Y el significado vulgar y malamente usado en forma popular, fijáos que es recién la cuarta acepción, no la segunda ni la tercera, recién en su cuarta acepción y siempre y cuando digamos "una poesía" y no "la poesía" porque en ese caso vamos mucho más allá de la lírica y el verso. Son cuestiones básicas pero en un país en que sistemáticamente se ha venido destruyendo la cultura como en éste suenan algo extrañas. ¡Ah y por sobre todo nimias y pedantescas!. Claro, lo que le vendría bien saber al señor Sacarías es qué piensa Dolina al respecto, por ejemplo. Una persona con una vida consagrada a llevar algo cultura a la gente. A Dolina en muchísimas ocasiones en sus programas lo he escuchado hablar en defensa de la etimología y de la gramática y sobre todo de las llamadas lenguas muertas como el griego y el latín. Seguramente él sería más eficaz para expedirse en este punto. Tal vez alguno lo escuchó en ciertas épocas cuando el se indignaba sanamente cuando veía gente que no entendía por qué era importante por ejemplo conocer la historia filológica del origen y evolución de una forma o un vocablo. Lo despreciaba y criticaba como mediocridad del alma esa actitud de desdén respecto a esas sutilezas que en defintiva le dan verdadera profundidad a la experiencia, al conocimiento y a la vivencia humana.
Mariano C. el lunes, 27 de enero de 2014 a las 04:21 AM
en La venganza será terrible del 23/01/2014 dijo: