Mariano,... no me molestó. Sólo te aclaré que me gustaría alguna vez abrir el diálogo y no quedarnos en el intercambio personal de elogios o, exabruptos vacíos; anhelo la casa de la madurez, ir más allá de las habitaciones convencionales. Tal vez trabajar con niños que reflejan al adulto deformado, reflejo que a su vez los deforma, me lleva a la encrucijada de guardar en cuarteles de invierno la palabra, retirar la mano viendo cómo el abismo es rellenado groseramente y ninguna civilización antigua surge deslumbrante y sabia de él, levitando; lo que sería inútil como sobre un terreno rellenado con basura un cerebro de cristal de roca, su vibrante nota, su revelación se ahogaría.
Pero no, como Quijote insisto en velar las armas, en darle a las armas más de lo que tal vez son y que le sea reconocido : mi espada de lata, la palabra.
No dejes de escribir, trata de no permitir el olvido del glorioso manco de Lepanto y el reverbero de cristal de roca, que es la identificación del Niño. No dejes de escribir por nada ni por nadie : eso sí sería un insulto, que yo motivara bajeza semejante.
Releé o no : dije, deja el enfoque literario (ya ves, no soy una escritora) y mi persona; toma, si quieres, lo que digo para ver si llegamos a alguna parte o si sólo jugamos caminando en círculos, toma al ser o la energía que vive en lo que digo, el cuerpo de la palabra. Y si consideras que no vale para tanto, que no mueve tal actitud, entonces sigue conversando con tus compañeros. Y yo leeré como casi siempre y de vez en cuando diré algo, cuando lo que sienta sea imperativo.
No contradigas ni arruines tu grata opinión de mí con tu explicación última, como si hubieras creído o sospechado (además de la certeza de que te tomé a mal) que mi "forma barroca" es la máscara defectuosa de un rostro peor,... pues me convierte en un objeto de crítica literaria cuando soy un sujeto de crítica moral y, esta última no puede existir entre personas que no generan causa porque en el universo de los cuerpos y el espacio no se relacionan, no llevan al otro, la otra, en su vida, no cargan, no sostienen lo que el otro, la otra es, al punto de ser parte y gestor de una - por pequeña que fuere - metamorfosis cotidiana y personal... Por eso suavemente reproché : - Mariano, hazte amigo de mis palabras, míralas a los ojos (ellas también los tienen). :) :(
Te deseo la bendición de la Luz compañera.
Y me gustó mucho la canción y el sentido.
Viyi el viernes, 22 de abril de 2016 a las 03:31 AM
en La venganza será terrible del 19/04/2016 dijo: