Transcripción automática
0:00:00 Bueno, tal como habíamos prometido, o como no habíamos prometido en realidad.
0:00:11 No, nunca prometimos casi nada.
0:00:14 Tenemos un informe con curiosidades, curiosidad es una palabra tampoco prometedora ¿no?
0:00:22 Acerca de coches y carruajes, querido Barton, atención.
0:00:27 Hay un dato interesante para comenzar, y es que la invención de los coches cerrados,
0:00:36 es decir, con techo ¿no?, con techo, puertas, ventanas, no data más atrás del siglo XVI.
0:00:46 Dato curiosísimo ¿no?
0:00:48 Antes de esa época, inclusive las personas distinguidas viajaban como mucho en literas,
0:00:54 querían esos vehículos para una o dos personas sin techo, con dos varas o unas tablas paralelas
0:01:04 para sentarse, una cosa muy elemental.
0:01:08 El nombre coche admite la discusión filológica ¿no?
0:01:12 Algunos sostienen que ha sido tomado del verbo francés, que no me atrevo a decir, que quiere
0:01:20 decir, acostarse entre otras cosas, porque existe la posibilidad de hacerlo dentro del
0:01:28 habitáculo.
0:01:29 Pero están los que dicen que la palabra deriva de una voz alemana, que significa lecho de
0:01:35 reposo ¿sabes?, ¿a quién les puede importar?
0:01:38 En febrero de 1519 hizo su entrada en Barcelona, el noble Don García de Toledo, junto a su
0:01:46 mujer Victoria Colona, nada menos.
0:01:49 Estaban en un magnífico coche, que según dicen fue el primero que se vio en Europa.
0:01:53 Ya poco después, en tiempo de Francisco I, en París, nuestros amigos franciscos de
0:01:59 Valóano, no había más que tres carruajes en Francia.
0:02:04 Él de la reina Claudia, el Diana de Poitiers, que era la hermana del hijo de Francisco I,
0:02:10 o sea Enrique II.
0:02:12 Y el tercer coche pertenecía al noble René de Laval, que según las crónicas el pobre
0:02:18 no podía ir a Caballo ni caminando porque estaba muy bordo.
0:02:23 Allá por 1600 carrozas y carruajes ya cundían y las consecuencias fueron interesantes.
0:02:32 Por ejemplo, las calles europeas no estaban preparadas para que el tránsito de carruajes
0:02:38 y muchas ciudades sostenían como sucede también ahora su aspecto medieval y estos nuevos coches
0:02:45 ocupaban toda la calle, incluso había algunas calles donde no se podía meter.
0:02:50 En Francia había calles señaladas especialmente porque no eran ni muy anchas ni muy angostas,
0:02:57 entonces no estaba claro si cabía el coche o no.
0:02:59 ¿Qué es la calle difícil?
0:03:02 La calle donde cabe el coche fenómeno.
0:03:06 La calle donde no cabe, la se visto.
0:03:11 Menos también, a ojo no más, si esto es apenas una rajadura.
0:03:17 Pero la calle que está ahí justo en el límite es peligrosísima.
0:03:25 Porque puede ser que cuando entres con el coche este quepa, pero caza adelante unos
0:03:34 50 metros más allá.
0:03:36 ¿Le ponen una maceta?
0:03:37 No, una maceta es una mano de pintura por ejemplo.
0:03:40 Un nuevo revoque y el coche se atasca y ya no puede volver porque el caballo no recula
0:03:49 con tanta eficacia.
0:03:50 Con un carro atrás.
0:03:51 Y así han quedado coches allí con los esqueletos de los caballos si los ve toda ella.
0:04:00 Como hemos cortado alguna vez que sucede cuando calculan demasiado al milímetro el
0:04:05 túnel por el cual discurren los subterráneos.
0:04:09 Hemos denunciado que en los últimos tramos que se están construyendo ahora es muy
0:04:12 justo y a veces tienen que lijar los vagones para que entren e incluso a veces enjabonarlos.
0:04:21 Tienen que enjabonar el vagón y a veces el piloto, el motorman.
0:04:28 Entra un poco y después sale de nuevo.
