Mitología nórdica: La misión de Hermodr para rescatar a Balder

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0:00:24 del fútbol del mundo, diría yo.
0:00:26 Aquí está, esta noche aquí, don Ángel Capa.
0:00:28 Que ha venido, punto a su esposa.
0:00:39 Espero que no se haya marchado ya.
0:00:41 No, no, ya está.
0:00:42 Tuviese un hombre de muy buen gusto.
0:00:44 Y temo que se haya retirado.
0:00:50 Bien, ¿sabías que ingresando a www.gov.gba.gov.ar, ¿pode saber si cometiste alguna infradicción
0:00:59 por exceso de velocidad en las rutas provinciales?
0:01:04 Solamente con ingresar tu dominio del auto, o sea la patente, o tu DNI sabrás si tenés
0:01:09 una multa y podrás imprimir el talón de pago para abonarla.
0:01:14 www.gov.gba.gov.ar.
0:01:16 Hablaremos de un asunto relacionado con los dioses nórdicos.
0:01:27 En la mitología nórdica, el más amado de los dioses era el hermoso Baldr, hijo de
0:01:36 Odín y Friga.
0:01:38 Como hemos contado muchísimas veces, Baldr era casi impulnerable.
0:01:44 Todos los elementos del universo habían jurado no dañarlo.
0:01:49 Sólo un elemento podía herirlo.
0:01:53 Era una planta, no demasiado importante, que no había prestado el juramento por un descuido.
0:02:00 El muérdago.
0:02:02 Ahora bien, enterado de esa excepción, Loki, el dios malvado o travieso, fabricó con el
0:02:10 muérdago una pequeña flecha y se la entregó al ingenuo Hodur, el dios ciego.
0:02:17 Hodur estaba en medio de una fiesta sin participar y esa fiesta, esa cuerga, consistía en arrojarle
0:02:25 cosas a Baldr para probar su invulnerabilidad.
0:02:29 ¿Qué hace una divinidad ingenua una vez que se ha enterado de que es invulnerable?
0:02:36 Pone a prueba su invulnerabilidad.
0:02:39 ¿Qué haría usted con una invulnerabilidad nueva recién estrenada?
0:02:45 Hacerse tirar balazo por sus amigos.
0:02:48 Todo el tiempo, ¡flecha!
0:02:50 ¡Mira, no le pasa nada!
0:02:52 Empiece más liviano, por las dudas.
0:02:57 El caso es que sabiéndolo que el muérdago podía dañar a Baldr, le dio, como hemos dicho,
0:03:05 a Hodur una flechita y hizo que se la lanzara o al dios.
0:03:12 Le pegó con la flechita de muérdago y para dolor de todos los dioses,
0:03:18 Baldr cayó muerto.
0:03:22 Cuando Friga vio que su hijo estaba muerto, rogó a los dioses que fueron hasta Nielfelsheim,
0:03:29 la tierra de Hel, el infierno, en lugar de la diosa de los muertos,
0:03:34 para implorarle a esta diosa que liberara a su nuevo habitante,
0:03:41 ya que el mundo no podía existir felizmente sin Baldr.
0:03:44 Le muere el tipo y dice, bueno, vamos a hacer una comisión y vamos a ir hasta el infierno,
0:03:51 a ver si la diosa que allí regna...
0:04:01 ¿Captad?
0:04:02 Yo pido perdón por molestar las risas de alguien con esto que llamamos el progrado.
0:04:12 Pero prometo callarme si quieren, así se pueden reír con toda tranquilidad.
0:04:22 Bien, en eso quedamos.
0:04:26 Vamos a ir hasta el infierno a ver si lo rescatamos.
0:04:29 Como el camino era extremadamente difícil, ninguno de los dioses se ofreció a ella.
0:04:34 Ahora bien, cuando Friga prometió que ella y su marido Odín
0:04:38 recompensarían al mensajero amándole por encima de todos los dioses,
0:04:43 entonces apareció Hermod y mostró su disposición para realizar el viaje,
0:04:49 para ayudarlo, Odín le prestó a Hermod su caballo, el famoso caballo Slypnir,
0:04:56 aquel que tenía ocho patas y que conocía el camino del infierno porque ya lo había hecho algunas veces.
