Teatro Mercedes Sosa, Ciudad de Tucumán.
Alejandro Dolina, Patricio Barton
Segmento Inicial
Barton : “Ropa reversible ropa prestada”
La chaqueta de Belgrano
Segmento Dispositivo
Espiritismo, el fantasma de Enrique VIII y Ana Bolena
♫ “Solo Dios sabe” de Beach Boys adap. Charly García y Pedo Aznar (Trío sin nombre)
Segmento Humorístico
- Compórtese como un príncipe en el avión, usted que es un cerdo
El Sordo Gancé / Trío sin nombre
Temas:
♫ “La rueda mágica” de Fito Paez
♫ “Zamba del carnaval” de Cuchi Leguizamón
♫ “Please please me” de The Beatles
♫ La huella tucumana
Se corta
Me emocionó mucho cuando en la parte de los mensajes la gente pedía distintas canciones y Dolina se disculpaba por no poder cantar debido al estado de su voz.
Si bien eso ha ocurrido muchas veces, ayer en Tucumán parecía sentir una pena más honda que de costumbre por esa imposibilidad. En un momento cuando le pidieron una canción en particular dijo: “¡Qué linda canción! ¡Qué lástima!”.
Confieso que me afloró una lágrima, y tal vez a él también. Quizás ambos sentimos, como sintió Siddharta Gautama en medio de los lujos adormecedores del palacio, todo el peso de la transitoriedad de la vida en este plano, lo inexorable del paso del tiempo, y con él la proximidad de la edad avanzada, del decaer de las facultades corpóreas, de la muerte…
Me invadió una corriente de comprensión, de compasión (en su sentido original de “padecer junto con”), de amor en su sentido más puro.
En estos estados emocionales me suelen venir a la mente las palabras que la gran mística india Anandamayi Ma no se cansaba de repetir a quienes acudían desde todas partes para escucharla: “La vida se desliza rápidamente. Busca la Verdad sin demora”.
"Transferencia" le llaman algunos curanderos a eso que le pasa, Franz.
Cuando Dolina se queja de su voz, actúa... Se hace mimar.
Él sabe que puede cantar, basta con bajar un tono y no usar tanto pulmón, para ser "más brillante" frase que suele usar él cuando sube un tono más. Es de puro cabezón, de contra, que no acomoda su voz a las respuestas del cuerpo. INCLUSO cuando baja el tono y suaviza el color, es precioso y comunicante lo que canta, pues en lo demasiado brillante - por ejemplo un cantante lírico - lo emotivo llega, se siente. Pero el demasiado pulmón en un cantor no lírico, puede hasta ser contraproducente. Lo más lindo de la voz de Dolina, es el timbre, la vibración, el color, pueda trepar o no al Éverest del registro. Y lo que dijo respecto a la canción, fue el martes y después cantó una parte con infinita dulzura. Anoche cuando pidieron Zamba del carnaval, fue cuando coqueteó mimosón y al mismo tiempo honró al compañero, Manuel Moreira, quiso exaltar el valor de una voz entera y en plenitud queriendo reconocerle más derecho que una voz - la suya - que como el Malevo puede andar alguna vez desconociéndolo...
No le queda bien ese aire de pobrecito, él mismo lo reconoció como una estrategia -"dar lástima siempre me dio buen resultado" - Hombre inteligente y experimentado, debería darse cuenta que aquí y ahora más que nunca debe renunciar a ese "buen resultado", más que nunca debe demostrar -maestro- que sin importar el resultado nos entrega un fruto real y no una manzana de cera y que vale y comunica y emociona y estimula, por ser verdadero, porque "está siendo" en el momento de la entrega y que confía también en la madurez y en el cariño del público (que en parte ayudó a educar) como para que la admiración no disminuya sino que se enriquezca, fresca sí, pero sabia, a pesar de no perpetuarse en el verano y la gimnasia olímpica de sus virtudes. El mismo país, necesita un mensaje así y si bien Sólo Dios sabe,... sigue necesitando ayudantes.
Dolina canta precioso cuando no se empeña en gritar. Incluso el mismo Moreira que ha cantado mil veces la Zamba del Carnaval, con interpretaciones extraordinarias - y una o dois de leyenda a Dúo - anoche la gritó y no conmovió sino que resultó admirable su registro.
¿Qué tal Horacio Molina que casi susurra cuando canta?... sin embargo en LVST muchísimas veces se han pasado sus canciones. Y Alejandro aquí y ahora, tiene mil veces más voz que H.M.
Así que guárdense su lástima deprimente, que no sirve, no es útil. Y si fue "compasión" o transferencia, lo fue desde lo actoral. Sí fue real como actitud eso de "pasarle los atributos" a Moreira, pero más allá del bello gesto de cariño y reverencia, carece de lo esencial : verdad. Porque Dolina no está terminando, está cambiando. Y no destructivamente : al menos esa tarea le corresponde a él. La cosa se ha vuelto más decantada y sólida, más lejos del error. El símbolo,... el símbolo es con el que juega y abre el juego.
¡La Gallinita, todos con Barton,... un himno al optimismo y una invitación a crecer y soñar y pelear y defender! :) Beso.
*dos
Gracias Viyi por tu referencia respetuosa a mi comentario.
No dije que Dolina se esté terminando, sólo expresé mi emoción ante el reconocimiento que hizo de sus limitaciones actuales. Si estaba actuando, en verdad lo hizo muy bien porque al menos a mí me convenció (y me conmovió).
El sentimiento de lo efímero de la vida, o "angustia existencial”, no tiene por qué necesariamente ser sinónimo de estar llegando al final. En la referencia que hice, al príncipe Siddharta le ocurrió alrededor de los 25 años.
Y tampoco tiene por qué ser algo deprimente, por el contrario. Si se logra canalizar la angustia de manera positiva, puede ser (como lo fue para Siddharta) el comienzo de un camino de crecimiento espiritual que lo llevará (al menos eso creemos los que tenemos fe en ello) al destino más glorioso que aguarda al ser humano: la (re)unión con lo Absoluto y la superación total y definitiva del sufrimiento.
Tercer integrante ya. Marcha y piquete.
(p.d. el groncho de Coco Sily no)