Programa desde el auditorio de Radio Nacional
Dolina, Barton, Schultz
PARTE INICIAL:
- Limpieza de techos en los fines de semana largos
SEGMENTO DISPOSITIVO:
- Hernán Cortez y Catalina Suarez
- Olvido (Charro)
SEGMENTO DE HUMOR
Pase por linda usted que es un escracho: ganar unos pesos extra vendiendo empanadas
Oh! Darling (The Beatles)
SORDO GANCÉ:
- Tirana unitaria
- Bajo Belgrano
- Arrabal amargo
- Nowhere man
- Baby on board
- Azul y blanco
- Surfer girl
- Llorando de Aerosmith
- Himno de Liverpool
- Calipso bananero libre
Adolfo:Estuvo buenísimo que el Himno en el minuto inaugural del Bice, se cantara desde Ischigualasto en su patria chica.
Dosmas:Es que si ponian a Mundstock o V.Hugo, por solo nombrar a alguno, nos hubieramos perdido la riqueza del lenguaje, la concienzuda sabiduría, hija de la experiencia en el tema, de estos jóvenes conductores.
Cómo del palo, no te pareció que la iluminación del escenario , era impiadosa?Sentí que quitaba clima,no sé, será que estoy acostumbrada a otra cosa.
La presentación audiovisual, me gustó, a mi pesar, pero, como hace cien años,una élite de dudosa chapa, adentro;la gente, afuera.
La Boheme estuvo bien.También el ballet, sin entrar en detalles.
El programa de Dolina, divertido, pero lo escuché mechado con el espectáculo de tango.Grossos en el escenario.La Tana Rinaldi, mi Dios, lo que sigue dando esa mujer.
Hola!
Muy buenas a todos los foristas (a los que siempre copan la banca, y a los que volvemos como el ave Fénix, contemplando el nulo y desacertado espíritu que -se supone- debería reunir a un foro de internautas agrupados bajo un programa como LVST. Pero no: siempre hay espacio para un "ohhh, soy el primero. Canto pri!", etc... Como sea, muy buenas a todos).
Me preocupa esta superstición nominal en alusión a la independencia. He visto estos días, paseando por Buenos Aires, una agitación de banderas que parecieran llevarnos a un lugar mejor. He visto demasiadas gargantas inflamadas por gritos amorosos hacia la patria (prefiero ponerlo en minúsculas, si no se ofenden), tal y como sucede cuando estos 11 señores que sudan y corren detrás de una pelota, vienen a representar para muchos una cuestión mesiánica.
En estos últimos tiempos -terminadas las dictaduras de fuego y comenzadas las dictaduras liberales (¡vaya contradictio in adjecto!)- podemos concluir que lo único que queríamos era llegar hasta aquí. Aquí tenemos nuestros 200 años...
Y ahora qué? acaso el ombliguismo porteño se termina luego de las 00 hs? pensemos, porque quizás sea hora de no escalafonarnos. O es que acaso el “patriotero” que sale hoy con su bandera y su Megane a florearse por Buenos Aires, es más que otro de Salta que, sin Renault y sin trapo, no dudaría en tomar un palo y derramar su sangre? Como sucedió antes: el campo se llenó de sangre y la ciudad, de adoquines.
Mirar la historia desde el onanismo es uno de nuestros grandes pecados como sociedad. No engañemos a nadie, pero menos a nosotros: el argentinismo está degradado. Degradado desde el momento en que los boeing de American Airlines se atiborraban de viajeros a Miami. Desde el momento de la indignación social pre satori/socialista/pseudo-anarquista/justiciera post tocada de culo bancario.
Nuestros festejos, estos escenarios, estas luces, estos himnos a voces y estos lagrimales epilépticos son fruto de una emoción prefabricada made in (no importa, usa?) de enaltecimiento a los símbolos, antes que el enaltecimiento a las personas que hicieron este país desde abajo. Y desde abajo también quiere decir varias capas debajo del suelo que pisamos.
No hago política. Pero este carnaval poco tiene que ver con nosotros. Esta alegría auspiciada desde la cúpula del poder, más parece un spot de Quilmes que una reivindicación de los valores intrínsecos que nos hacen hermanos. Hermanos. Hermanos entre nosotros. Es una pena, vivimos en un país de primos.