0:04:31 A la red vuelve.
0:04:32 Se entusiasma después.
0:04:33 Y así le ponen otra mano jabón.
0:04:36 De AMBA y VEN.
0:04:38 Eso porque por mezclinar.
0:04:41 Después los llaman trabajo y salud.
0:04:46 En Francia estaban marcadas con un cartel que decía ojo esas calles dudosas y entonces
0:04:50 el cochero se bajaba y medía.
0:04:52 Primero medía el carro y después medía la calle.
0:04:55 Incluso se podía hacer el procedimiento inverso.
0:04:59 Y luego procedía en consecuencia, me imagino.
0:05:02 Estas mediciones son de gran importancia.
0:05:11 Este mismo problema que tenían los cocheros en Europa en aquellos años se tiene en muchos
0:05:21 órdenes de la vida, pero que no viene al caso.
0:05:25 Había tantos coches nuevos allá por 1600 que los caminantes protestaban ante el peligro
0:05:30 de haberse atropellado.
0:05:31 Las viejas especialmente.
0:05:32 La vieja es un ser que tiene miedo de ser atropellado por un carruaje con caballo.
0:05:40 Todos ser humanos.
0:05:41 Es el miedo principal de una vieja.
0:05:44 En japonés la palabra vieja quiere también decir ser que vive atemorizado por el peligro
0:05:51 de ser atropellado por un carro con caballo.
0:05:54 Así de extraño es el idioma japonés y así de extraña son las viejas.
0:05:59 No había tantos coches y la gente todavía no había desarrollado la atención necesaria
0:06:07 para saltar y ponerse a salvo ante la aparición de aquellos bólidos.
0:06:12 Bueno, digo, todos estarían acostumbrados a las literas que venían a mano, las llevaban
0:06:19 o a los huelles y de pronto aparecen estos caballos y estos carros.
0:06:25 Y además aumentó la dosis de estiércol y orines.
0:06:28 Disculpenme, disculpen, en estos momentos se está retirando.
0:06:32 No, venga, se llama la dama.
0:06:34 La vieja, la vieja en cuestión.
0:06:37 Bien, provenientes justamente de los caballos.
0:06:42 Bien, hubo entonces problemas de limpieza también en las calles.
0:06:45 Aunque como se sabe la limpieza municipal en aquellos años y especialmente en años
0:06:49 anteriores, al 1600 hablo de la Alemania, se dejaba librada las lluvias y también
0:06:56 a los chanchos.
0:06:57 En el siglo XXI también.
0:06:59 Sí, los chanchos andaban por la calle y se morfaba la basura que la gente tiraba.
0:07:04 Cuenta Paul Johnson, un amigo Paul Johnson, que durante siglos la gran línea de visoría
0:07:11 entre los opulentos y los demás, digo ya dejando de lado los chanchos, ¿no?
0:07:17 Fue la posesión de un carruaje.
0:07:21 Uno era gente de carruaje o no lo era.
0:07:24 Ingresar en el grupo poseedor de carruajes era el signo más obvio de que uno había
0:07:30 llegado a la más alta jerarquía social.
0:07:32 Bueno, esto sucedió, ya voy.
0:07:35 Esto sucedió hasta hace relativamente poco de todos modos.
0:07:39 Lo importante de poseer carruaje propio, sin embargo no era tanto el costo del vehículo,
0:07:45 esto que igual podía ser enorme, sino mantener a los...
0:07:54 Al personal.
0:07:55 A los caballos, etcétera, muy costoso.
0:08:00 Sin embargo, un coche caro podía valer una fortuna porque había que ir al artesano,
0:08:07 darle las especificaciones, comprar una de segunda mano, estaba mal visto.
0:08:13 Vos podías comprar una de segunda mano, pero después tenía que pintarlo para que nadie
0:08:17 lo reconociera porque cada coche era atribuido a un dueño.
0:08:22 Mirá, ahí iba el auto de Fulano, el auto no, el coche de Fulano.
0:08:26 Bueno, en los barrios era igual.
