Diego Petyr, a veces me pregunto si Dolina es realmente consciente de la influencia cultural que tienen sus actos; por ejemplo, en los primeros años del programa (mediados de la década de 1980) obligó a Editorial Planeta a que reeditara el Tristram Shandy de Sterne (un libro que juntaba polvo en los depósitos) solo por haberlo citado algunas veces. Ahora mismo, desde que comenzó a mencionar a Antonio García Villarán (un tipo muy interesante y con buen manejo de comunicación en redes) y el tema del hamparte, las subcripciones y visitas a su canal de YouTube se dispararon inmediatamente. Creo que Dolina fue conceptualmente el primer youtuber (o uno de los primeros) veinte años antes de la creación de YouTube y al menos quince años antes de la masificación de Internet. (El único antecedente radial que conozco es el de Walter Benjamin en la Reichs-Rundfunk-Gesellschaft, la radio estatal de la Alemania de Weimar, quien entre 1929 y 1932 contaba las historias de los juicios a la brujería, de la crecida del Mississippi, de Pompeya y la erupción del volcán, del terremoto de Lisboa, del incendio del teatro de Cantón, etcétera, mezclando hechos históricos, literatura e ironía con un estilo muy parecido al que después adoptó Dolina.)