0:05:02 Bueno, se preparó Hermod para su salida, para ir a la tierra de los muertos,
0:05:07 mientras tanto Odín ordenó que el cuerpo de Baldr fuera puesto en una pira
0:05:13 en una barca sobre el Marta, como hacen los nórdicos.
0:05:16 Cuentan que uno tras otro los dioses se acercaron a la orilla a despedir a Baldr
0:05:21 y la esposa de Baldr, Nana, se encorbó para besarlo, pero se rompió su corazón.
0:05:27 En ese momento, y cayó sin vida allí junto a él,
0:05:31 bueno, los dioses dijeron, ya está, la situaron al lado de su esposo
0:05:34 y lanzaron aquella pira a las aguas, tal cual era la costumbre lúdica.
0:05:38 Y allí ardieron juntos Baldr y su mujer.
0:05:41 Los dioses regresaron tristes al Asgard, solo Friga albergó alguna esperanza
0:05:47 y se puso a guardar el regreso de Hermod, que ya estaba penando en el camino.
0:05:53 A Hermod le decían el Velós, tardó nueve días en llegar hasta el río Gjöl,
0:05:58 que era el límite del Niflheim con la tierra de los vivos.
0:06:03 Sobre este río se erigía un puente de cristal, el puente Gjallar,
0:06:08 enmarcado con oro y sostenido por un solo pelo, por un cabello,
0:06:13 tan delicada era la ingeniería de aquel puente.
0:06:16 Lo custodiaba el horrible esqueleto Modgud,
0:06:19 que hacía que todos los espíritus pagaran un peaje de sangre
0:06:23 antes de que se les permitiera el paso.
0:06:26 Los espíritus cabalgaban o surcaban el puente sobre los caballos
0:06:30 o las caretas en las que se había quemado la pirafuneralia de los muertos.
0:06:35 Los nódicos eran muy cuidadosos.
0:06:38 A la hora sabe de que calzar los pies de los fallecidos
0:06:42 con un par de zapatos resistentes, que se llamaban zapatos de gel, del infierno,
0:06:47 para que no tuvieran que sufrir en el largo viaje a través de caminos accidentados.
0:06:53 Después de traspasar el puente Gjallar, los espíritus llegaban a Iron Vod,
0:06:58 donde no había nada excepto árboles desnudos con hojas de asiero.
0:07:03 Tras dejarlo en ese paraje, bueno, se llegaban a las puertas de gel
0:07:09 famosamente custodiada por el perro Garmr,
0:07:14 y allí dentro de la puerta, lugar de frío y oscuridad completa,
0:07:21 se oía hervir la gran caldera Bergelmil y el correr de ríos como el Leiter
0:07:28 y el Slid sobre el cual flotaban millones de espadas.
0:07:32 Luego podía verse el Bidner, el palacio horrible de gel.
0:07:36 Hasta así iban a parar aquellos que habían sido lo suficientemente desgraciados
0:07:41 como para morir sin haber derramado sangre propia o ajena.
0:07:45 Es decir, no morir en batalla era peor que ser malo entre los biquets.
0:07:51 Y el tipo que moría en su cama iba a limpiarnos, junto con el que había sido un delincuente.
0:07:58 Muchos hombres optaban, por ejemplo, por cortarse con sus lanzas,
0:08:02 arrojarse desde precipicios o quemarse vivos para poder terminar en la gloriosa morada de los dioses,
0:08:09 el Valhalla, del cual ya hemos hablado.
0:08:11 Bueno, a los que les tocaba ir al infierno, al Nifolheim,
0:08:14 tras sufrir incontables agonías, eran arrojados a la caldera presitada
0:08:20 donde para peor había una serpiente que se alimentaba de los huesos de los que allí lanzaban,
0:08:26 bueno, está claro que era feo.
0:08:30 Todo eso vio y atravesó Jermod hasta encontrar a Balder y a su esposa Nana
0:08:35 que ya habían llegado al infierno.
0:08:37 Estaban justo ahí, juntos en la sala de banquete, desde el infierno.
0:08:41 Balder parecía un poco abatido, vio como si uno, cuando va al infierno.
0:08:44 Ah, sí, no sos el mismo.
0:08:46 Estaba contemplando un jarro de agua miel del que era imposible beber.
0:08:52 Todo fue por la propia malevolencia de los empleados infernales.
