Si, Ezequiel, si, Solcito, si todos.En algún punto tienen algo de razón y en otras no tanto.Pero que importa.El Negro no nos trae la verdad revelada, trae algunas cosas rescatables con las que nos identificamos , sino , ¿por qué perder el tiempo en escucharlo?.Cada uno rescata, o se identifica, con cosas del programa, por contemporaneidad, por novedad, por que se yó.
El tema de la construcción de una personalidad compleja, es una de las causas que defiendo , y acuerdo con Dolina.Después deberemos discutir cuántos y cómo, en este bendito país, están en condiciones de lograrla.
A Adolfo, a Manuel, y a tantos, no les gusta Schultz, ¿Y?. A otros no les gusta el Coco ¿Y?.Sostengo, porque es mi posición, no ante el programa, sino ante la vida, el derecho de todos/as y cada uno a expresar su disconformidad, con lo que sea."Educar al soberano" sigue siendo una frase interesante, no importa de quien provenga.
Coincido con Ezequiel que es justo y necesario, hacerlo público, si creemos, que es justo y necesario, criticar la mediocridad, el facilismo, el "Ma sí".Y no soy inocente en estos temas, también los he ejercido, por cansancio, por desgaste.
Con respecto a este programa y con respecto a todo.
Me gusta que no se " naturalicen" ciertas cosas a fuerza de estar ahí, me gusta que la gente tenga espíritu crítico, aunque como ejercicio se use el programa.Si esto permite traspolar a otros temas más importantes."El silencio es salud" ha dado resultados tenebrosos.Así que, adelante, siempre que se respete el derecho de los otros/as a disentir.Cariños a todos/as.