Jalobe

dac: ¿el tema es que hay que saludar antes de hacer un comentario?
Mirá que Federico, el que puso "excelente programa", no saludó antes de comentar. ¿Qué hacemos con él?
Ah, no. Ahora entiendo. Es sólo si no saludás y luego criticás al "hijo bobo del Joker", no? Uy, mucho protocolo. Aburre, che.

Ahora hay que presentar el DNI para comentar?? O sólo deben hacerlo aquellos que no soporten a Dorio??

Muchachos, yo no me fumo ni medio minuto a Dorio. Es más, los programas que sé que está él, directamente no los escucho. Pero debemos ser honestos: los días 11, 12 y 13 de febrero, pudimos disfrutar a Gillespi los 3 días y nadie entró a aplaudir y cantar loas al programa.
Ni los "fanas" de Dorio entraron a putear y a quejarse.
Listo? Estamos de acuerdo?

Me gustaron mucho los comentarios de Dac y Chamo. Realmente, más que comentarios, son aportes.
Es preocupante, la gente que aplaude la ausencia de críticas a Dorio, como un síntoma de que todo está bien. ¿Aplaudimos la huída de oyentes, porque así no tenemos que soportarlos cuando algo del programa no les gusta? Mmmmmmm, camino peligroso ese. Se corre el riesgo de quedarse muy solo. Pero claro, contentos porque ya no hay críticas molestas.

Yo creo, humildemente, que la diferencia entre los que soportan a Dorio y los que no, estriba principalmente en que quienes no nos fumamos a Jorgito, evitamos calificar a los que sí se lo fuman con términos peyorativos como "odiadores", o similares.
Parecería que la sola crítcia a este señor, despertara una agresión solo comparable a la de un grupo de adolescentes con granitos en la cara, a las que le dijeran que Justin Bieber es medio rarito.
En lo personal, a Dorio le voy a seguir diciendo de todo, y en los términos que se me canten. A los que lo defiendan, bien por ellos, pero no voy a entrar en insultos o descalificaciones, por una simple cuestión de paladar radial.
Coincido sí, en que no debemos perder de vista lo único inmóvil e inamovible en un programa que se ha movido tanto y cambiado tanto: el señor Alejandro Dolina.
Saludos a todos.

Chamo de barrio mitre: ¿Y si no es un programa de humor, porqué me tengo que fumar a un pelotudo que intenta desesperadamente ser gracioso y que a su vez se revuelca de risa en el piso a cada chiste de su amo? Eh?

Yo no te puedo creer!! Dos días seguidos con Dorio!!! Qué hemos hecho para merecer este castigo??

Jorge: no confundas los tantos. Yo no me quejo de que los programas sean repetidos. Me quejo de que no se siga con la sana costumbre del "un día con Gillespie y otro día (ya que no hay más remedio), con Dorio. . Así que no es un problema de repetición. Es un problema de alternar los integrantes, para la sanidad mental de los amables oyentes. Saludos.

Hay algo que no entiendo. Si estos días los programas iban a ser repetidos, y habiendo taaaantos programas para elegir, ¿había necesidad de que en ninguno estuviera Gillespie y sí estuviera "el hijo bobo de El Guasón"???? Había realmente necesidad??? Una pena, la verdad.

Hola a todos!! Quería felicitar y agradecer a los responsables de este sitio, por permitirme acceder a los programas de "La Venganza". Aclaro que soy uruguayo, por lo que trataré por un tema de respeto y deber de buen huésped, mantenerme por encima de ciertas polémicas de corte político.
Dicho esto, nobleza obliga, paso a aclarar que estoy mucho más cerca de la posición política de Dolina que de las otras. Pero no puedo evitar que se me derrumbe un testículo cada vez que Dorio suelta una parrafada de frases enganchadas que pretenden ser una más brillante y aleccionante que la anterior.
Disculpen si soy muy duro, pero he llegado al punto de dejar de descargar los programas donde participa Dorio. Me parece un pensador brillante y un tipo muy consecuente con sus ideas. Pero no para este programa. Queda como el "boludo de la barra", que se ríe y le festeja cada palabra a su ídolo.
Y para agravar la situación, me pasa que me defeco de risa con Gillespie. No lo puedo evitar, empieza a hablar y empiezo a reirme.
Nada. Gracias una vez más. Este sitio es excelente, y mejor aún, se me ha vuelto tan imprescindible como el programa mismo.
Un abrazo del otro lado del charco.