0:08:30 La gente conservaba los autos durante tanto tiempo que vos decía, mirá, yo era la camioneta
0:08:35 40 y él era la camioneta 40 porque primero había pocos autos.
0:08:42 No había muchos 40.
0:08:43 No había muchos, sí, eran muchísimos los 40.
0:08:46 Sí, era mucho.
0:08:48 Se ve que andaba mucho con la camioneta 40.
0:08:49 Pero digo que lo más costoso tal como se ha dicho era mantener la marcha del carruaje,
0:08:56 dos caballos, cuatro para los viajes largos, se hacían postas después de la primera estapa,
0:09:01 decirse alquilaban caballos en las posadas y si uno conservaba los propios tenían que
0:09:05 darle descanso cada dos o tres días, esto retrasaba mucho cada viaje, ¿no?
0:09:10 Tenía que tener un establo, uno o dos palafreneros, además ningún caballero y mucho menos una
0:09:16 dama conducía en su carruaje, así que necesitabas un cocheero.
0:09:21 Pero el cocheero en un empleado de cierta dignidad, un empleado superior, si se quiere
0:09:26 en consecuencia, costoso de mantener.
0:09:30 Cocheero nunca condescendía a realizar la tareda de los palafreneros o de los mozos
0:09:34 de establo, no, no, no.
0:09:37 Los que tenían coche en la ciudad también necesitaban un lacallo que iba detrás del
0:09:41 coche para estabilizarlo, como los tipos, eso es la carrera de Sácar que van con la moto
0:09:47 y del otro lado va el tipo, así que se tira y va con el casco sacando chispas.
0:09:53 Qué lindo laburo.
0:09:54 Eso hacía el lacallo.
0:09:57 Tenían que moverse incluso con elegancia cuando el coche giraba y hacer de contrapeso.
0:10:03 Contaré una historia de Alejandro Dumas, Alexandre Dímaz, padre, Alejandro Dumas, padre,
0:10:12 que era un tipo muy vanidoso.
0:10:14 Y cuando empezó a ganar fama con sus libros empezó a darse algunos lujos, pues siempre
0:10:21 había sido un tipo muy, muy pobre, el amigo Dímaz.
0:10:24 Y muchos conocían su carruaje, pero a él no lo conocían tanto.
0:10:32 Sucede que don Alejandro Dumas, padre, era mulato y él mismo iba colegado en la parte
0:10:41 trasera.
0:10:43 Adentro no iba nadie y hacía creer a la gente, que pensaba que él estaba adentro, que tenía
0:10:49 un criado negro.
0:10:51 Es una de las formas de racismo más curiosas que he conocido esto, de ponerse uno mismo
0:10:59 como criado negro para darse aires.
0:11:09 Otro trabajo del lacallo, no de Alejandro Dumas, el lacallo en general, consistía en
0:11:15 bajarse, desplegar una especie de escalinata y abrirle la tapoer al macanudo con una reverencia,
0:11:22 que es eso.
0:11:24 Los carrojes apropiados no tenían manejas del lado de adentro, porque la nobleza jamás
0:11:31 sabría puertas flacas.
0:11:34 Así que de afuera las manejas.
0:11:36 Qué confiados, eh.
0:11:37 Sí, como una heladeja, siempre del lado de afuera.
0:11:40 Es una dama, otras especificaciones.
0:11:42 Una dama lleva de visita a algún sitio.
0:11:45 El lacallo se bajaba primero y golpeaba la puerta.
0:11:47 Qué.
0:11:50 El golpe de los lacallos de carroajes era siempre el mismo, según Paul Johnson.
0:11:55 Sonaba como dos tresillos rápido.
0:12:03 Sí, no sé si fueron los tresillos.
0:12:10 Tener que guardar el carruaje, disculpe, me.
0:12:14 Si está emocionado.
0:12:16 Estoy muy emocionado.
0:12:17 No es para menos.
0:12:18 Sí, es un tema que lo pone así, lo de los carroajes.
0:12:21 Bueno, signo y me equivoco de decadencia vender el carruaje.
0:12:26 Cuando vendías el carruaje se corría a la Uri de Uri de Uri, se ve que Barton vendió
0:12:29 el carruaje.
