No salimos de la razón de la sinrazón que a mi razón se hace, de tal manera mi razón enflaquece. Cuesta no enojarse con alquien que escribe así:
El futuro no ha llegado todavía, pero no es por eso menos necesario que el pasado, porque el pasado no ha devenido más necesario por el hecho de que haya sucedido, sino que por lo contrario ha demostrado en ello que no era necesario.
El traductor no entendió una goma, para decirlo mal y pronto, o K. era flor de pelmazo y mistificador. Entre los de apellidos difíciles, mejor Wittgenstein:
Si algo puede decirse, entonces puede decirse claramente.
Huelga agregar que a Wittgenstein tampoco se le entiende ni jota, pero al menos era sincero. Sobre la inmodificabilidad del pasado me quedo con un diálogo de Leo Masliah. La mujer le pregunta al hombre si él antes la quería. El hombre le dice que sí. Entonces la mujer le pregunta: ¿y ahora? El hombre le contesta que ahora también. "Entonces casémonos", le dice la mujer. "No, no, no, no me entendiste", le dice el hombre, "Lo que quise decir es que ahora también te quería".