La persistencia del pasado (por llamar de alguna forma al recuerdo con pruebas, por ejemplo los programas grabados ;) ) atenta contra esa idea que quiere implantar Dolina de que somo siempre distintos, lo que somos hoy no es lo que vamos a ser mañana ni lo que fuimos ayer, idea que puede sonar poeticamente linda pero que logicamente no tiene sustento.
Somos los mismos, quizá hagamos cosas diferentes pero nuestra esencia es la misma, no solo somos lo que hacemos, hay una esencia del ser que trasciende, inclusive, a nuestras mas notorias contradicciones ;)
Como oyente puedo disfrutar de los programas viejos como de los nuevos, debe ser percibido de otra forma por el que hace los programas, por eso creo entender (mas no justificar) el pensamiento de Dolina, ojalá deje de quejarse por cosas como estas y vea que esa misma actitud quejosa es mucho mas criticable...
Saludos.