Totalmente de acuerdo con Leo. Schultz ha entendido la verdadera naturaleza de los chistes de Dolina, la esencia del programa. Compánrese, si no, sus atinadas intervenciones, su postura crítica, jugada, sagaz, el humor chispeante no carente de una exquisita erudición que mostró en el programa de anoche, con el opio absoluto del programa de la noche anterior, donde Barton lo echa todo a perder.
Es más: Creo que a Schultz podría reemplazar totalmente a Dolina si asistiera unos cuatro años a una buena academia de Castellano.
Abrazos