0:08:57 Jermod le dijo a Balder que había llegado hasta así para rescatarlo.
0:09:02 Balder le dijo que eso no era posible y que su lugar estaba allí y que no había nada que hacer.
0:09:09 Pero eso sí le dijo, tratado de llevar contigo a Nana, mi señora esposa,
0:09:13 porque este lugar de sombras no es lugar para una mujer hermosa.
0:09:17 Y a Diana escuchó esa petición, se aferró más a Balder
0:09:20 y juró que nada lograría separarla de él y que permanecería junto a su amado,
0:09:26 incluso en el infierno, 70 páginas de mala literatura.
0:09:30 Pero Gell, la dueña del infierno, escuchó la conversación
0:09:34 y declaró que permitiría a sus nuevas víctimas marcharse a condición,
0:09:40 siempre hay una condición, y es en la trampa,
0:09:44 a condición de que todas las cosas animadas e inanimadas lloraran por Balder.
0:09:51 Repito, podrán irse del infierno si todas las cosas animadas e inanimadas del mundo lloran por Balder.
0:10:01 Esa condición llenó de esperanzas a Jermod porque toda la naturaleza lamentaba la pérdida de Balder
0:10:07 y seguramente no habría nada en la creación que negara el tributo de una lágrima.
0:10:12 Así, contento, Jermod salió de Nifflheim y regresó a las Gards a la morada de los dioses.
0:10:18 Bueno, los dioses se reunieron en la Asamblea, alrededor de Jermod, escucharon la condición,
0:10:24 se enviaron mensajeros a todas partes para ordenar, para pedir,
0:10:28 pero también para ordenar que el mundo llorara.
0:10:32 Cuentan que al paso de los mensajeros caían lágrimas de todas las plantas y de todos los árboles,
0:10:39 de los metales, de las piedras, de los hombres y hasta las propias aguas consiguieron hacer visible su salto.
0:10:48 De camino de vuelta hacia las Gards, los mensajeros vieron a currucada, a una vieja,
0:10:55 en la puerta de una cueva, una gigante vieja de nombre Thok,
0:11:02 que algunos mitógrafos creen que era el propio Loki, disfrazado.
0:11:09 Cuando se le pidió que derramara una lágrima, la vieja se burló
0:11:15 y, metiéndose en los oscuros nichos de su cueva,
0:11:20 declaró que nada caería de sus ojos y que a ella poco le importaba que Hel retuviera a su presa para siempre.
0:11:30 No lloró la vieja.
0:11:33 Tan pronto como los mensajeros llegaron a Asgard, los dioses se congregaron a su alrededor para conocer el resultado de la misión.
0:11:42 Sus rostros estaban iluminados con la alegría de la anticipación,
0:11:46 pero se oscurecieron cuando supieron que una criatura, una sola, había rehusado el tributo de las lágrimas.
0:11:55 Y por ese único santo ausente, Balder y Nanna jamás regresaron a los cielos.
0:12:04 Bejísima historia, Alejandro, y tristísima historia.
0:12:08 Ahora, estaba pensando que, bueno, la desaparición de la becesa en general es una mala noticia,
0:12:16 pero también estaba pensando que hay una forma de acercarse a esta historia que usted acaba de contar por dos vertientes.
0:12:22 Estaba pensando en Balder y su mujer como dos amantes, y está bien.
0:12:25 Pero en ese caso quizás no debiéramos pensar en tantas lágrimas y tanto llanto.
0:12:30 Bien nos ha enseñado Dante, nuestro amigo Alighieri, que paole franquezca en el infierno.
0:12:35 ¿Quién sabe si estarían sufriendo el infierno?
0:12:37 Porque para dos amantes el lugar no está juntos, nunca es el infierno.
0:12:40 Y del mismo modo probable...
0:12:42 Sito del libro del cielo y el infierno una inscripción en la lápida de Eva,
0:12:51 que dice, el paraíso estaba donde ella estaba.
0:12:56 Bien, exactamente esa es la historia.
0:12:58 Y lo es socioso entonces que Balder, además un héroe en el sentido occidental de la palabra,
0:13:03 haya pedido que sea su mujer la salvada, y por supuesto, esto tampoco era posible.
0:13:08 No había una solución bella para un asunto tan triste.
0:13:11 Pero estoy pensando también que para los nórdicos Balder es algo más que un príncipe,
0:13:17 algo más que heredero de la pareja de jefes, de los dioses.