Aquí se enreja, se roba, se mata, se condena, se corrompe; aquí cada uno es su país y su ley; aquí la solidaridad no existe, salvo cuando hay inundaciones y Tinelli pone las cámaras para decir que “somos un pueblo grosso”; aquí se condena a los pobres por serlo, se los juzga, y -peor- se los prejuzga. En el obelisco están el del Megane con su bandera gritando fuerte “viva la patria”, mientras se resguarda de un “negro”, cuya cabeza pedirá mañana a la mañana en alguna radio, entre afonías ostensibles.
De qué cosas tenemos que enorgullecernos hoy? De ser un país equitativo? De sentirnos todos iguales? De tener 0% de analfabetismo? De un sistema de salud óptimo? De una juventud con expectativas? De una ancianidad digna? De una política laboral justa? De una indudable nutrición para todos?
Si algunos ven aquí las palabras de un demagogo, pido perdón. Pero es que yo creo -sin escarapela y sin Aurora- en la potencialidad de un pueblo que hoy no está festejando el bicentenario de su patria, sino un número redondo que los hará aparecer en los libros de historia.
Hoy no hay independencia, hay Charly, hay Maradona, hay Quilmes y Coca-Cola. Hay, luces, hay color, hay alegría obligatoria y euforia colectiva. Hay protocolos de exaltación y besos al suelo. Hay lagrimas por un sentimiento parecido al de la navidad, de estar aquí y ahora, juntos.
Empecemos a planificar cómo van a ser nuestros próximos años. Pero no los siguientes 200, como decían algunos sumidos en esta anarquía fervorosa. Hagámoslo seriamente y construyamos una Argentina grande y bendita. Diferente al hoy.
Gran abrazo.
Nico.
Nicolás:puedo coincidir total y/o parcialmente con vos; algunos, no somos tontos.
Pero pienso que son muchas las variables que han producido la masiva presencia de la gente en la calle, sin el "miedo", que aparentemente debiera tener.
Tal vez, el poder festejar algo, y hacerlo aunque sea, en esta democracia tuerta, coja, hipoacúsica y seguramente deudora.Dejalos ser, dejános ser.
Serios despachos en disidencia en particular, Nicolás, a pesar de que en general coincido. Los símbolos sí que importan, me parece. El ombliguismo porteño nació con este país ¿Alguien puede decir lo contrario? Los doscientos años llegan y se van y ya está.
Y este carnaval (que algo de eso habrá, así como habrá personas y personitas que realmente se emocionan con el himno) tiene necesariamente que ver con nosotros.
La solidaridad no abunda entre el género humano, pero sí que hay maestros que enseñan por casi nada, médicos que curan porque son médicos, automovilistas que no pisan el paso de peatones, hospitales donde te tratan como persona y viejas que respetan el turno en la cola. Hay de eso también.
Y el pueblo no delibera ni gobierna sino a través de sus representantes, así que si vamos a empezar a planificar los próximos doscientos años, sería conveniente que eceptáramos que siempre estamos haciendo política y que debemos acordarnos de todas estas cosas a la hora de elegir, y no ejercer una indignación inmovilizante, pajera y cholula que conduce cosas muy parecidas al suicidio colectivo.
Abrazos
"Hoy no hay independencia, hay Charly, hay Maradona, hay Quilmes y Coca-Cola. Hay, luces, hay color, hay alegría obligatoria y euforia colectiva. Hay protocolos de exaltación y besos al suelo. Hay lagrimas por un sentimiento parecido al de la navidad, de estar aquí y ahora, juntos. "
Yo creo que Nicolás tiene razón. hay cosas que uno ve en su profesión/trabajo todos los días y que probablemente no lleguen a los grandes "oídos", a los grandes "hermanos" de la patria. Uno ve los deseos de los chicos de las escuelas primarias del Bajo Flores, que piden como objetivo para este Bicentenario "que no haya discriminación" "que haya agua, que no se corte la luz". Ve a adultos que están en el secundario y , a pesar de esto,apenas están alfabeitzados, . A gente que concurre a las escuelas sólo por las becas. La desesperación de los alumnos por las viandas en los recreos. La pobreza. Las dificultades de aprendizaje. Los embarazos no deseados. Pero se ve también la falta de interés, el no comprometerse con nada, la chatura, la mediocridad generalizada, heredada probablemente de los años 90. Se ve la política del nivelar para abajo.
Me parece que está bueno festejar y dissfrutar de estos días. Pero también habría que pensar qué vamos a hacer después o, mejor dicho, qué decisiones va atomar la clase política argentina, porque, individualmente, es muy difícil remarla.
Gracias Dolineador, por representar con las mejores palabras que este pais pudo ofrecerle a la literatura mundial. Nada mas preciso y escalofriante, que la Patria como responsabilidad de los actores del presente.
