... Besos, sin duda. Es que uno es de otra época, cuando el primer beso se daba con temor, más bien se pedía. Abrazar se abraza al hermano, al amigo, hasta a la psicóloga te abraza. Pero besar... Ay, el beso que no llegaba nunca hasta el momento en que llegaba, el corazón latiendo a mil, y el no saber hasta dónde se iba a llegar a partir de ahí. El saber que se ha franqueado una barrera, que se está pisando otro terreno.
Besos, sin duda.