Hoy, 17 de octubre del 2013, es el « Día Mundial para la erradicación de la extrema pobreza »
Aquí en Francia, donde vivo, sobre una población de 60 millones de personas, se cuentan 10 millones de pobres.
Mas de 6 millones de personas no tienen trabajo.
Desde que yo llegué a este país en 1999 la miseria fue en aumento. Es cierto que un 10 % de la población fue enriqueciéndose cada vez mas ; pero el 90% restante se fue empobreciendo paralelamente.
Ahora esta comenzando la temporada fría, el otoño y luego el invierno que durara hasta junio del año que viene.
33.000 personas viven entre la calle y los centros de emergencia. Su esperanza de vida es de 43 años. 150 personas mueren en las calles.
No me voy a extender por ahora, pero creí conveniente contarles un poco lo que pasa en este lado del mundo. No hablé de política, ni de partidos ; solo hago una foto de la realidad. Si, LA REALIDAD.
En otras partes del mundo se podrá efectuar el mismo procedimiento, si la realidad se pira de esta manera.
La cosa vendría a ser mas o menos así : imaginemos que en nuestra familia cercana hay una persona que esta pasando necesidad ; y nosotros, sabiéndolo, no hacemos nada por ella. Es normal ?
Es exactamente lo que esta pasando en el mundo : nuestros hermanos/as se están muriendo de hambre, de sed, de falta de ropa, de casa ; y lo que es peor, de soledad, de discriminación, de indiferencia...
Esto es cierto.
Una pregunta se impone : qué podemos hacer al respecto ?
Lo que sea, cualquier cosa, algo que contribuya a cambiar las cosas. Primero tomamos conciencia, luego seguimos conscientes e intentamos hacer algo en donde estemos.
Pero nunca mas, neguemos que esta realidad existe, que es, que en nuestra familia, hay gente que esta sufriendo a causa de la miseria.
Un gran abrazo a todos
"Para que califiquemos de ignominiosa a una realidad es porque ya salimos de ella y podemos juzgarla desde la conciencia critica. Por eso el hambre no es revolucionario,la miseria no es revolucionaria,porque por sí mismas no garantizan nada; al contrario,lo que garantizan generalmente son situaciones primitivas,barbáricas e irracionales que arrojan a los hombres a ser fácilmente manipulados por el fascismo.Ahora la conciencia del hambre es otra cosa, ya es un paso cualitativo. Una cosa es tener hambre y otra cosa es tener conciencia de que se tiene hambre. Una cosa es padecer la injusticia y otra es tener conciencia de la injusticia que se padece. Ahí es cuando la razón y lo fáctico,la materialidad, se unen y se genera un hecho acaso transformador de esa realidad.No hay posibilidad de transformar ninguna realidad si no hemos tomado conciencia de ella y no hemos asumido que esa realidad no debe ser,debe cambiar.
(...)
La primera tarea de un revolucionario es advertir que este no es el mejor de los mundos posibles.¿Cómo advierte esto el revolucionario,cómo lo ve?Desde la idea de otro mundo posible.Es solo desde un proyecto superador que yo,desde mi facticidad presente,concibo una situación que es un ir mas allá de esta facticidad.Así, volviendo desde mi pro-yecto de superación hacia mi presente facticidad es que esta se me vuelve intolerable.No se me podría volver intolerable si yo no fuera capaz de imaginar algo mejor.(...) Esta racionalidad enfrenta la realidad como algo antagónico a ella,como algo que debe ser transformado.
(...)
el hambre, solo el hambre, no hace revoluciones.Las revoluciones las hacen el hambre y la conciencia del hambre.De aquí que el conocimiento,la filosofía,las ideologías,los sistemas de pensamiento alternativos a lo fáctico,a lo presente,a lo que se nos impone como indubitable y único,son las herramientas críticas que nos llevan a la certeza de que algo distinto es posible.
(...)
El hambre de por sí, no produce nada.Una situación de injusticia puede ser eterna si no se le añade la conciencia de esa situación.La injusticia "se ve" desde un futuro en el que ella no existe. "
José Pablo Feinmann. "La filosofía y el barro de la historia"Págs. 76,77,82 y 83. Editorial planeta.
Cuando era chico, no comprendía nada del mundo ; para mi, solo existía lo que estaba alrededor de mi nariz.
Cuando escuchaba hablar de la edad adulta y de la madurez, me reía, creyendo que eso era un invento.