0:12:30 Uuh, debe estar arruinado.
0:12:34 Bueno, contemos para terminar algunas reglas extrañas que se impusieron a los dueños del
0:12:40 coste.
0:12:41 Felipe III, allá por 1611, Felipe III de España, estoy hablando.
0:12:47 Ordenó que sólo pudieran transitar en carruajes los que tenían licencias reales.
0:12:52 Bueno, registro que en Bromar.
0:12:54 Las mujeres sólo podían ir dentro de los habitáculos con el rostro descubierto, de
0:12:59 manera que se las pudiera reconocer.
0:13:01 Nada de andar con máscaras venecianas, con bufándal o con velos, cosas que no se supieran.
0:13:08 Tenías que ir como diciendo soy la duquesa de Galba.
0:13:14 Ya nada de polarizado, no.
0:13:17 Después los coches no podían prestarse.
0:13:21 Una excusa para no prestarlo, para los miserables.
0:13:23 Dice yo te lo prestarí, ya viste pero.
0:13:26 La famosa excusa de la marrete.
0:13:29 Después otra cosa Barton.
0:13:31 Ninguna prostituta podían dar en coche.
0:13:35 Si lo hacía, la mandaban al deshierro, la mandaban.
0:13:39 Los hombres con licencias sólo podían, digo con licencias conducidas, con licencias
0:13:43 de vacaciones, sólo podían llevar a sus esposas, hijas o madres.
0:13:49 O madres.
0:13:50 O madres.
0:13:53 Jamás podían andar con otra mina que no tuviese ese lazo para evitar, según se decía,
0:13:59 toques imprudentes.
0:14:01 Así que no existía eso de pasearse uno en carruaje, sacar el marote por la ventanilla
0:14:05 y gritarle a las minas.
0:14:08 O parar yo presencia llevarla.
0:14:12 Ahora, asume el cronista, que los toques imprudentes con la mujer eran imposibles.
0:14:17 Imposibles.
0:14:18 Porque, dice, prostituta no sé, a la mujer puede llevarla, para toques imprudentes.
0:14:23 Igual lo sé.
0:14:24 Pero no podía levantar minas desde el carro.
0:14:28 Algunos lo hacían bajar al acallo.
0:14:30 Decían al acallo, bájese y pregúnteles a mina que va caminando ahí si quiere que
0:14:34 la rima verá Santé.
0:14:35 Y el acallo se bajaba, qué sé yo.
0:14:39 Salvo Alejandro Duma que se bajaba el mismo.
0:14:42 Así es de su propio acallo.
0:14:44 Decía, mando decir yo mismo, etcétera.
0:14:48 Es fantástico darle a uno un mensaje de uno mismo fingiendo ese intermediario.
0:14:57 Ser uno, al mismo tiempo, el mensajero, el remitente, ¿no?
0:15:03 El intermediario.
0:15:05 Y para completar esto, también sería bueno ser uno el destinatario.
0:15:09 Bueno, eso es todo lo que quería hacer.
0:15:12 Tiene una gran ventaja, sí, ¿no?
0:15:15 Se llama solipsismo, no sé cómo se llama.
0:15:18 Señores, esto es todo lo que tenía que decir acerca de los carruajes.
0:15:24 ¿Crees que iba a seguir con los toques imprudentes o...
0:15:27 ¿Lo qué?
0:15:28 ... con los toques imprudentes?
0:15:29 Ah, a usted le gusta todo eso.
0:15:31 Sí, bueno, no se podía, estaba prohibido.
0:15:38 Imagínense cómo iban a nivelar los lacallos, ¿no?
0:15:40 De frente a los toques imprudentes.
0:15:42 El trabajo es algo.
0:15:43 El toque imprudente con el coche en marcha no tiene mucha gracia.
0:15:51 Si no maneja, sí.
0:15:52 Y sí maneja.
0:15:53 Pero sí uno siente que... no sé.
0:15:58 Tiene medio la...
0:15:59 No, no, sí, sí, me gusta, me gusta.
