"...también sé que no me odia, que no puede odiar..."
He decidido no odiar. Conozco el odio y sus máscaras, conozco el amor y sus máscaras. Lo que no me permito llevar al acto, lo intelectualizo; allí se purifica, el embrión metafísico sobrevive claridad, o muere. Desde que sus ojos me miraron y miré en sus ojos y toqué la máscara -tiene los rasgos hermanos de la locura y es el útero guarida de los monstruos su raíz de fuerza ciega - sé que puedo no odiar.
Usted eligió el foro, usted dijo "venga a escribir a este rinconcito" y cuando usted habla de "gratuidad y gratitud", cuando habla de la intimidad y lo privado, nuevamente usa mis palabras. Cada uno percibe lo que puede : usted no es consciente de su propia crueldad.
Mi "nido" amigo, es mi pecho...
Hay algo lujurioso en mis palabras, que surge de mi sensualidad- la poesía es el erotismo de los templos-... no concupiscente.
En todo caso, de serlo, lo sería como lo fui durante años en un correo que creí privado, con un hombre que creí con la capacidad de respetarlo ( aunque no lo compartiera )... de comprender sus implicancias - sabría qué hacer con ese algo desamarrado del mundo, desamarrado de toda fórmula agotada, desamarrado de la historia de la experiencia , sabría qué hacer con el brillante entusiamo del salto desconocido empujado por una estrella,...sabría el intento de ser la unidad del testigo, el observador y lo observado, la renacida criatura feliz y la pura vida, ...comprender que el universo nos ayuda, pero somos los hombres y mujeres los que creamos o destruimos milagros.
Yo fui como la voz. Y sólo he clamado en el desierto. No un espectáculo.

Algo así como haber nacido ... y proclamar la pena de muerte y el aborto, la esterilización y la lógica sin dios de la máquina inhumana.
Anoche estaba perjudicada, con ese frío horrible de la fiebre y el fuego en la cara. Pero esta mañana fue a la escuela.