Cuando mi madre me decía que coma, que en el mundo había niños que no tenían, no me importaba, no me llegaba, era otro mundo.
Nunca pensé que yo iba a pasar necesidad, pero paso.
Ahora ya no soy yo ; ahora soy uno mas. Quienes sufren ya no son los otros ; ahora sufrimos todos.
Gracias a ustedes por comprender, nuevos amigos y hermanos del foro. Yo sé que ustedes también sufren, a veces mas y otras menos. Pero no todo esta perdido.
Nos gustan las locuras del maestro Dolina, del chabón eterno que también la yuga cada día para existir ; y con él nos embarcamos, riéndonos de sus firuletes, intentando comprender sus calenturas, ayudandole a remar contracorriente. La vida.
Salud amigos. Y como hoy decía alguien : « no hay que bajar los brazos »
La conciencia crítica es también una distancia, una separación histórica, una construcción cultural que por el mismo hecho de dotarnos de conciencia también nos dota de inconciencia frente a lo que se ha separado, es la separación misma.
No se puede revertir el camino, al mismo tiempo que tenemos hambre también tenemos conciencia del hambre, el artificio se impone cuando la conciencia (distancia) del tener hambre viene como recuerdo, como espejismo de lo que es aquello sin ser; lo uno no se produce sin lo otro, no es posible tener conciencia del hambre sin haber tenido hambre...la conciencia es un artificio, una especulación sin raiz, en nada le agrega al hambre lo que tiene de hambre; a lo que apunta Feinmann es una especie de conciencia política del hambre. Ahora que el mundo padezca el hambre por el hambre sin conciencia es porque tal vez en el hambre hay un elemento que no permite el salto y que solo políticamente puede suplir la caridad; la caridad es un arma de doble filo, le quita el hambre al hambre y le quita conciencia de hambre al hambre.
Por eso la revolución es primitiva y barbárica, no obedece a los imperativos morales, sino a la racionalidad más pura y llana del -tengo hambre-. Primero es la revolución, después la historia.
Hoy, 17 de octubre del 2013, es el « Día Mundial para la erradicación de la extrema pobreza »
Aquí en Francia, donde vivo, sobre una población de 60 millones de personas, se cuentan 10 millones de pobres.
Mas de 6 millones de personas no tienen trabajo.
Desde que yo llegué a este país en 1999 la miseria fue en aumento. Es cierto que un 10 % de la población fue enriqueciéndose cada vez mas ; pero el 90% restante se fue empobreciendo paralelamente.
Ahora esta comenzando la temporada fría, el otoño y luego el invierno que durara hasta junio del año que viene.
33.000 personas viven entre la calle y los centros de emergencia. Su esperanza de vida es de 43 años. 150 personas mueren en las calles.
No me voy a extender por ahora, pero creí conveniente contarles un poco lo que pasa en este lado del mundo. No hablé de política, ni de partidos ; solo hago una foto de la realidad. Si, LA REALIDAD.
En otras partes del mundo se podrá efectuar el mismo procedimiento, si la realidad se pira de esta manera.
La cosa vendría a ser mas o menos así : imaginemos que en nuestra familia cercana hay una persona que esta pasando necesidad ; y nosotros, sabiéndolo, no hacemos nada por ella. Es normal ?
Es exactamente lo que esta pasando en el mundo : nuestros hermanos/as se están muriendo de hambre, de sed, de falta de ropa, de casa ; y lo que es peor, de soledad, de discriminación, de indiferencia...
Esto es cierto.
Una pregunta se impone : qué podemos hacer al respecto ?
Lo que sea, cualquier cosa, algo que contribuya a cambiar las cosas. Primero tomamos conciencia, luego seguimos conscientes e intentamos hacer algo en donde estemos.
Pero nunca mas, neguemos que esta realidad existe, que es, que en nuestra familia, hay gente que esta sufriendo a causa de la miseria.
Un gran abrazo a todos
Gracias por la info DAC, uno de noticias internacionales suele escuchar guerras o escándalos. Pero muy poco de realidades sociales.
Saludos.
