Transcripción automática
0:00:00 Vamos a hablar esta noche de oradores griegos.
0:00:10 Laboratoria nació probablemente de la sofística y en la confección de discurso los griegos
0:00:19 fueron siempre los mejores.
0:00:21 Claro, la sofística se solazaba incluso en defender posiciones opuestas con igual
0:00:28 destreza. No les importaba si lo que uno defendía era verdadero, sino más bien la destreza con
0:00:37 que lo defendía.
0:00:39 Laboratoria nació un poco y así.
0:00:42 Los discursos fueron evolucionando.
0:00:46 Había una fuerza que empujaba esta evolución.
0:00:48 La misma fuerza que está presente en todos los actos griegos es la fuerza agonal, la
0:00:54 verdad de la competencia. De todo hacían los griegos una competencia.
0:01:00 La competencia sin encono, el gusto de medirse para ver quién es mejor.
0:01:06 Y la oralidad estaba destinada también a una competencia que era la competencia judicial.
0:01:13 En tiempos de la democracia, en Atenas, cuando los destinos del pueblo lo decidían las asambleas,
0:01:18 laboratoria se volvió una disciplina importantísima y pronto tuvo sus profesores, sus enseñañas
0:01:25 a metódica.
0:01:27 Y había un arte oratorio, incluso antes de la aparición de los métodos reglados que
0:01:35 existieron posteriormente.
0:01:38 Pero con la memoria de cada caso se extinguía también la memoria del discurso.
0:01:44 No se pensaba en fijarlos, solo con el desarrollo de los tribunales populares y con la habitualidad
0:01:52 de los discursos ya se hizo costumbre.
0:01:55 Conservarlos, preservarlos, reglarlos, darse cuenta de que había patrones, de que había
0:02:02 cosas que se repetían.
0:02:04 Y allí están, aparecen los profesores de retórica, de oratoria, y empiezan a descubrir
0:02:12 que hay unas formas de razonamiento y le empiezan a poner nombre a los recursos del lenguaje.
0:02:19 Estos son los famosos tropos, ¿no?
0:02:22 Que vienen de girada, pero que son...
0:02:29 Dentro de los tropos están la metáfora, la metonimia, la sinécto, que la hipálagia,
0:02:36 la alegoría, la catacrese, la ana de plóssis, a todo le encontraban un nombre.
0:02:43 A cada figura, a cada recoveco, a cada relación que existía entre las palabras le ponían
0:02:50 un nombre.
0:02:51 Y los nombres son graciosos porque quieren decir cosas muy concretas.
0:02:56 Una hipálagia, como bien sabemos, es poner a una cosa, un adjetivo que más bien corresponde
0:03:05 a su usuario.
0:03:07 Por ejemplo, hay un guerrero valeroso y entonces es la espada valerosa del guerrero.
0:03:14 En realidad no es valerosa la espada, pero le queda el adjetivo de su propietario.
0:03:22 A nosotros tenemos, al principio del programa, esa parte que dice proféticos cuando ya
0:03:28 es demasiado tarde, valientes cuando lejanos, cobardes cuando cercanos, bla bla bla, si tal
0:03:35 cosa.
0:03:36 Todo eso se llama parisoci, ese encadenamiento de situaciones.
0:03:42 Bueno, a cada cosa le habían puesto los griegos un nombre.
0:03:48 Gracioso es aplicar esos nombres, por ejemplo, a las malas palabras y a los giros más vulgares
0:03:58 y groseras.
0:03:59 Achuscos.
0:04:00 Un presencia de una Ana de Implosis, dice el profesor, después de que el alumno hubo
0:04:05 dicho a la soberque barbaridad.
0:04:07 Pero volvamos a los griegos.
0:04:13 Muy pronto aparecieron los maestros que recomendaban para hacer el discurso expresiones poéticas,
0:04:20 aunque estuvieran en desproporción con la vulgaridad del tema tratado.
0:04:24 Con él que el asunto judicial fuera un perro que exoneraba sus intestinos en el patio del
0:04:30 vecino.
0:04:31 Bueno, se trata de un tema más bien vulgar.