0:16:05 Yo suelo, prácticamente tengo intimidad con mi novia o alguna mante, únicamente en
0:16:13 vehículos.
0:16:14 En vehículos, el movimiento.
0:16:15 Y yo vivo en una casa, somos muchos de familia, dormimos todos en la misma pieza, así que
0:16:20 no puedo.
0:16:21 Y las mujeres que condescienden a salir conmigo generalmente tampoco tienen ningún bulín.
0:16:26 Entonces, tengo una pequeña camioneta y allí doy rienda suelta a Mirucu.
0:16:36 Pero la puedes estacionar, digo, a la camioneta.
0:16:38 Sí, la estaciono.
0:16:39 Ah, no, pero hablamos del coche en movimiento.
0:16:40 No, no, movimiento, no, la estaciono, la estaciono.
0:16:43 Ah, bueno, la camioneta no es la misma del reparto de huevos.
0:16:45 Y la misma, sí.
0:16:46 La estaciono y le digo a la mela, porque no soy de los que estacionan con un prentesto.
0:16:52 Y ella balanza su lamia.
0:16:54 Y yo, amada mela.
0:16:57 Ahora, si tú lo permites, voy a estacionar acá en la avenida Santa Fe.
0:17:02 Pero no me lo dees, tanto le estás.
0:17:04 Y daré rienda suelta a mi lujuria.
0:17:06 De justo la avenida Santa Fe, que está muy transitada, doble mano, busca algo más
0:17:10 íntimo.
0:17:11 Bueno, pero justo voy para Núñez.
0:17:14 No se puede decir.
0:17:15 No se puede decir.
0:17:16 Y ahora tengo de andar haciendo un trayecto.
0:17:20 Total, el que quiere mirar, que mire.
0:17:23 ¿Por qué usted es una exhibicionista?
0:17:26 No, pero ¿qué quiere que le haga?
0:17:28 Además, por otra parte, todos estamos condenados al exhibicionismo, porque la aldea global
0:17:38 tiene un sistema muy parecido al del gran hermano de Orwell.
0:17:40 Entonces, todos estamos sujetos a una vigilancia perpetua, bajo la forma de satélites artificiales,
0:17:47 cámaras, de vigilancia, vecinos, buchones, correveidiles y alcahuetes.
0:17:53 Así que te están mirando todo el tiempo.
0:17:57 Cuando uno comprende que lo están mirando, ¿qué hace?
0:18:01 No se cuida más.
0:18:02 Basta de un...
0:18:03 ¿Qué dirás, mire?
0:18:05 Escondete aquí, venía.
0:18:06 Entra ahora que no pasa.
0:18:10 En la avenida Santa Fe, ahí, con tu amante, y igualmente te van a ver.
0:18:15 Nosotros de nuestra vida privada es pública.
0:18:19 Bueno, está bien eso, de aflojar un poco, es decir, no me importa.
0:18:24 ¿Qué miren?
0:18:26 Igual si todos se miran y todos son mirados, ya la mirada pierde peso también, ¿no?
0:18:31 Y todo pierde peso.
0:18:32 Fíjese, cuando un tipo está en cana, ¿qué es lo primero que pierde?
0:18:40 Peso.
0:18:41 La privacidad.
0:18:46 Lo primero que pierde es eso.
0:18:52 Me estoy arrepintiendo de todo.
0:18:55 Hemos ido a la discoteca y hablando de carros, carruajes y medios de transporte,
0:19:01 el tipo me dio un balcecito que se llama el aeroplano.
0:19:05 El aeroplano también es una especie de carruaje, pero que vuela.
0:19:09 Además, es único que tenía.
0:19:11 Por un conjunto que tiene su gracia musical, que es el de Domingo Rulio,
0:19:16 que es un flautista, tiene un conjunto que imita la manera de tocar de los primeros años del siglo XX.
0:19:23 El aeroplano se llama Estebal de Pedro Data.
0:20:11 Estebal de Pedro Data
0:20:41 Estebal de Pedro Data
0:21:11 Estebal de Pedro Data
0:21:41 Era Domingo Rulio y pa' que bailen los muchachos el aeroplano.
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