"Para que califiquemos de ignominiosa a una realidad es porque ya salimos de ella y podemos juzgarla desde la conciencia critica. Por eso el hambre no es revolucionario,la miseria no es revolucionaria,porque por sí mismas no garantizan nada; al contrario,lo que garantizan generalmente son situaciones primitivas,barbáricas e irracionales que arrojan a los hombres a ser fácilmente manipulados por el fascismo.Ahora la conciencia del hambre es otra cosa, ya es un paso cualitativo. Una cosa es tener hambre y otra cosa es tener conciencia de que se tiene hambre. Una cosa es padecer la injusticia y otra es tener conciencia de la injusticia que se padece. Ahí es cuando la razón y lo fáctico,la materialidad, se unen y se genera un hecho acaso transformador de esa realidad.No hay posibilidad de transformar ninguna realidad si no hemos tomado conciencia de ella y no hemos asumido que esa realidad no debe ser,debe cambiar.
(...)
La primera tarea de un revolucionario es advertir que este no es el mejor de los mundos posibles.¿Cómo advierte esto el revolucionario,cómo lo ve?Desde la idea de otro mundo posible.Es solo desde un proyecto superador que yo,desde mi facticidad presente,concibo una situación que es un ir mas allá de esta facticidad.Así, volviendo desde mi pro-yecto de superación hacia mi presente facticidad es que esta se me vuelve intolerable.No se me podría volver intolerable si yo no fuera capaz de imaginar algo mejor.(...) Esta racionalidad enfrenta la realidad como algo antagónico a ella,como algo que debe ser transformado.
(...)
el hambre, solo el hambre, no hace revoluciones.Las revoluciones las hacen el hambre y la conciencia del hambre.De aquí que el conocimiento,la filosofía,las ideologías,los sistemas de pensamiento alternativos a lo fáctico,a lo presente,a lo que se nos impone como indubitable y único,son las herramientas críticas que nos llevan a la certeza de que algo distinto es posible.
(...)
El hambre de por sí, no produce nada.Una situación de injusticia puede ser eterna si no se le añade la conciencia de esa situación.La injusticia "se ve" desde un futuro en el que ella no existe. "
José Pablo Feinmann. "La filosofía y el barro de la historia"Págs. 76,77,82 y 83. Editorial planeta.
Cuando era chico, no comprendía nada del mundo ; para mi, solo existía lo que estaba alrededor de mi nariz.
Cuando escuchaba hablar de la edad adulta y de la madurez, me reía, creyendo que eso era un invento.
Cuando mi madre me decía que coma, que en el mundo había niños que no tenían, no me importaba, no me llegaba, era otro mundo.
Nunca pensé que yo iba a pasar necesidad, pero paso.
Ahora ya no soy yo ; ahora soy uno mas. Quienes sufren ya no son los otros ; ahora sufrimos todos.
Gracias a ustedes por comprender, nuevos amigos y hermanos del foro. Yo sé que ustedes también sufren, a veces mas y otras menos. Pero no todo esta perdido.
Nos gustan las locuras del maestro Dolina, del chabón eterno que también la yuga cada día para existir ; y con él nos embarcamos, riéndonos de sus firuletes, intentando comprender sus calenturas, ayudandole a remar contracorriente. La vida.
Salud amigos. Y como hoy decía alguien : « no hay que bajar los brazos »
Dale con el verZo!!!
Retrogrados
"Mr Gorbachev tear this wall down"
No dac nunca bajar los brazos (sobre todo cuando te chorean)
La conciencia crítica es también una distancia, una separación histórica, una construcción cultural que por el mismo hecho de dotarnos de conciencia también nos dota de inconciencia frente a lo que se ha separado, es la separación misma.
No se puede revertir el camino, al mismo tiempo que tenemos hambre también tenemos conciencia del hambre, el artificio se impone cuando la conciencia (distancia) del tener hambre viene como recuerdo, como espejismo de lo que es aquello sin ser; lo uno no se produce sin lo otro, no es posible tener conciencia del hambre sin haber tenido hambre...la conciencia es un artificio, una especulación sin raiz, en nada le agrega al hambre lo que tiene de hambre; a lo que apunta Feinmann es una especie de conciencia política del hambre. Ahora que el mundo padezca el hambre por el hambre sin conciencia es porque tal vez en el hambre hay un elemento que no permite el salto y que solo políticamente puede suplir la caridad; la caridad es un arma de doble filo, le quita el hambre al hambre y le quita conciencia de hambre al hambre.
Por eso la revolución es primitiva y barbárica, no obedece a los imperativos morales, sino a la racionalidad más pura y llana del -tengo hambre-. Primero es la revolución, después la historia.
"pretender que hay un dios PÁJARO, padre e hijo"!!!!