0:04:34 Pero algunos, como Gorgias, por ejemplo, que era un gran maestro, recomendaban utilizar
0:04:39 todos los elementos del arte poético en la defensa, bien sea del perro o de la privacidad
0:04:46 del patio.
0:04:47 El uno diría que no hay patio que merezca que un perro sea discriminado y alejado del
0:04:53 cariño de su dueño, etc.
0:04:54 Y el otro diría que no hay perro que bla, bla, bla.
0:04:59 Para dar a su discursor nato buscaban entonces los tropos a los que hemos hecho mención.
0:05:07 Algunos se oponían a esta clase de adornos y eran enemigos de toda pompa metafórica.
0:05:15 Entre ellos figura nada menos que Tucirides.
0:05:17 Además de eludir metáforas, Tucirides eludía pompas escénicas.
0:05:22 Se mantenían pie, casi sin movimiento, envuelto en sumanto y de sí un discurso, la voz conservaba
0:05:32 siempre la misma altura y tono.
0:05:37 No se alteraba, no enfatizaba, no utilizaba muchos tropos pero tampoco cambió.
0:05:45 Se la polisaban todas.
0:05:48 El opuesto era cleón, que el tipo hacía uso fructo del cuerpo todo el tiempo.
0:05:54 Cuando decía un discurso, corría por toda la tribuna, reboleaba la túnica como soledad.
0:06:01 Dicen que se golpeaba la cadera, ¿cómo se golpearía la cadera?
0:06:04 Ah, ya sé, como un caballo.
0:06:06 Como cuando uno juega que es un caballo.
0:06:08 A mí me gusta mucho correr por la calle.
0:06:10 Arre.
0:06:11 Y voy trotando de un modo particular y mientras tanto me golpeo las caderas y las hago soñar
0:06:18 Como soledad?
0:06:19 No, como eso le hace tanto.
0:06:22 Sí, también.
0:06:23 Eso bueno, yo las hago soñar en combinación con las patas.
0:06:29 Traba, traba, traba, traba, traba, traba.
0:06:32 Cuidado que despierto una singular admiración.
0:06:35 Sí, me imagino.
0:06:36 Bueno, eso hacía Cleón, tenía esa costumbre.
0:06:41 Pero ustedes saben que el maestro de todos, el mejor, fue de Móftenes.
0:06:46 Que, este...
0:06:49 No sólo tenía un buen discurso, sino también un buen movimiento y una buena voz.
0:06:56 Ejercitaba la voz.
0:06:57 Aquel era el famoso orador que cuando niño era tarta mudo y que para curarse se ponía
0:07:04 cantos rodados que robaba de las obras en construcción en la boca y después trataba de hablar con
0:07:10 piedras en la boca.
0:07:11 Si usted cree que la tarta mudo se cura de esa manera, está completamente equivocado.
0:07:16 Pero de Móftenes lo hizo.
0:07:18 ¿Por qué lo hizo?
0:07:19 Habrá pensado si soy capaz de superar la dificultad que consiste en decir un discurso con la boca llena de piedras, etc.
0:07:29 Así se lee este razonamiento.
0:07:35 Detengámonos un poco más en otros oradores.
0:07:38 A mí me gusta este antifón, que primero se dedicó al teatro, pero le iba mal porque era mal actor.
0:07:47 Y entonces agarró y...
0:07:50 ¿Qué raro que le ha seguido mal?
0:07:52 ¿Por qué?
0:07:54 Porque era mal actor.
0:07:56 Ah, tiene razón.
0:07:59 Y se dedicó otra cosa.
0:08:01 Puso una escuela de oradores.
0:08:03 Es un cartel en la puerta que decía, se enseña oratorio.
0:08:11 Y yo ando...
0:08:13 ¿Qué sé?
0:08:15 Le enseñaba oratorio para dedicarse a los litigios o a la política.
0:08:20 Antifón fue el primero que escribía discursos para los que los necesitaban y no podían pronunciarlos eso.
0:08:28 Hasta entonces cada uno se defendía con su propio discurso.
0:08:32 Antifón empezó a escribir discursos para otros.
0:08:35 ¿Qué le pasa?
0:08:37 Me dice...
