Sectas de la Edad Media. Los Flagelantes, y Los Bogomilos

Transcripción automática

0:00:00 Seguimos en las engrasas, que es terrible, transmitiendo desde la pequeña bodeguita sin bodega, sin vino, de radio del Plata, esto es en Gorriti, 5963, si Gillespie no me deja mentir.
0:00:16 No, sí, sí, sí, el alponsito está hoy...
0:00:19 Sí, está un poco fresco.
0:00:21 Un poco de calor humano, necesito.
0:00:23 Sí, sí, sí, y hay gente currucándose entre las funciones.
0:00:27 Hablaremos hoy de sectas de la Edad Media.
0:00:32 Ah, lo mía.
0:00:33 En verdad vamos a hablar solo de dos sectas.
0:00:36 Yo había preparado un informe con muchas más, pero era por demás extenso y aburrido.
0:00:44 En cambio ahora será corto y aburrido.
0:00:50 Empezaremos por los flajelantes.
0:00:54 Se trataba en principio de fanáticos religiosos europeos surgidos en el siglo XVIII, que postulaban la inminencia de la ira de Dios en general.
0:01:08 Como rito religioso se autoinfligían azotes, se surtean con un látigo.
0:01:16 Esto de creer que la ira de Dios es inminente y que los tiempos se están por terminar es común en casi todo el extremismo religioso.
0:01:26 Porque conviene pensar que Dios se enoja y que se enoja ahora.
0:01:31 Si uno dijera, Dios se va a enojar, pero no ahora, bueno, el pecador tendría tiempo para seguir haciendo de las suyas mientras Dios no se enoja.
0:01:41 Por eso la gente cree en Dios sino en la astronomía o los fenómenos que nos tratan.
0:01:44 En cambio, mucho más eficaz es decir, Dios ya está enojado.
0:01:47 Bueno, de todos modos tampoco parece surtir mucho efecto.
0:01:50 Este movimiento, digo, de los flajelantes apareció en la ciudad de Perú en el año 1260, pero después se extendió por toda Europa.
0:02:00 Se postulaban en total disidencia ante el cristianismo tradicional.
0:02:07 Defendían la intransigencia de una fe sin condiciones frente a una iglesia que ellos presentaban como corrupta.
0:02:14 Entonces la práctica sistemática de la fragilación tenía un doble sentido.
0:02:21 Por un lado, iba encaminada a redimir los pecados del mortal mediante la penitencia.
0:02:27 Pero también ofrecía al flajelante la oportunidad de revivir la pasión y el sufrimiento de Cristo y de convertirse en él de algún modo.
0:02:39 Ahora, lo que sí es que los flajelantes aterrorizaban a su entorno.
0:02:44 Por dondequiera que pasaban arrastraban un cortijo sangriento de dolores y horrores.
0:02:53 Hablaban de una misteriosa carta celeste que había descendido en forma milagrosa al altar del santo sepulcro en Jerusalén,
0:03:02 en la cual Dios expresaba su ira contra el hombre, así como su voluntad de extender las penitencias.
0:03:10 Ayer parece que era rebelde.
0:03:12 Claro, Jerusalén, 10 de agosto de 1711.
0:03:16 De mi consideración.
0:03:18 Por la presente expreso mi ira contra el hombre, así como también mi voluntad de extender las penitencias.
0:03:24 Firmado Dios.
0:03:25 Su seguro servidor.
0:03:27 Parece que en Perú ya el número de miembros de los flajelantes ascendía a 10.000, bastantes.
0:03:33 En un principio los flajelantes eran reconocidos por su piedad, pero a medida que iba pasando el tiempo y pasando el tiempo,
0:03:43 iban agregando algunos elementos indeseables.
0:03:46 Por ahí se les daba por atacar a los judíos en pueblos de Alemania.
0:03:51 La iglesia estaba siempre atenta, porque cada tanto se enojaban los flajelantes en una especie de ataque de ira y salían por ahí molera paloza cualquiera,
0:04:03 lo cual pensaban que redimía al apaleado.
0:04:09 ¿Cómo va ahora?
0:04:12 Si yo no leo mal, acá dice que han surgido en el siglo XVIII.
0:04:19 Yo creo que no.
0:04:21 De ningún modo, que eran muy anteriores, como consta la mención de la peste bubónica.
0:04:29 La peste bubónica llegó en 1300 y pues muy bien.
0:04:32 Sí, ya reciba una mitad de la población.
0:04:33 Cuando llegó la peste bubónica, dice aquí, murió un tercio de la población.
0:04:38 Antes, en mejante caos, los flajelantes vieron fortalecida su fe.
0:04:43 No pensaban que era una epidemia, sin un castigo de divino.
0:04:47 Y bueno, que interesa.