Mmmnosé... Hablar de la clase política argentina como si no los hubiésemos elegido nosotros mismitos no me cierra.
EXCELENTES LAS PALABRAS DE NICOLAS ULRICH. ME SUMO AL 100%. ADEMAS SUPER BIEN ESCRITO. TANTO CARNAVAL PA NADA
FELICIDADES A QUIENES LAS ACEPTEN
...y como sil los políticos no estuvieran hechos de la misma materia que compone al resto de la sociedad.
Y como si no se les viera a la legua la calaña de la tal materia, Matías. ¿A alguien lo sorprende de qué está hecho Macri? Permiso, voy a tirar la cadena...
Por eso digo: "habría que ver qué VAMOS a hacer después". Pero Adolfo tiene razón en una cosa: "el pueblo gobierna a través de sus representantes".
Noo, Andrea, qué voy a tener razón yo. Es un texto que le choreé a la Constitución!!
Saluten
Buenas tardes para todos..
Feliz Bicenternario desde una ciudad lejana, la extraña Asuncion del Paraguay.
Agradezco el privilegio de vivir en esta epoca extraño boñudeces de mi pais pero extraño mas que nada esos deseos de progresar de manera inteligente, de hacer las cosas mas y mas idoneas para todos... ese ambiente de intelectualidad que nos hace tan unicos...
Eso es lo que celebro este dia del bicentenario... Lo paso trabajando sin celebrar nada... porque aca no es nada ni significa nada... pero hoy cuando entre a trabajar con la escarapela argentina, me sentire al menos un poquito patriota y un poquito (solo eso) orgulloso de los laureles que supimos conseguir.. a seguir laburando, vermut con papas fritas y ...GOOD SHOW!
Uhhh! Pero el tema de la soberanía popular y la delegación del poder es muy anterior a nuestra Constitución! Ahí los tiene a Rousseau, a Fco. Suárez, etc. etc.
Me refería, Adolfo, en mis mensajes anteriores, a que por más que yo vea individualmente, los problemas con los que me enfrento cada día, no puedo luchar yo sola contra eso.
Así es, así es, Andrea Silvina. Tiene toda la razón. Yo iba a que a mí la indignación exacerbada me hace ruidito. Es decir, sería bueno canalizar esas energías hacia un lugar desde el cual se hicieran proactivas. Por supuesto que no me refiero a heroicidades en el día a día: eso conduce a la decepción. El lugar natural para eso no es otro que la política. La militancia, desde donde se pueden cambiar algunas cosas en este sistema que tanto nos ha costado.
Saludos
JaviB:Está muy bien .Vaya con la escarapela argentina, pero al menos en mi nombre, pidale a un tiempo, perdón a ese pueblo paraguayo, por lo que algunos de nuestros "próceres" le hicieron hace mas de un siglo.
Es muy cierto lo de la decepción, Adolfo. Una a veces se cansa de darse tantos golpes.
Permítanme DISCENTIR COMPLETEMANTE con Nicolás. (Bueno, parcialmente, pero solo en muy poco) Estaría de acuerdo si hubiera visto los actos desde afuera mientras me depilo las patas, pero habiéndome tomado la molestia de prestar atención, le digo que NO, que esto no fué patrioterismo made in nada.
El sentimiento acá pasó por la calidad de los artistas, por los Victor Heredia, los León Gieco y toda la troupe de artistas nacionales y latinoamericanos que se gastaron por decirnos algo sobre nosotros mismos.
Hubo pocas banderas (salvo para el himno) y MUCHO SENTIMIENTO! No crea que esto no se trató de reflexión a pleno. De memoria, integración y esfuerzo! Esto es precisamente todo lo contrario a lo que ud. dice, Sr Nicolás. Por algo el negro estaba ayer tan contento.
"MADE IN" fué la noche del Colón. Pero el obelisco fué nuestro.
Recién ahora escucho el programa. ¿Asi que Portal puso la frase de Dolina "el universo tiende al olvido" como una "bolufrase"? Con razón nunca me cayó bien el ultimamente
pedófilo-friendy conductor.
Nicolás refleja frustración en sus palabras, habla de alegría obligatoria como si eso fuese cierto o una verdad irrebatible, yo veo gente alegre, tanta como no vi en mis 48 años de vida y la comparo con la gente triste, desesperada y desesperanzada de hace unos años, eso es porque estamos mejor, no llegamos a los objetivos máximos pero eso no implica deber estar amargados, hay motivos para festejar hoy, espero que cada día sean mas ;)