En la pelicula Sunshine de Danny Boyle, un grupo de cientificos viajan hasta el sol montados sobre una nave que tiene la bomba termonuclear mas grande de la historia, su objetivo, reactivar el sol. la pelicula es buena, pero a mi me gusto mucho mas. la escena mas emocionante sucede cuando todos se reunen en la sala del sol, una sala de vidrio con un enorme filtro que permite ver el sol sin daño alguno. alli reunidos ven pasar a mercurio delante de la estrella. el momento es sublime, solo un puntito negro delante de la masa amarillento-anaranjada del astro. parece poca cosa, pero el director filma sus rostros en donde se pinta el asombro mezclado con la maravilla. algunos rien, otros se quedan inmoviles, otros derraman una lagrima. el psicologo de la nave se llama Searle y experimenta en esa misma sala una dosis de luz solar hasta el limite de lo soportable. la experiencia es sobrecogedora, la luz lo come literalmente. luego relata la experiencia
diciendo que la luz es opuesta a la oscuridad, la luz es el ser, la luz te acompaña como un gran abrazo calido, con tal cantidad de luz nunca estaras solo. la oscuridad es el vacio, la ausencia, el no ser. la mejor escena es para Tanaka, jefe de la expedicion, sale afuera de la nave a arreglar un desperfecto en las celdas solares de la enorme pantalla que cubre a la nave. la nave gira para desviar la terrible luz solar, pero antes de lo esperado todo vuelve a su posicion anterior, el giro de la nave no le deja tiempo a Tanaka para meterse debajo de la pantalla, en la sombra....o no quiere hacerlo?. como perderse de ver al sol en todo su esplendor aunque eso signifique morir? como perderse tal espectaculo? si pudieras mirar la cara de Dios y despues morir, cerrarias los ojos? Tanaka se queda alli esperando el momento, Searle a ultimo momento se comunica con el, y le pregunta ¿como es?, ¿como es?.... es ....es.....hermoso, responde. y luego la nada. la muerte mas bella del cine.