0:04:48 Y decía, si usted se ve la peste bubónica.
0:04:50 Ah, y se ahora sí creo.
0:04:53 Parece que en Italia había también violentos terremotos, además de la peste,
0:04:59 los cuales acrecentaban la fe de estos tipos, ¿no?
0:05:04 Que estaban convencidos de que el fin del mundo llegaría rápidamente.
0:05:08 Al mismo tiempo, iban multiplicando los actos de rebelión contra la Iglesia oficial,
0:05:13 contra la que hemos dicho que estaban.
0:05:15 Sí, sí, sí, sí, que estaban ruptas, ¿verdad?
0:05:18 También cada tanto se mandaban una persecución antisemita y también desarrollaban un mesianismo
0:05:25 cada vez más claro.
0:05:26 Y ahí fue cuando apareció en la localidad alemana de Turingia, un hombre llamado Conrad Schmidt.
0:05:35 Schmidt dirigió un grupo, un grupo flajelante clandestino.
0:05:40 Era un hombre, un intelectual podría decirse.
0:05:43 Conocía a fondo la teología, y griego, latín.
0:05:46 Conocía cientos de doctrinas esotéricas, eradulcho, energías y en discusiones teológicas, etc.
0:05:53 Contrañamente, a los flajelantes en general que eran muy cuadrados.
0:05:58 Schmidt no tardó en confirmar que las profecías de Ishaías que predecían el advenimiento de Cristo,
0:06:07 de hecho, predecían su propio advenimiento.
0:06:11 Como que él era Cristo.
0:06:13 Se asintió identificado, iría de ahora.
0:06:15 Enseguida dijo, me proclamos nada menos que el Cristo.
0:06:20 Y además se proclamó rey de Turingia, lo cual era casinada comparado con la proclamación precedente.
0:06:28 Entonces desde 1348, ahí estamos, Turingia fue un auténtico feudo de la disidencia.
0:06:37 Pero el año siguiente apareció el Papa Clemente, Clemente Sexto, que los...
0:06:42 No sé si será sexto porque la presión que está copia tiene graves problemas con los números romanos.
0:06:49 Y con las letras castellanas.
0:06:51 Bien, vino el Papa Clemente y lo declaró Erejes a todos y comenzó a perseguir los que tanto ni que tanto.
0:07:00 La elección de Turingia también tenía algún significado, ¿no?
0:07:04 Hay una leyenda popular, según la cual el emperador Federico II no está muerto, sino que está oculto.
0:07:12 En alguna parte, esperando vaya a saber qué palabra o qué orden para ponerse en movimiento, ¿no?
0:07:25 ¿Cómo había que hacer para adherirse a esta secta?
0:07:28 Pues debía ser conducido hasta un altar en el que se encontraba el propio Schmid
0:07:33 y allí el postulante debía confesar todas sus faltas.
0:07:37 A continuación, Schmid lo azotaba, peladaba con una violencia periós, pero es él mismo.
0:07:46 Así que, ¿incumpliste los mandamientos, Tomás?
0:07:50 La justicia por mano propia, pero solo para él, claro.
0:07:53 Claro. Las doctrinas de aquellos flaquelantes eran curiosas.
0:07:57 Viajaban en grupos organizados, unidos por votos que los alejaban de todo placer físico.
0:08:05 Las lecturas y flaquelaciones se llevaron a cabo por periodos de 33 días,
0:08:10 en memoria de los 33 años que vivió Cristo, o quizá de los 33 orientales.
0:08:19 Luego suspendían las fraquelaciones por 10 días y volvían a otra vez empezar.
0:08:24 Con el tiempo Schmid se puso cada vez más violento.
0:08:28 Pronto la inquicición reaccionó también violentamente.
0:08:33 Y así en 1368 se desencadenó la represión.
0:08:38 Se multiplicaron las ejecuciones, al final atraparon a Conrad y lo quemaron en Northousen.
0:08:46 Ese movimiento, el de los flaquelantes, quedó en el olvido durante casi un siglo.
0:08:52 A comienzo del siglo XV, revivió en muchos estados alemanes
0:08:58 y en tiempos más recientes hubo flaquelantes en Lisboa, en Colorado, Nuevo México.
0:09:06 Y en Estados Unidos estaban las sectas llamadas americanos cristianos nativos
0:09:10 y los hermanos penitentes que continuaron practicando la autofragelación.
0:09:15 Creo que hay esto, todavía en Filipina, me parece hay un par de lugares donde quedan tiempos.
0:09:19 En España todavía salen de vez en cuando los flaquelantes desambicentes de la Sontiara.
0:09:24 La otra secta, ya que hemos elegido dos, es la de los bogomilos,
0:09:32 que eran un poco menos violentos que los flaquelantes.