0:13:20 Es un bien común. Balder es la belleza del mundo. Balder es un bien del que disfruta,
0:13:24 no solo la familia real de los dioses, sino el mundo todo.
0:13:28 Y entonces creo que ahí está la otra enseñanza posible de esta historia,
0:13:31 porque hay cosas que parecen malas y en realidad no lo son.
0:13:35 Les da una vuelta de tu alcapar los guerreros nórdicos y el balzada.
0:13:39 ¿A qué iban? Iban a pelear.
0:13:41 A pelear y a morir cada día. Resucitar a la mañana siguiente.
0:13:44 Resucitar a morir y a morir, que es una forma interesante de entender el cielo
0:13:48 para aquellos a los que nos gustan el trabajo.
0:13:50 Pero digo, a lo que combate es un bien común. No son solamente malvados.
0:13:54 Al más malvados son tontos, porque ellos mismos están siendo presas de esa maldad.
0:13:58 Y a veces es mejor enfrentar a un malvado que un tonto, porque un tonto
0:14:01 nunca se sabe para dónde diablos va a reaccionar.
0:14:04 En este caso fue un distraído o un tonto, aquel que usó Loki para poder ir mortalmente a Balder.
0:14:09 Pero digo que cuando ese tipo de seres sean gigantes y también muchas veces seres humanos
0:14:15 se oponen a la felicidad de todos, se oponen al bien común,
0:14:19 se oponen a que haya justamente algo que haga mejor la vida.
0:14:22 Entonces están cometiendo un doble pecado, porque además les está privado no sólo la belleza,
0:14:27 sino el triunfo de esa maldad. Esa maldad no hace desaparecer la belleza,
0:14:31 los privados de un estadio superior.
0:14:33 Y en ese sentido, cuando uno sufre noblemente, tampoco debe preguntarse a quién le puede importar.
0:14:38 Porque realmente digamos que la importancia de eso es lograr que en una comunidad
0:14:42 esa felicidad esté compartida, repartida entre todos, y cuando algún miserable se niega,
0:14:47 entonces es él el que tiene que hacerse esa pregunta y saber que está condenado para siempre,
0:14:51 cuando es uno el que le niega la felicidad a todos.
0:14:54 Y ahí sí, a quién le puede importar.
0:14:56 Y a quién le puede importar es el nombre de la canción que vamos a escuchar ahora.
0:15:01 Es un bello tango, casi desconocido, de Mariano More.
0:15:05 Tiene todas las virtudes, pero una desventaja.
0:15:09 La grabación que oiremos, estoy cantando yo, con Federico Miroje y un quarteto de Cuerdos. Adelante.
0:15:39 Tu gangoso sol, hace mas onda a mi pena, con tu biruta sentimental, vas enredando mi viejo mar,
0:15:55 un viejo mar que me ha dejado enamorado, arrinconado, dio el bizado para siempre,
0:16:05 sin una sola caricia que me tiriste y sabití que su risa mala me persigue y me persigue,
0:16:17 mientras sigue tu responso cuando neos.
0:16:23 A quién le puede importar, llevando neos si he sido bueno.
0:16:33 A quién le puede importar, el novedor del maragelo.
0:16:43 Si a esa que mueve ilusión, no le importo mi abatimiento.
0:16:53 A quién le puede importar, llevando neos mi sufrimiento.
0:17:10 Suena veloz gris, tango para mi, si es que jamás se la encuentro,
0:17:21 te saldré a bailar para distrazar el drama que llevo adentro.
0:17:30 En otros brazos me engañaré, en otras bocas me atún,
0:17:38 aunque sus ojos y su risa me persigan y me sigan y me digan que la quiero.
0:17:48 Iré a borrar el fantasma de aquel amor siempre atento.
0:17:57 Así termina el lamento y el tormento de este cruento sufrimiento bandoneo.
0:18:07 A quién le puede importar, llevando neos si he sido bueno.
0:18:17 A quién le puede importar, el novedor del maragelo.
0:18:27 Si a esa que mueve ilusión, no le importo mi abatimiento.
0:18:37 A quién le puede importar, llevando neos mi sufrimiento.
0:18:57 Era Alejandro Dolina, la venganza será terrible, a quién le puede importar.