0:08:39 El vecino me afana los huevos.
0:08:42 Me mete la mano abajo del alambre, por un agujero que hizo, y me afana los huevos.
0:08:49 ¿Y qué discurso va a hacer?
0:08:51 Bueno...
0:08:53 Rujelamar contra el altísimo Torreón que en el Callao mandó Felipe Adifical.
0:09:01 ¿Después vemos cómo salieron?
0:09:03 No, bueno...
0:09:05 Aplausos
0:09:11 Bueno, se lo tenían que aprender de memoria y lo recitaban delante de Antifón, y Antifón los aprobaba o los desaprobaba.
0:09:21 Otro orador famoso fue Esquínez.
0:09:25 Esquínez, ¿no?
0:09:27 Su padre se llamaba Atrometo, y su madre se llamaba Glaucotea.
0:09:33 Era timbalera.
0:09:35 No es que jugara chinchón.
0:09:39 Tocaba los timbales en los ritos de Dioniso.
0:09:42 Esquínez tenía dos hermanos, Filócare y Afojeto, que también parece que tocaba los timbales.
0:09:51 Los ponía en el suelo, Afojeto ponía el timbal en el suelo y se agachaba.
0:09:59 A tocar.
0:10:01 Bueno, Afojeto, Afojeto...
0:10:05 Venía a tocar los timbales.
0:10:09 Antes de dedicarse a la oratoria Esquínez fue gimnasta y actor.
0:10:14 Parece que tenía una voz extraordinaria.
0:10:16 Y dice, una compañía de teatro, dice este texto,
0:10:19 una compañía de teatro lo empleó por cierto tiempo para que representara terceros papeles en las tragedias.
0:10:27 No había compañías de teatro en Grecia, lamento decir.
0:10:31 ¿Qué compañía de teatro? ¿La de quién?
0:10:33 La de Amin Castro Miranda, la de Francisco Charmielo.
0:10:37 No era un negocio tampoco, ni había una acusación.
0:10:40 No había, era distinto.
0:10:43 El teatro era una cosa incluso pública, casi todo el mundo, o todos los ciudadanos estaban casi obligados a pertenecer a un coro,
0:10:55 y los coros ensasaban obras, y todos los años se presentaban obras muchísimas,
0:11:00 y cada año había unas obras premiadas, otras no, pero era una cuestión de estado.
0:11:05 El estado se ocupaba, dice, no que había una compañía,
0:11:08 una compañía de teatro para representar, se necesita un hombre con cara infeliz.
0:11:13 No funcionaba así, había un solo teatro en un lugar tan amplio que cabían todos los ciudadanos.
0:11:20 O sea, no, no había un teatro en cada esquina.
0:11:22 A ver, que tenemos timbre cuatro, estamos representando junto con Barton.
0:11:26 Bueno, no, no era así.
0:11:28 Bueno, ¿qué quiere que le haga? No era así.
0:11:30 No, no era así, señor.
0:11:33 Esquines era el mejor de todos, pero perdió con demóftines.
0:11:40 Y entonces se fue a rodas, se exigió, así era la gente en aquel entonces.
0:11:45 Cuando te ganaban un concurso de oratoria, te exigabas.
0:11:51 Fue así el asunto, mira.
0:11:53 Este es un discurso que sobrevivió de esquines, hubo tres.
0:11:58 Las famosas tres esquines.
0:12:00 Y este es el famoso discurso que se llama Contra Tesifón.
0:12:05 Y acá no le fue bien esquines.
0:12:08 Después de la batalla de Quironea, en que los sarteníenes se fueron derrotados,
0:12:13 Demóftines formó parte de una comisión para restaurar las murallas de la ciudad.
0:12:20 Puso sus propios ahorros, que es yo.
0:12:23 Y Tesifón propuso en reconocimiento que se le diera de Móftines una corona de oro.
0:12:30 Propongo que se le diera de Móftines una corona de oro para que todos sepamos lo más canudo que es.
0:12:37 Entonces esquines se opuso y dijo en aquel discurso,
0:12:42 Contra Tesifón era el que quería regalarle una corona de Móftines.