0:09:35 Eran miembros de una secta religiosa que surgió en el siglo X, en los Balcanes.
0:09:40 Eran anteriores entonces a los flaquelantes.
0:09:43 ¿Tenían cercanos al milenio?
0:09:45 Su sede central estaba en Bulgaria y se propagó por muchos otros pueblos, eslaos.
0:09:52 El movimiento surgió de un intento por reformar la Iglesia Ortodoxa Búbighara.
0:09:58 Los bogomilos, uyas doctrinas esenciales se atribuían a un sacerdote llamado Bogomil,
0:10:06 sostenían que el primer hijo de Dios fue Satan a él.
0:10:10 Después Satan a él se reveló y creó como oposición al llamado espíritu universal original,
0:10:19 un mundo de problemas y de seres humanos.
0:10:22 El Padre Supremo le otorgó a estos seres humanos el llamado espíritu de la vida.
0:10:28 Sin embargo, Satan a él mantuvo escravizado ese espíritu de la vida,
0:10:32 hasta que un segundo hijo de Dios, Lobos, dice aquí, es Lobos.
0:10:43 Pero bueno, es la misma persona de siglo XVIII.
0:10:49 Que aprendió lo varidos después.
0:10:52 Lobos bajó del cielo y adoptando un cuerpo espectral, y todas.
0:10:59 No tiene ninguna gracia. Tiene puntos en común con las...
0:11:07 con moviciones de los nópticos.
0:11:10 Y también, y antes, todavía con el más deísmo, que es el fundante de la psicotomía.
0:11:14 Bueno, pero lo importante de los bogomilos es que practicaban el ascetismo,
0:11:18 en el más estricto de los órdenes.
0:11:22 Recuerde, el ascetismo no quiere decir exactamente austeridad, sino práctica de austeridad.
0:11:29 Con el fin de alcanzar el más alto grado de espiritualidad o intelectualidad o conciencia.
0:11:37 Bueno, es una doctrina bastante más razonable que la anterior.
0:11:43 Y bueno, así como los seguidores del sinismo o el estoicismo
0:11:48 se forzaban a endominar el deseo y la pasión, los bogomilos tomaban esos mismos preceptos,
0:11:55 pero en forma más completa.
0:11:58 Comían y bebían lo necesario para no morir.
0:12:03 ¡Moso!
0:12:05 Trágame lo necesario para no morir.
0:12:08 Con manises.
0:12:13 Y por supuesto, no existía para los bogomilos la actividad sexual.
0:12:19 ¡Moso!
0:12:20 Los manises dejenó.
0:12:24 Los bogomilos despreciaban las imágenes sagradas, renegaban de los sacramentos,
0:12:29 aceptaban todos los escritos de Nuevo Testamento,
0:12:32 pero de la antigua, sólo los almos y los profetas.
0:12:35 En 1118, el emperador de Visancio, Alejo Primero,
0:12:42 ejecutó redondamente al líder de la secta,
0:12:46 de la secta, no de la secta, que también se hacía así el Amar Bogomil, porque sí.
0:12:51 En el siglo XV, durante la conquista musulmana de Bosnia,
0:12:55 recuerde, sé que los musulmanos se tuvieron así,
0:12:57 y también en las puertas de Viena, ¿no?
0:12:59 Bueno, siguen así.
0:13:01 Otro parte de los cristianos que se convirtieron a Lisla mismo eran bogomiles.
0:13:06 Antes de que fuera su primera secta,
0:13:09 ayudaron también a los salvigences, ¿se acuerdan?
0:13:14 Y a los cátaros.
0:13:15 Los cátaros, claro.
0:13:16 O sea, se anotaban en todos.
0:13:19 Finalmente se diluyeron en su totalidad.
0:13:23 Y así diluida, termina la secta de los bogomilos.
0:13:27 La otra terminó a sangre y fuego.
0:13:30 Por más que cada tanto,
0:13:32 algún flagelante solitario e individual aparezca.
0:13:38 Estas son las dos sectas de las cuales queríamos hablar hoy,
0:13:43 sin dejar de decir que en cierta época,
0:13:51 en algunas regiones de Occidente,
0:13:54 la discusión teológica apasionaba a las muchedumbres.
0:13:59 Se dice que cuando uno llegaba a Alejandra Agua,
0:14:02 con Constantinopla, los conductores de Carros,
0:14:05 tenían discusiones teológicas,
0:14:07 así como ahora se discute aquí de fútbol.
0:14:14 Después vinieron los concilios,
0:14:16 que son los que acotaron más firmemente las reglas de la fe.
0:14:20 Pero antes se me acañaba mucho.
0:14:22 Había arreo, aparecía mal.
0:14:24 El amianismo y todo eso.
