Lo que paso es que ni bien termino la emisión, todos nos levantamos al mismo tiempo, y Dolina, Barton y Dorio se mezclaron entre la muchedumbre; mi mujer y yo solo pudimos llegar a saludarlos, darles la mano y decirles gracias; eso fue todo.
Nosotros salimos de la Casa Argentina y cruzamos la calle para tomar algo en un bar. Al salir, 40' después, agarramos el coche y yéndonos, pasamos enfrente de la casa, y fue ahí que vimos a Alejandro en la vereda, manos en los bolsillos, charlando con alguno.
Pensé en parar y bajarme del coche, pero no daba...
Para nosotros ya era tarde y todavía teníamos que hacer 120 kilómetros de ruta.
Pero no te niego que me hubiera encantado ponerme a hablar con Dolina!
Vos pudiste hacerlo alguna vez?