0:12:48 Que no, que no quería, que no se la regalemos nada.
0:12:52 Pero de Móftines defendió, naturalmente, al que le quería regalar la corona.
0:12:57 Y lo defendió bien.
0:12:59 El discurso de Demóftines fue irribatible.
0:13:02 Perdió esquines, se desperró de pura vergüenza rodas.
0:13:06 Y fue a rodas y le leyó a la gente el discurso que había leído él en el juicio que había perdido.
0:13:14 Y se le fui a leer el discurso que leí el día que perdí.
0:13:19 Y se le dió, blá, blá, blá.
0:13:22 Blá, blá, blá, blá, blá.
0:13:25 Blá, blá, blá, blá.
0:13:27 Blá, blá, blá.
0:13:29 Y todo. El tipo tuvo en cuenta todo.
0:13:31 Blé, blé, lo que sea.
0:13:33 Entonces tú lo escuchaba y decía,
0:13:36 ¿Por qué has perdido con semejante discurso?
0:13:40 Y entonces esquines respondió,
0:13:43 no se admirarían si hubieran oído las respuestas de Demóftines.
0:13:48 Qué extraordinario, leer un discurso y decir,
0:13:51 ¿Cómo perdiste con él? No sabe lo que era lo otro.
0:13:56 Ya no hay esa noblesa, ¿no?
0:13:59 Hoy en día el esquines de estos tiempos hubiera dicho había acomodado.
0:14:07 Demóftines estaba acomodado con el comisario.
0:14:15 Había uno también que tenía,
0:14:18 trabajaba y tenía una tienda de consuelos,
0:14:21 un orador, un famoso orador.
0:14:24 Trabajaba consolando.
0:14:27 Cuando alguien tenía una pena,
0:14:30 venía y se le explicaba y éste lo consolaba.
0:14:33 Hablaba, a ver explíqueme qué le pasó.
0:14:35 Bueno, mire, me dejó una mujer.
0:14:38 Blá, blá, blá.
0:14:41 Lo mismo que esquines.
0:14:44 Y el tipo se consolaba.
0:14:47 Podríamos decir un psicoanalista.
0:14:50 No, pero no se consuela uno en el psicoanalista.
0:14:53 ¿Qué hace?
0:14:55 Y María se hacía...
0:14:57 Yo pensé que te consolaban.
0:14:59 Toma conciencia de sus problemas y sufre un poco más,
0:15:02 pero de forma consciente.
0:15:04 Claro, éste era Antifón.
0:15:07 Y yo me iba a decir consolador, pero me pareció demasiado.
0:15:10 Imagínate el sindicato, ¿no?
0:15:13 Tenía en Corinto, allí donde está el ritmo de Corinto,
0:15:16 una tienda de consuelos.
0:15:18 Mira qué lindo.
0:15:20 Y le levantaba el espíritu
0:15:23 a los que estaban tristes con discursos.
0:15:26 Y llegaba la gente y la escuchaba.
0:15:29 Y luego éste el asunto.
0:15:31 Minimizaba las desgracias ajenas
0:15:34 con unos discursos consolatorios.
0:15:37 Para mí, lo más importante
0:15:40 que el discurso humano ha pretendido jamás.
0:15:43 Minimizar las tristezas con discursos consolatorios.
0:15:47 Me dejó una mera.
0:15:53 Por lo menos dígame, bla, bla, bla.
0:16:04 En realidad, la mayoría de los desgraciados
0:16:07 iban a verlo porque no tenían plata.
0:16:10 Así que no podían pagarle.
0:16:13 Lo malo de esa tienda es que no tenían,
0:16:16 no era rentable.
0:16:19 No tenían ninguna rentabilidad.
0:16:22 Parecen los negocios que inventa usted,
0:16:25 que le dio tanto.
0:16:28 Por ejemplo, el delincuente,
0:16:31 que inventa usted, que le dio tanto.
0:16:34 Por ejemplo, alquilar lagartos o cosas por el éxito.
0:16:37 Bueno...
0:16:43 A mí me gustó ese que no...
0:16:46 que hacía muchos gestos.
0:16:49 ¿Cuál le gusta a usted el que hace muchos gestos?