0:14:28 Había una que siempre me impresionó,
0:14:31 que es aquella que sostenía que cada hombre era dos hombres,
0:14:36 el terrestre y el celeste.
0:14:38 Y que lo que le ocurría a uno en la tierra
0:14:43 era el reverso de lo que le ocurría al otro tipo,
0:14:46 al otro yo que estaba en el cielo.
0:14:49 Y de modo tal que para favorecer al otro yo del cielo,
0:14:52 los de la tierra buscaban su peor destino,
0:14:55 pero no solo de pobreza y miseria, sino también de maldad.
0:14:59 Para ser bueno a mi doble del cielo,
0:15:02 debo ser malo.
0:15:03 Para hacerlo rico, debo ser pobre,
0:15:06 para hacerlo limpio, debo ser sucio,
0:15:08 y para hacerlo leal traidor.
0:15:10 Para hacerlo acéntico, eso se imagina.
0:15:13 Así que se imagina lo que una secta como ésta
0:15:15 puede hacerle al mundo.
0:15:18 Bueno, aquí lo digamos esta chapa.
0:15:21 Está pensando Alejandro que ahora,
0:15:23 hoy en día, los últimos atredados cercanos
0:15:25 que he escuchado, bueno, ya le digo en Filipinas,
0:15:27 que es lo que es donde hay gente que no solo se autofragila
0:15:29 a lo largo de la Semana Santa,
0:15:31 por ejemplo si lo que se crucifica,
0:15:33 lo se hace crucificar y qué es eso.
0:15:35 Es curioso porque el resto de la greia
0:15:37 habla de la falta de razón.
0:15:39 Tenemos esta doctrina, parece más razonable.
0:15:41 Allí donde hay una doctrina religiosa.
0:15:43 Lo mejor es que la razón no aparezca,
0:15:45 porque corremos riesgos de empezar
0:15:47 de confiar uno de otro, como le ha pasado Occidente.
0:15:49 Pero, además,
0:15:51 en realidad todas estas cosas esconden
0:15:53 esas esperanzas últimas,
0:15:55 que se saben que en el fondo
0:15:57 están reñidas con toda forma de comprobación
0:15:59 y de razón. Por ejemplo, Federico II
0:16:01 va a volver de la tumba, y probablemente no.
0:16:03 Los ingleses decían que el rey Arturio
0:16:05 va a salir de la tumba cuando estuviera en el credibino.
0:16:07 Bueno, tuvieron que usar la RAF
0:16:09 contra los nazis porque el rey Arturo no se despertaba.
0:16:11 Y en general, aún no le agarra esta sensación
0:16:13 de decir, bueno, si lo hacemos, hagámoslo bien, por lo menos.
0:16:16 Tengo que ser serios, fíjese que
0:16:18 Monster y otros tipos de estos que hicieron esas sectas
0:16:21 terminaban revolcándose
0:16:23 con las muchachas de la ciudad, trajeriendo todo.
0:16:25 Estos tipos que en Estados Unidos,
0:16:27 un señor de 95 años,
0:16:29 dijo que había recibido una revelación
0:16:31 y que el fin del mundo era el 23 de junio del año pasado.
0:16:33 No pasó nada, como todos sabemos.
0:16:35 El tipo de colegias que hubiera equivocado,
0:16:37 pero la hizo vender a todos sus fieles todos los bienes
0:16:39 y que dejaron de practicar cualquier cosa.
0:16:41 Yo en los 95 años me estaría riendo
0:16:43 toda la semana de la gente.
0:16:45 Dio, así donde hay vida humana,
0:16:47 es muy difícil establecer algo de trascendencia
0:16:49 poniéndose uno como ejemplo.
0:16:51 Quiero decir, que para construir estas cosas
0:16:53 lo único que sirven es el relato,
0:16:55 es la literatura, es la palabra.
0:16:57 Así, donde hay algo sacrificial
0:16:59 que tiene un relato,
0:17:01 entonces hay una épica y hay una mística.
0:17:03 Si no, ahí donde hay algo sacrificial,
0:17:05 un poco de sangre y no hay relato.
0:17:07 Lo único que queda en el fondo son tortazos.
0:17:09 Y tortazos es la mironga que escucharemos
0:17:11 en recordación
0:17:13 de la forma en que se surtían
0:17:15 los frijoles.
0:17:17 La mironga tortazos será cantada
0:17:19 con su letra
0:17:21 no tan legítima
0:17:23 por el gran cantante
0:17:25 que es el mundo rivero.
0:17:27 Pero yo creo que esta letra no es la original,
0:17:29 que está un poco modificada.
0:17:31 Vamos a verlo.
0:18:39 Y nos apetemos la finada.
0:19:09 La calle
0:19:39 la compartida