A ver si me sale
Yo creo que al público de Dolina hay que dividirlo en tres sectores por las épocas en que lo empezaron a escuchar.
El primero en el que estoy yo son los que lo encontraron una noche por mitad de los ochenta asombrandose que era el mismo Dolina que escribía en la Revista Humor y encontramos un programa totalmente distinto a lo que habia hasta entonces , incluyendo que se lo podia ir a ver a los estudos de Radio El Mundo sentados em el piso. Los que lo ibamos a ver eramos los típicos jóvenes idealistas peronistas de los ochenta, diría el 70 %, casi todos militando en alguna unidad básica, sabiendo que el lo era también, esperando que en programa siempre alguien le pidiera que tocará la marcha del deporte, sabiendo que empezaba tramposamente como la.marcha peronista pero terminaba como la marcha del deporte
Así de ingenuos éramos....
Este tipo de gente creo es al que no le gusta este tipo de segmento musical porque estaba acostumbrado a otro tipo de segmento, uno que se interpretaba solamente con un pianito eléctrico con 4 o 5 compases y el público quería llegar al final para despedir el programa cantando " el solero colorado '
Después está el sector que se incorporó por la última etapa del menenismo. Este público se encontró con la mejor época de Dolina, con un programa consolidado que llenaba teatros todas las en la Capital. Era un público más masivo, más heterogeneo, tal que lo podía ver un tipo de derecha, de centro o de izquierda, incentivado más porque Dolina trataba de no inmiscuirse tan directamente en política en sus programas, o lo hacia muy sutilmente ( aunque la gente sabía que era peronista la que no lo era no le importaba escucharlo o ir a verlo porque el programa trataba de no entrar en esos temas, me pasaba a mi con muchos amigos )
El programa se tornaba ya ma artístico pero sin perder la espontaneidad del principio pero se notaba el paso de los años y la experiencia. Como dije la mejor época
Y por último tenemos a los que se incorporaron ( y acá me sale mi antikircherismo proverbial mío pero que como ustedes verán ya no utilizo hace tiempo, ósea desde que cayó en desgracia la susodicha para no hacer leña del árbol caido) en la etapa Kirchnerista, muy progre politizado , fanático, el típico pensas igual que yo y estas conmigo o sos un facho antipatria. A esto entró también lamentablemente Dolina, generando en su público algo que nunca había sucedido, una grieta, como en el país mismo.
Y el público cambió. Ahora se ríen de los chistes de doble sentido, de que verduguea al que piensa distinto que el ( tanto en política como en cosas se la vida) , de que se tira contra los comerciantes de clase media ( siendo el también ahora un comerciante ) y se banca también al trio sin nombre sin saber porque. Para los de la primera época obviamente el programa termina cuando empieza el segmento musical . El pianito y las voces de la gente esperando la marcha del deporte y el solero colorado ya es historia