0:16:52 Cleón o el otro? Tú sí, dides.
0:16:55 El otro es demasiado sobreactuado, también Cleón.
0:16:59 León era un poco sobreactuado.
0:17:02 Sí, es de desconfiar.
0:17:04 Esos actores sobreactuados, sí.
0:17:07 Parecía más tarde que Griego, con tanto...
0:17:10 Y Griego también es un poco...
0:17:13 Yo como actor también sobreactuó.
0:17:16 A mí me sacaron de una película porque hacía el papel de muerto.
0:17:22 Y sobreactuaba.
0:17:25 Le hicimos primero en el teatro.
0:17:28 Entonces yo me caí, me daba unas vueltas,
0:17:31 que se daba chau.
0:17:34 Y grito, estoy listo.
0:17:37 No, no digas, no digo.
0:17:40 Después me quedaba tirado ahí,
0:17:43 y por ahí abría los ojos y miraba a uno que estaba en la segunda fila de eso.
0:17:46 Y hacía gesto como que estaba...
0:17:49 Pero no siga explicando.
0:17:52 Y me miraba, muerto, estoy muerto, estoy muerto.
0:17:55 Chau.
0:17:57 No, no digas nada.
0:17:59 Seguí allá hasta el tercer acto seguía diciendo.
0:18:02 Bueno, que estoy muerto.
0:18:05 Entraba un actor nuevo y yo le avisaba al actor.
0:18:08 Desde el suelo estaba tirado y le preguntaba, muerto.
0:18:11 Y bueno, al director no le gustó nada.
0:18:15 No, que le pareces, señor.
0:18:17 Pero este avión parece que el actor tiene que comunicar todo lo que pasa.
0:18:20 Y yo a mí me gusta aclarar.
0:18:24 Por ejemplo, mi papel es el tipo que está enamorado de una.
0:18:28 Pero por ahí al principio no lo dicen.
0:18:31 Entonces yo entro y ya hablo, saludo y le digo a la gente así.
0:18:35 En una parte como hacía Víctor.
0:18:37 Guarda que estoy enamorado, yo diría.
0:18:40 Pero ya te van de chava.
0:18:43 Para mí lo mejor es que aparezca el director.
0:18:46 Para especular.
0:18:48 Que cuando hay una parte medio que no se entiende bien.
0:18:52 Ponerle que está toda la imagen borrosa.
0:18:57 Y el tipo empieza a pensar en su niñez.
0:19:00 Y usted oye.
0:19:03 Entonces aparece y campanera y dice.
0:19:05 Está recordando.
0:19:07 No, pero se dice.
0:19:10 Hay convenciones de cine que ya el espectador compre.
0:19:14 Por ahí el tipo se dice.
0:19:16 Era un sueño.
0:19:18 Parece campanera.
0:19:20 Y hace así.
0:19:22 A veces en las películas se abusan de la voz enoff.
0:19:24 Que le explica todo.
0:19:26 No hace falta acudar.
0:19:28 Estaba desesperado.
0:19:30 Y ya no le hace falta poner cara a ese tipo.
0:19:32 La voz enoff está muy bien.
0:19:34 Es un buen recurso.
0:19:36 Pero sirve para el bajo presupuesto en televisión.
0:19:39 Si usted.
0:19:41 No quiere gastar mucho dinero aparece la voz enoff.
0:19:46 El incendio lo arrasó todo.
0:19:50 No quedó ni una sola cosa en pie.
0:19:55 Sobre todo presupuesto para la película.
0:20:00 El Titanic se hundió.
0:20:04 Es un noticiero.
0:20:06 No es ni siquiera.
0:20:10 En tres horas no quedaba nada sobre la superficie del océano helado.
0:20:18 ¿Y qué se ve?
0:20:20 Fue una verdadera catástrofe.
0:20:23 Se ve al tipo con mucho humito y en una mesa.
0:20:28 Hay tipos que son muy buenos actores de eso.
0:20:31 Sí, pero ¿cuánto tiempo?
0:20:35 Neroni incendió Roma y no le importó nada.
0:20:40 Con eso habrás mucha grita.
