Toda esta discusión está muy linda. Debo decir que estoy de acuerdo con dosmásdos y con Misterix. Lo contradictorio de Dolina no me parece ni bien ni mal intencionado, aunque todo comentario sí que tiene intención. La contradicción es inherente a la persona mientras que la intención es inherente al comentario.
Fuera del tema de la multa y de la discusión política, que ya se ha masticado acá bastante y muy bien, a mí me está llegando (será percepción retorcida, tal vez) lo del método como herramienta para combatir la credulidad -o la llana estupidez- aplicado a la información. Desconozco el tema y solo puedo tocar de oído, pero creo vislumbrar algo en lo que dice dosmásdos sobre lo particular como síntoma. Por supuesto que los medios no pueden ocuparse más que de mostrar los síntomas, y en todo caso mostrar análisis fundamentados que lleven de ahí a lo general.
El método debería ser lo abierto, lo transparente. El conocimiento del método por parte del que consume la información haría que las intenciones fueran manifiestas. Sostengo que "no escuchar con aprobación abierta" es algo que se aprende, que debe enseñarse, que ahí está la clave que permitiría que fuéramos mejores. No se puede joder fácilmente a una sociedad crítica. Sólo se puede tener éxito con la demagogia (políticos) o con la falacia (medios) ante una audiencia que compra todo con los ojos cerrados.
En definitiva, estoy abundando en lo que Marcelo resume con "vigile, vigilen". Claro que sí!! Y si, entre la poesía y la indignación, la risa y la música, lo anecdótico y lo general... si entre todo esto, digo, hay un mensaje de Dolina que siempre me pareció claro es que si hay algo en él que no cambia es su lucha contra la estupidez.
Saluditos