0:20:42 Sí, mucha grita, pero la película no hace esos 10.
0:20:44 400 millones de gastos de golpe con esto que acabo de decir.
0:20:49 Bueno, de si, pero.
0:20:52 Eso no es si.
0:20:53 Nunca olvidaré aquella aeronave.
0:20:56 Era inmensa.
0:20:58 Pero justo hace todo cine catástrofe.
0:21:00 ¿Por qué no hace un cine más intimista?
0:21:04 114 pisos tenía el edificio.
0:21:10 ¿No se va a ahorrar las escenas eróticas?
0:21:13 ¿No las van a arrar?
0:21:14 No, esa.
0:21:15 ¿Qué costo tiene?
0:21:19 Bueno, depende.
0:21:21 ¡Atrá de mi piso!
0:21:26 114 pisos tenía aquel edificio.
0:21:33 Bueno, muy bien.
0:21:36 Me gusta esto.
0:21:38 ¿A usted le gustan los sectores extrovertidos?
0:21:41 Porque hay algunos muy buenos, especialmente el italiano Gasman.
0:21:44 Ah, extrovertidos, pero no es obra actual.
0:21:47 Pero ¿por qué él era un actor de teatro y el teatro
0:21:50 para que te vean desde lejos tenés que ser intenso?
0:21:55 No hay primer plano en el teatro.
0:21:58 El primer plano lo tiene que hacer vos.
0:22:00 La máscara.
0:22:02 Entonces, bueno.
0:22:05 ¿Y usted qué clase, digamos...
0:22:09 Rolón era un psicoanalista más declamatorio.
0:22:14 ¿A usted qué clase le gusta?
0:22:17 El declamatorio.
0:22:18 El callado.
0:22:19 El callado.
0:22:20 Ah, no.
0:22:21 Yo quiero que me diga algo.
0:22:23 ¿Qué le parece, doctor?
0:22:25 Estoy loco.
0:22:27 Sí, primero quiero que me dé la razón.
0:22:30 Empezando por ahí.
0:22:31 O sea que pago tanto.
0:22:32 Claro, démela razón.
0:22:33 Sí, su mujer está loca.
0:22:35 Sí, macho.
0:22:36 Eso.
0:22:38 Eso bien.
0:22:39 A usted, ¿sabes qué?
0:22:40 A mí me gusta este psicoanalista.
0:22:41 A usted, ¿sabes qué?
0:22:42 Lo están pasando, no lo valoran a usted.
0:22:45 En su casa ninguno, ¿eh?
0:22:49 Pero eso no es, señor.
0:22:50 Eso es sí.
0:22:51 Esa es su amiga.
0:22:53 Yo les cuento todas las cosas que me hacen en mi casa.
0:22:56 Cuando hablo se duerme.
0:22:58 Me hacen rimas con la última palabra de cada inciso.
0:23:02 El va y nos está preocupado.
0:23:03 No sabe lo que sufre, yo, doctor.
0:23:05 Y el tipo nada.
0:23:07 O peor.
0:23:11 Mi novia me dejó con un tipo que yo mismo le presenté.
0:23:14 El cambio.
0:23:17 El tipo es igual de sinceso.
0:23:19 Mi novia me dejó por un tipo que yo mismo le...
0:23:21 Pero qué es loco.
0:23:23 Parece bien.
0:23:25 El tipo te pone la mano en el hombro y te dice,
0:23:32 no se puede vivir.
0:23:34 Estamos en un mundo de que...
0:23:37 De que, ¿dónde, señor?
0:23:38 Parece mentira.
0:23:40 A mí, eso sí, cuando elista me gusta.
0:23:42 Está bien.
0:23:43 Cásmar.
0:23:44 Cásmar.
0:23:45 ¡Hey!
0:23:46 Cómo hace eso cuesta.
0:23:49 Y te acompaña hasta...
0:23:50 Y mientras te acompaña hasta la puerta,
0:23:52 te dices, no.
0:23:54 Por camisena.
0:23:56 Y le digo más.
0:23:58 Eh.
0:24:00 Y le digo más.
0:24:04 Mi analista favorito en el medio de la análisis me ofrece quecito.
0:24:17 Me se comete algo.
0:24:19 ¡Ah!
0:24:20 A mí los cicolanistas me tienen a pico seco, señor.
0:24:23 No me dan nada.
0:24:25 Y no me dan nada.
0:24:26 Pior, algunos morfan ellos.
0:24:28 Eso lo pió.
0:24:29 Se vienen con un sándwich de la cocina y dicen...
0:24:37 Hoy estamos muy poco radiales, ¿eh?
0:24:40 Y muy teatrales.
0:24:42 El primer programa de radio, Enseñas.
0:24:46 Bueno, eh...
0:24:47 Finalmente...
0:24:49 No sé.
0:24:51 Hemos ido al...
0:24:54 A la discoteca.
0:24:56 Explíquelo el tema musical.
0:24:58 No lo ponga.
0:25:01 Una vez que yo le conté todas estas cosas
0:25:04 y viendo el discotecario
0:25:06 que la voz tenía tanta importancia
0:25:09 en estas cuestiones de laboratoria,
0:25:12 pero también del litigio,
0:25:14 que era importante la voz del abogado.
0:25:17 Ahora que no hay juicio oral o que los juicios son escritos,
0:25:20 ¿qué importa si el abogado tiene una vocecita?
0:25:22 ¡Qué...
0:25:23 No le importa a nadie!
0:25:25 Porque está escrito.
0:25:26 En cambio, en aquel tiempo,
0:25:29 me dice el discotecario,
0:25:31 era importante la voz.
0:25:33 Por eso tengo este disco.
0:25:36 Este tema musical que se llama...
0:25:38 Tu parida voz.
0:25:40 Ah, se lo dijo así.
0:25:42 Sí, lo dijo así.
0:25:44 Y escucharemos entonces.
0:25:45 Tu parida voz, que es un bals hecho
0:25:48 en homenaje a la voz de los antiguos oradores, ¿no?
0:25:52 La letra no dice eso,
0:25:55 pero es para quedar bien con el comisario.
0:25:58 Escuchamos entonces a Charlo,
0:26:01 en su obra,
0:26:02 Tu parida voz.
0:26:03 Adelante.
0:26:16 Te oí decir
0:26:20 Adiós, adiós.
0:26:24 Y cerré los ojos y oculté el dolor.
0:26:30 Sentí tus pasos cruzando la tarde
0:26:34 y no te atacaron mis manos.
0:26:38 Cogarde
0:26:41 mi corazón.
0:26:44 Lloro de amor.
0:26:48 Y en el silencio resonó tu voz.
0:26:54 Tu voz querida le está ni perdida.
0:26:58 Tu voz que era mía,
0:27:00 tu parida voz.
0:27:04 En las noches desoladas que sacudan el viento,
0:27:08 grisan las estrellas frías del remordimiento
0:27:12 y me engañó que abraz de volver otra vez
0:27:17 desandando el olvido y el tiempo.
0:27:21 Siento que tus pasos vuelven por la sendatilla.
0:27:26 Oigo que me nombra llena de mortal fatida
0:27:30 para que si ya sé que si no tiene a par
0:27:35 nunca, nunca vendrá.
0:27:42 Te vi partir, dijiste adiós.
0:27:50 Te emble de angustia y oculté el dolor.
0:27:56 Después pensando que no volvería
0:28:00 te darte de alcanzarte y ya no era mía.
0:28:07 Mi corazón,
0:28:11 sangro de amor.
0:28:15 Y en el recuerdo resonó tu voz.
0:28:21 Tu voz querida le está ni perdida.
0:28:25 Tu voz, aterrida, tu parida voz.
0:28:31 En las noches desoladas que sacudan el viento,
0:28:36 grisan las estrellas frías del remordimiento
0:28:40 y me engañó que abraz de volver otra vez
0:28:44 desandando el olvido y el tiempo.
0:28:50 Siento que tus pasos vuelven por la sendatilla.
0:28:54 Oigo que me nombra llena de mortal fatida
0:28:58 para que si ya sé que si no tiene a par
0:29:03 nunca, nunca vendrá.
0:29:19 Era charlo, la venganza será terrible, tu pálida voz.
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